Secciones
Servicios
Destacamos
Llegó a Santander en la era Piterman. Vivió la caída en picado a Segunda B. También fue testigo de los posteriores ascensos a la categoría de plata del fútbol y el ya histórico regreso a Primera División, gol de Moratón mediante. Mehdi Nafti (Toulouse, 1978) ... colgó las botas como jugador hace años y pasó a vestir el uniforme de entrenador. Después de su paso por clubes como Marbella o Mérida, del que ha sido cesado recientemente, ha sido seleccionado como técnico de las Sesiones AFE. Una iniciativa que se lleva a cabo en San Pedro del Pinatar (Murcia), y que brinda la posibilidad a futbolistas, afiliados y sin equipo, de poder entrenar y jugar para encontrar destino en el mercado de invierno.
-¿Qué supone para usted participar en estas sesiones de la AFE?
-Supone una curiosidad, porque es algo distinto. Pero también son muchas las ganas de aprender. Es otra experiencia para mí. Y lo que supone volver al terreno de juego, estar de nuevo en el césped.
-Y para los futbolistas ¿cree que es una iniciativa útil?
-Es una experiencia y sobre todo una oportunidad. Yo creo que en la vida todo el mundo merece una oportunidad y ellos ahora la tienen.
-¿Qué consejo les daría?
-Que disfruten. Que al final ser futbolista es el mejor trabajo del mundo. Yo sé de que estoy hablando, porque ahora mismo estoy viéndolo desde el otro lado, como entrenador. Ahora tienen una oportunidad. Tienen que disfrutar y tener siempre una sonrisa, porque van a ver el balón todos los días, van a oler el césped todos los días y por eso tienen que disfrutar de cada minuto.
-La temporada anterior, después de un inicio brutal con el Marbella ¿qué pasó para que el equipo dejase de funcionar y usted acabase cesado?
-La clasificación habla por sí misma. El año pasado en Marbella hicimos muy buenas cosas, pero entró gente dentro del club que ha hecho mucho daño a la plantilla y a la propia entidad. El club se separó de un gran director deportivo durante el mes de diciembre... Un despropósito. Eso suele pasar cuando hay gente que entra en una entidad buscando intereses propios más que el interés del equipo. Allí había un gran grupo de trabajo y todo se ha ido a la mierda.
-¿Qué lección sacó de esa experiencia?
-Que el fútbol es así. Que a veces, aunque se hagan muy bien las cosas al final hay aspectos que no se pueden controlar, que es lo mismo que ha pasado en Mérida. Y esas experiencias espero que me sirvan de cara al futuro. Ahora tengo 39 años y aún estoy aprendiendo esta profesión. Quiero trabajar desde la humildad y seguir creciendo como entrenador . Y aprender de esos 'palos'.
-Qué diferente es la exigencia de un entrenador a la de un futbolista...
-Es muy diferente. Es un trabajo muy duro de autocrítica permanente. Hay demasiados parámetros que un entrenador no controla, hay muchas cosas que no podemos dominar y eso frustra mucho. Pero también la pasión es enorme. El estrés, el dolor de barriga antes de un partido... Es una pasada. La gente igual no se lo imagina pero es duro.
-¿Cómo ha visto todo lo que le ha sucedido al Racing desde la distancia?
-El Racing ya está tardando en subir. Sé que este año lo tiene un poquito más complicado que el año pasado. Pero bueno, están ahí arriba. Lo más importante es llegar a las últimas jornadas con opciones de meterse en playoff. Por lo menos es un club que ahora tiene una estabilidad deportiva dentro de lo que cabe. La afición sigue siendo espectacular en su apoyo al equipo.
-Usted vivió parte de las vacas gordas del club cántabro ¿Se veía venir lo que pasó después?
-Han pasado tantas cosas que prefiero no opinar. Lo del Racing ha pasado en muchos equipos. Acumularon mucha deuda, bajaron y no han conseguido subir. Fueron momentos en que no se veía salida y de repente llega un inversor... Cuando yo llegué al Racing estaba allí Piterman... La verdad es que ha sido muy complicado tener estabilidad en el club porque han faltado recursos. Pero ahora está en un momento en que se está recuperando esa estabilidad. Están haciendo esfuerzos para estar al día. Por lo menos no hay tantos retrasos en los pagos como en años anteriores. Pero el Racing es el Racing. Solamente por la ciudad, la afición y el estadio, ya tienen que dar el salto a Segunda División.
-Conoce la categoría, ¿cree que el Racing tiene opciones de ascender esta temporada?
-Sí las tiene. Igual que el año pasado. Pero tienen que llegar a las últimas jornadas con el máximo de puntos posible. Meterse en el play off muchas veces es jugársela a cara o cruz, pero lo importante es que cojan confianza ahora en la segunda vuelta y que no se descuelguen. Incluso deben intentar colocarse primeros de grupo. Es posible porque están en un grupo donde todo está abierto. De hecho creo que es el grupo más abierto porque en el resto hay muchos 'gallos' como el Mallorca, que es intocable, o el Extremadura... Además con equipos que incluso pagan más que en Segunda División. En el grupo del Racing, en cambio, no creo que haya ningún equipo que vaya a destacar. Por eso tiene que aprovechar esa circunstancia. Reforzarse bien ahora en el mes de enero para intentar en la segunda vuelta subir hasta la primera plaza.
-Como jugador Mehdi Nafti era futbolista de mucho trabajo y carácter defensivo en el centro del campo, ¿cuál es su estilo o su filosofía como entrenador?
-El mismo estilo. Tengo la misma filosofía, en ese sentido no he cambiado. En el fútbol muchos entrenadores dicen: «Hay que correr y hay que correr bien». Pues yo creo que hay que correr bien y hay que correr mucho. Con intensidad y con agresividad, porque estamos hablando de categorías como Segunda B e incluso de la misma Segunda División, que si tu no corres más o eres más agresivo que el rival, yo creo que no hace falta ni llegar al plan B, que es hablar de estrategia y de táctica.
-¿Se ve entrenando en un futuro al Racing?
-Sí. Además es un deseo que tengo, es uno de mis sueños y me gustaría acumular el máximo de experiencia y de confianza para llegar al Racing, el día que me llamen, muy muy preparado.
-¿Qué recuerdo guarda de su paso por Santander?
-Lo primero el ascenso a Primera División en el penúltimo partido de Liga frente al Atlético de Madrid. El gol de Moratón. La verdad es que recuerdo cada minuto. También muchos entrenadores que me han marcado. Quique Setién, Manolo Preciado, Nando Yosu, Lucas Alcaraz... Llegué de Francia siendo un bebé y me acogieron como un cántabro más. Pasé cinco años espectaculares allí. El Racing, en España, siempre será el club que lleve en el corazón.
-¿Mantiene contacto con jugadores de aquella época?
-Sigo hablando con Pablo Casar, con Javi Guerrero, también he hablado con Pachín, el director deportivo, que me preguntó algo sobre un futbolista... Sí que tengo contactos ahí en el club.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.