Racing y Valencia llegan a un acuerdo para la marcha de Marco Camus rumbo al Mestalla

Un paso atrás en lo deportivo para el chaval, pero con la clara intención de coger carrerilla. Aunque es un futbolista con cartel en Primera RFEF, ha escogido la propuesta valencianista con la ambición de poder encontrar en algún momento un hueco en el primer equipo. Para ello, debe crecer. Y para crecer, necesita tener minutos. De paso, en Paterna fortalecerán su proyecto para llevar el filial a la tercera categoría del fútbol nacional.

Marco Camus se desvinculará definitivamente del club de su vida y pasará a ser propiedad de la entidad ché. Pero el Racing no cobrará cantidad alguna, al menos de momento. Sí que se reservan en los Campos de Sport algunos incentivos dependiendo de a dónde llegue el futbolista en el futuro.

Camus era una de las grandes promesas de la cantera verdiblanca desde bien pequeño. A las Instalaciones Nando Yosu llegó en categoría alevín, procedente del Bezana. Y durante muchas temporadas, rechazó ofertas de otros clubes para seguir vistiendo la camiseta racinguista. Debutó con el primer equipo en la temporada 2019-18, en Segunda División, de la mano de José Luis Oltra, cuando el cuadro verdiblanco ya estaba desahuciado y su descenso a Segunda B era un hecho.

Posteriormente, con la llegada de José Mari Amorrortu como responsable de estrategia deportiva, el santanderino es uno de los futbolistas de la cantera que dan el salto a la primera plantilla. Y tiene protagonismo, pero no termina de asentarse en el once titular. Lo mismo que un año después, en Primera RFEF. Disputa treinta encuentros, pero sólo doce como titular. Se estrena además como goleador, con buenas actuaciones, como la del 2-4 frente al Extremadura. Pero, un año más y la promesa no termina de explotar.

A pesar de todo, Guillermo Fernández Romo decidió contar con él tras el ascenso a Segunda División. Aunque su rol fue el mismo. Con el madrileño disputó 19 encuentros, pero sólo cuatro desde el inicio. El entrenador fue destituido y llegó José Alberto. El asturiano, prácticamente desde el principio, fue claro sobre Marco Camus. Le dio un cuarto de hora en Cartagena, a pierna cambiada. Y en Copa, frente al Linares, ni siquiera saltó al campo. No contaba con él. Así que, por primera vez, Camus se veía obligado a dejar su casa, la familiar y la futbolística, para buscarse las habichuelas.

Su destino fue el Córdoba, de Primera RFEF y presunto aspirante al ascenso al fútbol profesional. Parecía un buen destino para tomar confianza. Pero, tampoco. Entre que no se ganó al entrenador, Manuel Mosquera, y los problemas físicos, cerró su cesión con diez encuentros disputados y sólo dos como titular.

Con ese bagaje, era prácticamente imposible que pudiese hacer cambiar de idea a José Alberto. Además, la pretemporada tampoco le ha ido muy bien. Lleva varias semanas lesionado, así que ni siquiera ha podido disputar los últimos amistosos y tendrá que apretar para ponerse al ritmo de sus nuevos compañeros en el filial valencianista. Allí coincidirá con el también cántabro y exracinguista Simón Luca. Incluso podrían compartir banda izquierda.

Con su salida, el Racing liberará un hueco en la plantilla, pero no tendrá una repercusión relevante en el margen salarial, ya que Marco Camus no es de los futbolistas que más cobran en el vestuario verdiblanco. Sin embargo, visto que el club no cuenta con él y que el extremo tiene una edad en la que no conviene quedarse parado, a día de hoy su salida parece lo mejor que puede pasar.

Hasta que se cierre su salida definitiva -quedan prácticamente dos semanas de mercado de fichajes-, el santanderino sigue con su rutina habitual. Sigue como inquilino en la enfermería, así que ayer, tras comparecer junto al resto de sus compañeros en los Campos de Sport, se marchó con Jorge Pombo y Dani Fernández -los otros lesionados- y el preparador físico recuperador a las Instalaciones Nando Yosu de La Albericia, para trabajar en el gimnasio. Uno de sus últimos días en casa.