«El rumbo que lleva ahora el club es el adecuado para volver a ser lo que era»

-Siete años después, ¿qué balance hace de su paso por la Fundación?

-Empezamos hace dos años y medio con la dirección de la Fundación y de las cosas que queríamos hacer estamos consiguiendo bastantes; ordenar la cantera, darle un orden y un sentido y lo que hemos hecho con los clubes convenidos y con más apartados. Estoy satisfecho.

-Se habla de la Fundación, pero realmente hay mucha gente que desconoce la labor que hace.

-Nos encargamos de la parte más social, deportiva e informativa del club. Gestionamos la cantera con sus campus y con más parcelas relacionadas con los chavales, pero también a nivel formativo con charlas a padres y al entorno de los pequeños. Nos interesa mucho la relación con los clubes de la región y con las instituciones. Firmamos convenios que no son tan conocidos con Ayuntamientos, por ejemplo, que es un aspecto social que nos interesa mucho.

-¿La Fundación trabaja paralela al Racing o desde dentro del propio Racing?

-Somos el Racing, pero la parte más social y formativa y nos retroalimentamos. Trabajamos para el Racing porque hacemos la formación de más de 200 chicos en el Racing y el objetivo prioritario es que la mayor parte de ellos pueda jugar en el primer equipo. Pero somos un complemento al club. El Racing no puede abarcar las facetas que tiene una institución con tanta importancia en la sociedad cántabra y la Fundación lo hace.

-¿Qué es lo que la ha dado la Fundación al Racing desde que se creó?

-Primero le da un orden. En los últimos años no ha habido una continuidad ni una idea clara y, después, le damos unos recursos: económicos, materiales y humanos. Las canteras necesitan recursos para ir creciendo y de eso se encarga la Fundación. De gestionar y de poner al alcance lo que se pueda para que el chaval crezca y desarrolle todo su potencial.

-Pero la labor no solo es deportiva, sino que en la trastienda está el trabajo de concienciación, ¿verdad?

-En la Fundación creemos mucho en la parte social de lo que hacemos. Hemos firmado 40 convenios en dos años y no solo lo hacemos porque de esos convenios vaya a salir un futbolista, que también, sino que queremos cultivar esa semilla racinguista. Desde la época de Santi Gutiérrez Calle no se había ido a entrenar con el Racing por la región y este año sí se ha hecho. Con eso se consigue una cercanía con la gente. El futuro pasa porque esos niños sean racinguistas.

-¿Qué ventajas tiene un club convenido con el Racing?

-El club convenido saca más ventajas que nosotros. Queríamos formalizar un acuerdo en el que diésemos un apoyo metodológico, social y económico. Si un futbolista debuta con el primer equipo reciben una compensación. Antes nos limitábamos a hacer una llamada al club si nos interesaba un chaval y ahora tenemos información casi semanal de cada equipo. Además Gonzalo Colsa, Mikel Martija y yo hemos estudiado cómo podemos ayudarles a los clubes. No tenemos todos los recursos que queremos, pero sí tenemos ganas e imaginación para ayudarlos. Ninguno de los que han firmado nos ha llamado para no renovar el convenio. Están a gusto.

-¿Qué diferencia hay entre las funciones que usted abarca y las de Gonzalo Colsa?

-Gonzalo es el director del fútbol base. Una cosa es que cuando él empezó yo me involucré con él, pero ahora vuela solo. El que toma las responsabilidades a nivel base es él y el que elige los jugadores, entrenadores... Yo no tengo tiempo para ayudarle y él es el que se encarga del fútbol base del club.

-Y llegó Mikel Martija. Ustedes pidieron la presencia de alguien que mediara y ordenara el trabajo. Llegaron a pensar en abandonar si el club no hubiera buscado un director deportivo neutral que ordenase todo. ¿Qué opina?

-Tenemos suerte porque es una persona que se involucra en muchas cosas. Hemos tenido a otros directores deportivos que no estaban preocupados por el interior del club y su expansión. Mikel ha sido el que ha impulsado esa necesidad de expandirse por la región. Él viene de un lugar donde la Real Sociedad es un poco lo mismo que el Racing aquí. No es un director deportivo al uso y tanto Gonzalo como yo agradecemos su llegada.

-Hubo un momento de tensión porque no coincidían las ideas de unos y de otros. La llegada de Martija templó los ánimos.

-Para mí fue un acierto. El club debía de tener un orden y el rumbo se lo tenía que dar una persona. No se si era Mikel, pero había que darle un rumbo y se entendió que no lo había y con Mikel ya se ha visto que se acertó. El equipo ha tenido una estabilidad y las cosas se han hecho con sentido común y la conexión entre el primer equipo y la cantera se da más que nunca. Eso es un acierto.

-Ahora que parece que las cosas van mejor, ¿no piensa que se ha perdido el tiempo a nivel cantera?

-En la situación del club tan complicada y tan inestable, a muchos niveles, que se vivía era difícil. Hace unos años era económica y se arregló, y luego fue deportiva. No sé si se ha perdido el tiempo, pero ahora el camino y el orden que hay es el adecuado. Una Fundación que parece que da sentido a lo formativo y social y que completa al rumbo que ha tomado el club a nivel deportivo. Eso nos llevará a estar donde nos merecemos.

-¿Por qué aunque todo se haga bien desde abajo siempre se depende de que el primer equipo esté en el fútbol profesional?

-Una de las cosas que intentamos hacer es convencer a los niños de la importancia que tiene el Racing. Los niños no han visto al Racing en Primera y ellos no saben. Para que la cantera funcione hay que pagar a los profesionales y hay que pagarles bien; tenemos dos nutricionistas, un director de metodología, una psicóloga, un recuperador... Eso era impensable y ese rumbo para ser competitivo se mantiene con dinero y eso solo se consigue estando en el fútbol profesional. No podemos mantener una cantera competitiva sin recursos. Tenemos que rodear a lo chavales de lo mejor si queremos crecer y eso se mantiene con recursos. Muchas veces en los clubes convenidos nos dicen que los niños no son del Racing y eso hay que cambiarlo. Ahora mismo los niños son del Madrid y del Barça y eso tenemos que cambiarlo. Eso no puede pasar. Hay que cambiarlo con esa semilla racinguista fuerte.

-El Racing analiza el fútbol regional. Es una selección, sin embargo hay talento que se le escapa..

-Nos puede pasar y podemos cometer errores. El gran error es ser muy joven y tener muchas prisas. Los casos que hemos visto es que cuando ya en infantiles se manejan con representantes y tienes que ir haciendo ofertas... Eso no nos interesa. A un niño alevín e infantil con representante no lo vemos sentido. Si hay una familia que quiere, le respetamos, pero no le vemos sentido. La desgracia es que la gran mayoría en dos o tres años vuelven pidiendo una oportunidad donde no quisieron o realmente ya no tienen luego nivel. Las prisas no son buenas. Se pierde la carrera deportiva y el crecimiento con su entorno y amigos. Seguramente estando en Primera sería mas fácil que no se fuera nadie, pero es así.

-¿Pero el Racing no tiene suficientes recursos para ver el talento de la región?

-Esos chicos que se han ido los teníamos controlados y teníamos informes, pero para nosotros era muy pronto hacer algo y cuando ya se confirmó que querían irse, lo consultamos y vimos que tenían representante y nosotros decidimos quedarnos fuera.