El reencuentro con el hijo pródigo

El veterano Mariño le suplió con solvencia y se quedó con el puesto, pero últimamente las tornas parecen cambiar de nuevo. El Granada encaja muchos tantos en los últimos partidos, una responsabilidad que no se puede achacar solo al portero gallego, pero su rendimiento fue mejor hace unas semanas, cuando dejó hasta cuatro porterías a cero. La buena actuación de Luca Zidane en Copa ha reabierto el debate y Escribá, lejos de ponderarlo, lo ha avivado

«Para mí es como cualquier posición -decía en la previa el técnico sobre la portería- . Hay entrenadores que no cambian y ya dije que estoy abierto a variar. Esto es rendimiento. Puede ocurrir. Jugadores que están mejor, los pongo. También, en función del partido puedo tomar decisiones. No digo que sea este sábado, pero sí me lo puedo plantear». En resumen, que las dos opciones son posibles: la continuidad de Mariño o que Luca se mida a un equipo en el que no queda ni un solo futbolista de su época.