Secciones
Servicios
Destacamos
A Guille Romo le funcionan los planes. Qué mejor que algo así para alguien que debe organizar cada semana una estrategia. De esta manera, nada hacer prever que mañana ante Unionistas el Racing cambie el paso tácticamente o al entrenador le dé por ... improvisar. Nadie lo entendería. Por esta razón, el técnico racinguista se ha dedicado en los últimos entrenamientos a mover las piezas para que vuelvan a encajar sus dos peones más determinantes, Pablo Torre y Cedric, y a quienes las causas de fuerza mayor les habían apartado del equipo. Ese ha sido su cometido y no más. Los dos futbolistas serán las novedades en un equipo que funciona con los planes –o mejor dicho con el plan– del míster. Para qué cambiar.
La lluvia y el frío de ayer no fueron impedimento para que el grupo entrenase como siempre, sin desvelar las intenciones de Guille Romo y con múltiples variantes y ensayos que desde fuera despistan. El regreso de ambos se daba por cantado al poco de marcharse –uno con la selección española sub 19 y otro por sanción–. Sin embargo las buenas actuaciones de sus sustitutos, Borja Domínguez y Manu Justo, han producido que surgiera una duda impensable. La primera de las disyuntivas, si es que en algún momento le hizo titubear a Romo, está resuelta por la ausencia de Borja Domínguez, que no podrá estar mañana ante los salmantinos por acumulación de tarjetas. La segunda, muy a pesar de Manu Justo también parece resuelta, aunque bien es cierto que los dos goles –uno en cada partido– que el gallego ha jugado de delantero podían haber amenazado el regreso de Cedric.
En el resto del equipo no parece haber mucho por decidir, tan solo en esa banda izquierda en la que Marco Camus se ha empeñado en aparecer a costa de Álvaro Bustos. Ayer no se vio nada. El cuerpo técnico no probó a uno mas que a otro y no dejó entrever quién de los dos será titular, aunque viendo que Bustos está bien –sufrió molestias físicas en Zamora– parece que el asturiano aún le gana por la mano al canterano. Camus ha cumplido con creces en los minutos que le ha concedido con cuentagotas el entrenador, pero desde fuera parece que Romo aún le prefiere como «revolucionador», como lo definió el pasado fin de semana. Con la salvedad de quién de los dos ocupa la banda izquierda, la alineación no tiene muchos misterios por más que se esconda. Miquel Parera estará resguardado en su portería por una defensa en la que Unai Medina será el lateral derecho y en la que Eneko Satrústegui y Pol Moreno serán los dos centrales. A Romo le gusta más que el navarro sea central y no lateral izquierdo, sobre todo desde que hace quince días apostó por Simón y le salió bien. Tan bien como que este sábado será titular en la carril zurdo por tercera vez consecutiva.
El canterano jugó ante el Bilbao Athletic para cubrir una eventualidad, tras la lesión de Pablo Bobadilla, pero el míster decidión darle «continuidad» en Zamora. Sus dos actuaciones le han colocado en la parte alta de la lista de jugadores para ocupar la demarcación. Por delante de Isma López, de Eneko Satrústegui o de Álvaro Mantilla, que sin jugar en sus posición natural casi siempre ha sido el comodín del que ha tirado Romo cuando le ha hecho falta paliar alguna carencia defensiva. Mañana Simón Luca volverá a ser titular pese a que tampoco haya hecho algo significativo el míster para asegurarlo. Lo mismo se podría decir del centro del campo, donde tampoco se vio ninguna prueba en La Albericia –ni ayer ni anteayer– para confirmar que la pareja de pivotes será la formada por Íñigo Sainz-Maza y Fausto Tienza. Después de probarlo todo, a Romo la pareja que mejor le encaja es esta. Para Tienza es la segunda vez que convence al entrenador, tras un periodo en el que perdió el sitio. Sergio Marcos deberá seguir esperando su turno, que por lo visto ha pasado a ser el de recambio en la segunda parte.
Quedan por confirmar los planes que el cuerpo técnico racinguista tiene para la banda derecha y en donde después de lo visto en Zamora, Patrick Soko saca ventaja a sus compañeros. Sería extraño que Romo apostara por Camus, algo que se barruntaba para la jornada pasada, pero que ahora no parece factible. El entrenamiento de ayer terminó con unos ensayos de lanzamientos directos desde fuera del área de Pablo Torre. Romo quiso trabajar, no solo con el canterano, la finalización de las jugadas.
Este viernes el equipo entrenará a puerta cerrada, si todo va bien, en los Campos de Sport, con el césped más o menos restañado del vandalismo de este jueves. Será la prueba para comprobar cómo llegan al partido tanto los verdiblancos como la hierba que pisarán.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.