El Racing trabaja en la cesión de Rober González

El atacante, cedido por el NEC, se convertiría en el segundo fichaje del mercado de invierno, tras el de Víctor Meseguer. De nuevo el club se reforzaría con un futbolista que se adapta a la perfección a las características de juego del equipo. Al igual que con Meseguer llegó un mediocentro con más capacidad creativa que ofrecía alternativas tácticas, ahora se persigue a un mediapunta que mejoraría aun más, también cuantitativamente, la mejor línea verdiblanca: la del ataque.

Extremo o mediapunta que ha llegado a jugar ocasionalmente como delantero, se trata de un perfil más de banda que los Íñigo Vicente y Andrés Martín, aunque también puede hacer la competencia, en caso de que su fichaje cristalice definitivamente, a Pablo Rodríguez en esa línea de tres jugadores que suelen actuar por detrás del delantero centro.

Formado en el Betis, Rober González pasó por dos cesiones a Las Palmas (la segunda de media temporada) y otra por el Alavés (también medio curso) antes de desvincularse de los béticos y comprometerse con el NEC Nijmegen de la máxima categoría neerlandesa. Después de un año y medio, ha llegado a un acuerdo por el que jugará como cedido en Santander hasta final de temporada.

Como bético llegó a disputar seis partidos en Primera División y a ser convocado por la selección española sub 20, aunque sin debutar y su mejor registro goleador fue el de la temporada 19-20, cuando con solo 19 años marcó ocho goles en los 30 partidos que disputó en Segunda División con la Unión Deportiva Las Palmas.

Posteriormente se marchó, una vez más cedido, al NEC, que al concluir su primera temporada en Países Bajos ejerció una cláusula de compra de algo más de un millón de euros para hacerse con sus servicios en propiedad hasta 2027. Ahora, el Racing busca la cesión -siempre la prefiere con opción de compra- de un futbolista que juega habitualmente en el NEC, situado actualmente en la undécima posición de la Eredivisie.

En caso de cerrarse la contratación del extremeño se cubrirán los objetivos básicos del mercado invernal. Las prioridades eran, por este orden, un mediocentro que compensara la baja de Íñigo, y un atacante distinto a los que ya juegan habitualmente. El elegido es Rober González y si la operación se rompe, se buscará alternativa.