El Racing ya es favorito al play off

Los verdiblancos tienen uno de los calendarios más asequibles. No solo porque se enfrentan a equipos de la zona baja –este dato tomado por sí solo sería engañoso, porque es contra los que más ha pinchado–, sino porque es posible que en las dos últimas jornadas se enfrente a equipos sin nada ya en juego. Algo factible en el caso del Real Zaragoza, rival en la jornada 41 en los Campos de Sport, y probable en la última, frente al Villarreal B. Además, se ve beneficiado por los muchos enfrentamientos directos que restan entre los equipos de cabeza, en los que necesariamente algunos de los adversarios directos se dejarán puntos. A cambio, los de José Alberto López no tienen ninguno.

Opta Analytics, firma dedicada a la estadística deportiva y a elaborar previsiones con Big Data, hizo públicas el pasado fin de semana, justo antes de que se disputará la jornada 39, sus pronósticos para Segunda División. Una jornada después algunos equipos han perdido opciones tras empatar o perder sus partidos, pero ofrece en cualquier caso un acercamiento a lo que pueden deparar las últimas jornada. Su motor no solo analiza todos los resultados posibles, sino que también los pondera teniendo en cuenta el potencial de los clubes en liza y sus dinámicas.

De esa prospectiva se deducía que el Racing tenía, ya antes de enfrentarse al Mirandés, un 54,1% de posibilidades de disputar la fase de acenso (y un 0,3% de ascenso directo). Entonces era sexto clasificado con 58 puntos, los mismos que el Real Oviedo (quinto) y el Elche (séptimo).

Al final de la jornada la victoria cántabra, unida a la derrota del Elche, le consolidó en puestos de play off, ahora con dos puntos de ventaja sobre su nuevo perseguidor inmediato: un Sporting a quien además tiene ganados los enfrentamientos particulares, con lo que en caso de empate a final de Liga los cántabros terminarían por delante. Además, ha recortado distancias frente al Espanyol, que empató y se encuentra ya a un solo punto, y el Eibar que firmó tablas con el Levante. Con estos resultados, sus posibilidades se ha incrementado y las del Elche han caído y es ya favorito para disputar la fase de ascenso.

En cuanto a las dinámicas, se acusan dos tendencias muy diferente. Por una parte, el Leganés está en caída libre. Los madrileños han cedido el liderato después de 27 jornadas. Llegaron a tener seis puntos de renta, pero solo han ganado uno de sus últimos ocho partidos (seis empates consecutivos, una victoria y la derrota de este fin de semana). Nueve puntos de 21 posible hacen incluso peligrar un ascenso directo que tenían casi asegurado.

En una situación similar se encuentra el Espanyol. La estadística se puede leer de muchos modos. Puede presumir de no perder desde la jornada 26, precisamente cuando cayó en los Campos de Sport ante el Racing, pero de esos trece partidos invicto solo ha ganado cinco, mientras que otros ocho han acabado en tablas. Se han dejado por lo tanto 16 puntos de los 39 posibles. Un buen promedio, pero no suficiente para el ascenso directo.

En el lado contrario, el Real Valladolid se ha vuelto imparable. No pierde desde el 17 de marzo, cuando lo hizo en A Malata frente al Racing de Ferrol. Desde entonces suma siete victorias y un empate en una espectacular dinámica que le ha llevado desde el séptimo puesto a liderar la clasificación. Una buena noticia además para el Racing, puesto que de todos los equipos en liza es el único que le ha ganado los dos enfrentamientos, tanto en el José Zorrilla como en los Campos de Sport, con lo que evitar a los castellanos en un hipotético play off es, por dinámica y antecedentes, evitar un complicado rival, quizá el más difícil actualmente. Sus posibilidades de disputar play off son escasas, menores al 20%, pero en su caso se debe a que es el principal candidato al ascenso directo.

Junto al Valladolid, el Racing de Ferrol es el otro equipo que supera a los montañeses en sus enfrentamientos particulares. Los gallegos ganaron 1-3 en los Campos de Sport y el partido de A Malata terminó en empate.

Igualados tienen los verdiblancos sus enfrentamientos particulares con el Espanyol y el Real Oviedo, pero en un escenario poco propicio dada la diferencia de goles general, siguiente criterio de desempate en caso de empate a puntos al final de la competición regular. Ocho goles de renta positiva tiene el Racing, frente a los quince de sus rivales. Más extrema es la diferencia con el Leganés. Los dos enfrentamientos directos terminaron con idéntico resultado: 2-1 para el equipo local, pero los pepineros suman un +26.

A cambio, los cántabros superarían en caso de empate en la clasificación el Eibar (gracias al 4-0 en la jornada inaugural, que hizo insuficiente el 2-0 armero en Ipurua), Elche (solo un punto sumaron los ilicitanos en el Martínez Valero para parder después por 3-1 en Santander), Burgos (victoria por 3-0 en Santander y derrota por 2-1 en El Plantío) y el citado Sporting, al que doblegaron tanto en El Sardinero como en El Molinón.

Con este escenario, el Racing tiene encarrilada la clasificación para el play off, del que solo le sacaría una extremo bajón en las últimas tres jornadas. Al ritmo de puntuación que acumula durante todo el campeonato, terminaría la Liga con 65 o 66 puntos, una cantidad que no garantiza el pase, por lo convierte en muy factible. Con dos victorias en los tres partidos que restan los cántabros tendrían, dados los enfrentamientos directos que restan, virtualmente asegurada la fase de ascenso con 67 puntos. De hecho, desde que se implantó el actual sistema de ascensos a Primera solo en tres ocasiones (temporadas 11-12, 18-19 y 22-23) esta cantidad no ha sido suficiente para clasificarse entre los seis primeros puestos. Y en todas ellas el ritmo de puntuación entre los equipos de cabeza era en la jornada 39 muy superior al actual.