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«Soy toro en mi rodeo y torazo en rodeo ajeno». Lo decía el escritor argentino Martín Fierro y también podría decirlo el Racing, porque a los cántabros esta temporada no se les están dando bien los Campos de Sport, pero se crecen fuera de ... casa. Algo que llama la atención, porque normalmente la dinámica suele ser a la inversa. Los equipos suelen conducirse de forma más temerosa y con más cautela en estadio ajeno y envalentonarse y sentirse fuertes en casa propia. El Racing, no. Pionerismo una vez más.
El caso es que acaba de empezar la segunda vuelta del campeonato y los verdiblancos tienen el dudoso honor de ostentar el título de peor local de la competición. Los números no mienten. Solo siete puntos han sumado los racinguistas en El Sardinero, con una victoria, cuatro empates y cinco derrotas. Sí. El Racing solo ha sido capaz de ganar un partido en los Campos de Sport. Al Zaragoza, con un gol de Pombo en el minuto 72. Algo tiene que cambiar si los cántabros quieren asegurar la permanencia y no dejar escapar puntos en casa es fundamental para agarrarse a la categoría. Tanto como lo fue el curso pasado para lograr el ascenso cuatro semanas antes incluso de que acabase la temporada. Porque no cabe duda de que el camino del regreso a Segunda División se cimentó el curso pasado por El Sardinero. Los de Romo no perdieron ni un solo partido en casa durante toda la campaña y hacer de su estadio un fortín es una de las claves de los campeones.
Es verdad que esta vez a campeonar no aspira el Racing, pero a quedarse sí. Y el primer paso para lograrlo, después de sumar un valioso punto ante el líder, Las Palmas, en su estadio, es ganar al Sporting este sábado (18.30 horas) en Santander. La ocasión es inmejorable. Primer partido del año los Campos de Sport y el primero también como local con José Alberto en el banquillo del Racing. Tres puntos en casa, que además los verdiblacos necesitan sí o sí para pelear por salir del descenso, serían el mejor indicador de que algo está cambiando en el equipo. Refrendar esa metamorfosis que comenzó en Cartagena y continuó el domingo en el estadio de Gran Canaria. Más ofensivos, más atrevidos, más adelantados, más incisivos. Ahora solo falta encontrar el gol. Porque eso sí, el problema con el gol del Racing es evidente. En el equipo no acaba de aparecer ese hombre que desenfunde antes que nadie en el área rival. Los verdiblancos no tienen pólvora. Y aunque con Romo pisaban área con dificultad y ahora llegan más, siguen sin acertar a la hora de perforar la meta rival.
El Racing regresó este lunes por la tarde a Santander y este martes por la mañana, a las 10.45 horas, la plantilla se enfundará de nuevo el mono de trabajo para comenzar a preparar el partido ante el Sporting que se disputa el sábado (18.30 horas) en los Campos de Sport. Eso sí, José Alberto y los servicios médicos estarán muy pendientes de Gassama y Germán, que se retiraron lesionados del partido ante Las Palmas. Según el Racing, este lunes todavía era pronto para determinar qué padecen ambos jugadores, que serán evaluados este martes para ver cómo se encuentran.
Cuando lo hacen, las dianas aparecen desde segunda línea o son tantos en propia puerta de los rivales y un solitario penalti. Y es que lo de los delanteros en el Racing no es un problema. Es un problemón. Gassama partía como el encargado de marcar las diferencias esta temporada, pero todavía no lo ha demostrado. Solo ha marcado un gol. Matheus, que también cuenta con una diana en su haber, lo intenta. Brega, lucha y se revuelve, pero lo de que la pelotita entre ya es otra historia. Aunque el domingo ante Las Palmas el brasileño disfrutó de una ocasión magnífica para empatar el partido —algo de lo que luego se encargó Pombo de penalti, el primero que marca el Racing esta temporada–, pero el balón se estrelló contra el larguero. Cedric acaba de llegar, como quien dice, después de recuperarse de su lesión y está por ver qué puede aportar el nigeriano ahora. Seguro que ganas no le faltan, pero hay que materializar. El resumen:14 goles a favor. Solo cuatro de ellos en El Sardinero y los otros diez fuera, de los que dos fueron en realidad tantos en propia puerta de sus rivales, e Íñigo Vicente y Pombo como máximos goleadores del equipo con tres tantos cada uno.
Solo queda que Mikel Martija le ponga solución y realice una buena gestión en enero del mercado de invierno.Siendo meticuloso, cuidando cada detalle con la precisión de un cirujano plástico y sobre todo, sacando la tarjeta a pasear para traer la pegada que el equipo necesita.
Fuera de casa la cosa cambia. Cada vez que el Racing disputa un partido a domicilio se enfunda el traje de 'broker' y saca la máxima rentabilidad a los 90 minutos. O al menos toda la que puede. Lejos de El Sardinero los verdiblancos han ganado cuatro partidos, empatado tres y perdido cinco, lo que les deja un saldo de 15 puntos posibles de los 36 que estaban en juego en las 12 jornadas fuera de casa. Unos guarismos que le convierten en el quinto mejor visitante de Segunda, por detrás de Las Palmas, Burgos, Levante y Cartagena. Mejor a domicilio y menos que del montón en casa. Una dinámica que puede cambiar este fin de semana ante el Sporting, porque el Racing ofrece síntomas de mejoría y busca seguir progresando. Si además contase el sábado con el apoyo de los suyos, con la 'Gradona' y el resto del estadio; la 'Mareona' que tiene previsto desplazarse hasa Santander desde Gijón podría quedarse solo en una oluca.
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