El Racing toma forma sin canteranos

En aquella campaña los futbolistas formados en las instalaciones de La Albericia más que una promesa eran una realidad. Los datos lo avalan. De los 24 jugadores que tuvo a su disposición Paco Fernández en la primera plantilla, ocho (el 33%) se habían formado en las categorías inferiores. Los hermanos San Emeterio -Fede y Borja-, Saúl, Concha, David Puras, Mario Fernández, Óscar Fernández y Sergio Camus. Mientras que este año en la nómina fija de Ania para la pretemporada solo hay la mitad. Puras, Íñigo Sainz-Maza, Camus y Mirapeix. Auque en esa lista entra también Mario Ortiz, que regresó al club el año pasado en el mercado de invierno. Y que formen parte de la primera plantilla como tal -al menos así figura en la propia web del Racing- únicamente tres. Puras, Sainz-Maza y Ortiz son de la casa. A Sergio Ruiz no se le puede enmarcar dentro de ese grupo ya que llegó al equipo desde el Atletico Albericia para fomar parte del Racing B, ahora Rayo Cantabria.

En la última temporada con Paco Fernández en el banquillo -aunque estuvo al frente en 27 partidos y después fue susituido por Pedro Munitis- la cantera fue lo que sostuvo al Racing, al menos en el primer tramo de la competición. El encuentro que disputaron ante el Llagostera en la jornada 11 corroboró esta teoría. En el estadio de Palamós casi la mitad de la alineación titular estaba formada por canteranos. Samuel, Saúl, Fede, Concha y Koné participaron en la victoria ante los catalanes. Mario, indiscutible para su entrenador, no pudo jugar al no contar con el alta médica tras la rotura de fibras que sufrió en la pierna derecha. Pero lo que más llamó la atención en el Racing no es que los futbolistas formados en Santander sostuviesen al equipo, sino su juventud. Saúl, Concha, Fede, Borja y David Puras aún no habían cumplido 20 años.

Es cierto que la campaña pasada la presión por lograr el ascenso acuciaba al club, cuerpo ténico y directiva. Cuatro años en el infierno eran demasiados. Se apostó por acudir en masa al mercado para buscar un ascenso inmediato que asegurase la viabilidad económica del club. Así que se confeccionó un equipo a base de talonario con mucho jugador foráneo con un objetivo muy claro: llegar a Segunda División. Con la permanencia por meta, parece que este año el planteamiento no difiere demasiado. La cantera sigue siendo la asignatura pendiente de un club que quiere crecer desde abajo. Algo que contradice el viejo tópico que asegura que el vivero es lo que se utiliza en el fútbol cuando no hay dinero. Al menos en el Racing no es así, y eso que se enfrenta a una temporada marcada por una economía de guerra que según el propio director general del club, Víctor Alonso, puede ser el presupuesto más bajo de la categoría. Aunque también merece la pena hacerse esta pregunta, ¿qué necesidades se pueden cubrir con lo que ofrece el fútbol base del Racing? Le toca al míster y a Chuti Molina, el director deportivo, valorarlo y decidir qué cuota de protagonismo tendrá cada uno de ellos.

Además de Camus, Mirapeix, Íñigo Sainz-Maza y Chus Puras, en la pretemporada verdiblanca también se han dejado ver -aunque menos- Martín Solar, que disfrutó de minutos ante el Cayón, el tercer bolo veraniego del Racing, y Rafa Musy, que además de en Sarón también estuvo ante la Real y en Medina de Río Seco ante el Valladolid.

La pasada campaña Miguel Gándara, Mario Soberón y Javi Cobo también estaban en nómina, pero los tres han terminado emigrando con destino a Barakaldo, Valladolid y Sporting B por razones muy variadas: una oferta irrechazable, un futuro más esperanzador, probar suerte, buscar minutos... Hace ahora casi un año, en julio de 2018, fue Pau Miguélez quien abandonó el club, uno de los activos de la cantera que en un primer momento parecía llamado a ocupar un puesto en el primer equipo, pero que acabó entrenando por primera vez en los últimos diez años de su vida fuera de La Albericia. Fue con el filial del Girona, el Peralada, aunque ahora ha fichado por el Sevilla que le ha ubicado en el Sevilla Atlético.

La lista de los últimos es numerosa: Alberto Gómez Rodríguez, Sergio Camus, Ángel Díez, Josemi, Miguel Ángel Sainz Maza, Leandro Martínez Ortiz, Borja San Emeterio, Fede San Emeterio, David Concha, Jairo Samperio... Algunos son el ejemplo de la política bien hecha de cantera; formar jugadores para jugar en el primer equipo y si es necesario y ayuda al club, venderlos. Algo que reporta beneficio en el momento de la transacción y también a posteriori, porque con las operaciones futuras que protagonice el jugador de turno, se seguirá ingresando dinero. Como en el caso de los hemanos San Emeterio, Concha o Samperio.

Otro ejemplo es el de Marcano, que salió en la temporada 2009-10 rumbo al Villarreal por seis millones de euros y continuó este año reportando beficios. El jugador cántabro regresó al Oporto en un traspaso de cinco millones de euros y el Racing percibió por ello una cantidad en concepto de mecanismo de solidaridad.