El Racing está que lo llena todo

El Diario se va de ronda para comprobar los 'otros llenos' del Racing. La Cafetería de Los Agustinos cuelga el cartel de no hay billetes todos los días de partido y la del Palacio de Exposiciones «no ha puesto tantos cafés como en este último año», admiten sus propietarios. La 'Racingmanía' ha cambiado hasta los hábitos y en algunos hoteles ya no solo vienen los aficionados visitantes sino que los de casa estiran el 'vicio'. «Hemos notado que gente de la provincia, si el Racing juega el sábado, se vienen el viernes y ya se quedan hasta el domingo», señala Sergio García de Neguera, propietario del Hotel Las Brisas, a escasos 400 metros de los Campos de Sport de El Sardinero. «Es un hotel con pocas habitaciones, pero casi todos los fines de semana se llena» y añade que los perfiles de clientes son muy variados. «Parejas o grupos de amigos de los equipos visitantes nos reservan mucho».

En La Parrilla de Ginés andan disfrutando de una 'segunda ola'. «Se parece a cuando estábamos en Primera, pero incluso hay más ambiente», indican Inés Fernández y Daniel Duarte, propietarios de un restaurante que se convierte en uno de los centros de reunión cada día de partido. «El día del Eibar fue increíble; el del Sporting se quedaron aquí a comer y a ver el partido muchos que viajaron sin entrada. Se llenó hasta que acabó», añaden.

En los bajos del estadio está La Tasca, que se queda pequeño irremediablemente. Eliana Hernández está preparando «las comidas para un grupo de 25» y aunque suspira también disfruta de esta ola en la que navega el Racing. «Depende un poco de la hora y de quién sea el rival. Entre semana un poco menos, pero los fines de semana siempre está lleno para comer y para todo», explica.

La Tienda facturando, los restaurantes doblando mesas, las cafeterías sin cafetera que dé abasto y los hoteles estirando el fin de semana y todo porque el Racing va lanzado. «Ha sido de este último año y medio para acá. Ahora está desatado, todo el mundo quiere estar», confiesa Inés Fernández, junto a esa parrilla donde cada fin de semana se trabaja a destajo. «Si el Racing gana nos quedamos sin ropa. Después del partido, si el equipo ha ganado hay colas.Cuando pierde un poco menos. El día del Cartagena lo notamos», recuerda Cabrero. Claro, para una vez que pierde el personal se debió tomar un respiro. Por un día...

David Fernández es uno de los propietarios de la Cafetería Agustinos y lo tiene claro.«Nosotros cogimos el negocio hace siete años y cada temporada ha crecido un poco más y ahora es una locura». El lugar se ha convertido en sede hasta el punto que ni la Fan Zone pudo con la rutina de los racinguistas. «Nada, aquel día la gente venía aquí. Dos horas antes del partido esto está lleno y después hay veces que no abrimos porque hay que limpiar todo y no nos da tiempo».

Todo es de color rosa. Pero eso sí, hay coincidencia. «Estando ahí arriba, líder y ganando, todo va como una moto», explica el dueño de la 'cafe' de Los Agustinos. Ahora solo falta que LaLiga no le dé por pensar demasiado. «Los horarios son claves; los sábados a las 17.00 o 18.00 horas... Perfecto. Cuando lo ponen los lunes a las 21.00 horas tenemos mucho menos», reconoce Duarte. Lo de jugar a las 14.00 horas también divide al personal, pero sigue llenando el graderío. «Hay tanta gente que no puedo dar comidas, no puedo salir a servir», explica el dueño de la Cafetería de Los Agustinos. En La Parrilla de Gines se reinventan. «Cogen un bocadillo y se van para el campo». Todo vale, pero hay que estar.