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El Racing quiere a IvánCrespo y ya trabaja en su continuidad. La idea del club es que el portero forme parte del nuevo proyecto que Jose Mari Amorrortu y Pedro Menéndez están cocinando a fuego lento para tomar la Segunda B. O al menos para ... lograr que el racinguismo esboce de nuevo una sonrisa después de una temporada que ha puesto a prueba su paciencia tras perder la pelea por sobrevivir en la división de plata. «Estamos interesados en que Crespo continúe. Es de casa y es el capitán. Por supuesto que estamos interesados en que se quede con nosotros. Algo ya se ha hablado con él», avanzó PedroMenéndez, secretario técnico del Racing.
La operación no está cerrada en estos momentos, pero el club ya ha tocado el tema de la renovación con el de Viveda y hay opciones de que se concrete en los próximos días, ya que tanto el Racing como el jugador muestran voluntad de entenderse. Ambos quieren contar con el otro en su futuro inmediato. El secretario técnico no quiso adelantar más detalles ni ahondar en la situación particular de ningún futbolista, a expensas de una planificación que iniciará a partir de este momento de la mano de la dirección deportiva. Aunque emplazó a la próxima semana para conocer los primeros movimientos que se están dando en los despachos de El Sardinero.
Por su parte, Crespo ya mostró hace días abiertamente su deseo de permanecer en el Racing. «El club sabe que mi ilusión es quedarme. Después de este año tengo aún más ganas», confesaba el portero en una entrevista a El Diario. En el club saben que el meta es un tipo experimentado y con peso en el vestuario después de lucir el brazalete de capitán varios años consecutivos. Además es un jugador de equipo muy comprometido. Compite bien y nunca se conforma. Con él el Racing tuvo un seguro de vida en la portería en las temporadas anteriores en Segunda B. Y es que en otros tiempos, la mejor arma de los verdiblancos, su defensa, empezaba bajo los palos. Crespo llegó a ser el portero menos goleado. Dueño y señor de la portería. Algo que cambió cuando la llegada de Luca Zidane y la mala suerte del cántabro –se lesionó en un partido de pretemporada y el marsellés se hizo con la titularidad– se conjuraron para relegarlo a un segundo plano. Le tocó calentar banquillo hasta que en la recta final de la temporada volvió a disfrutar de minutos. Para entonces el Racing ya había entrado en barrena. Y cuando un avión entra en barrena, o consigue enderezar el rumbo –nada fácil, por cierto– o se estrella estrepitosamente. Pero soplan aires de cambio. Y todo apunta a que Crespo tiene de nuevo el viento a favor.
Por ahora Amorrortu y Menéndez trabajan a destajo en las oficinas de los Campos de Sport, donde la luz vuelve a estar encendida de continuo, para esbozar las líneas maestras del nuevo proyecto verdiblanco. Poco se parecerá su manufactura del Racing a todo lo anterior. Un equipo que se prevé remozado y en el que se buscará rejuvenecer el grupo e inyectar savia nueva en el vestuario. Todo ello con una plantilla que estará determinada por las disponibilidades económicas del club y un mercado que será atípico. Sin olvidar que quizá toque volver la mirada a los productos de la casa. Aunque ser canterano del Racing es un oficio de riesgo. Es de esas profesiones en las que no se puede dejar pasar una sola oportunidad. Pero en esta nueva era los cántabros tienen la oportunidad de luchar contra factores externos y contra sus propios fantasmas, sentar las bases para el futuro y marcar un nuevo punto de partida. Aunque por muy diáfanas que sean las ideas iniciales, el fútbol entiende poco de discursos y planteamientos sólidos cuando la pelota echa a rodar. Al final es ella quien otorga y quita razones cuando, caprichosa, decide si entrar o no.
Ahora se trata de crear un proyecto que carbure. Y eso conlleva mucha organización e ideas claras. «Tenemos mucho trabajo.Solo con reordenar lo que nos han dejado ya tenemos mucho y estamos intentando organizarlo todo un poco para empezar a trabajar», cuenta Menéndez, que ya se ha arremangado para enfrascarse en la tarea de analizar, ver futbolistas, renovar y ajustar las bases de datos desde su desembarco en el club esta semana, que él mismo califica de «frenética».
IvánCrespo no es el único que quiere quedarse en el Racing. Otro cántabro, el canteranoMario Ortiz, aspira a continuar en el club un año más, pero el Racing aún no se ha puesto en contacto con él para hacerle una oferta. «No han hablado conmigo todavía, pero aún es pronto, acaban de aterrizar», señala el mediocentro, que reconoce que tiene ganas de quedarse en Santander, pero está a la espera de que el club mueva ficha. «Mi intención es seguir. Quedarme aquí. Supongo que me dirán algo, pero no se que intención tiene ellos», admite el canterano, que tenía una ampliación de un año más de contrato, aunque la cláusula estaba sujeta a la permanencia en Segunda División.
Por su parte, Jordi Figueras y Álvaro Cejudo sí están unidos contractualmente al Racing durante una campaña más. Y aunque ambos jugadores han expresado ya su intención de cumplir su contrato, es el Racing quien tiene a pelota en su tejado y debe decidir si puede o quiere mantener unas fichas que se presumen altas para Segunda B abocado, como estará, a subsistir con una economía de guerra. Y donde cualquier pellizco puede ser clave para construir un equipo potente que le permita luchar de nuevo por las primeras posiciones la próxima temporada y por el ascenso de categoría.
El Racing sigue sin decantarse por un entrenador mientras Javier Rozada, el que fuera principal aspirante hasta hace pocos días, continúa en su casa deshojando la margarita con el repiqueteo del 'Me quiere, no me quiere'. Aunque desde el club aseguran que «Rozada está entre los candidatos que tenemos, pero queremos abrirnos más vías. Valorar más perfiles con tranquilidad y elegir el que mejor se adapte al proyecto».
En el Racing buscan «un entrenador que crea en este proyecto, que va a estar formado por gente joven y gente de cantera, y que tenga mucha ilusión por seguir creciendo. Queremos un técnico que tenga mucho hambre por crecer y que crezca a nuestro lado», asegura Pedro Menéndez, secretario técnico del Racing. El club cántabro tenía prácticamente cerrada la contratación de Rozada, que incluso fue citado para firmar el martes por la mañana, pero la noche anterior la entidad verdiblanca decidió paralizar la operación sin argumentar el por qué.
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