Tres triunfos en una Liga

La sequía de victorias arrancó la campaña pasada, cuando en el tramo final el equipo dirigido por Iván Ania se atascó. Tras una primera vuelta espectacular y un liderato destacado, los santanderinos afrontaron el tramo final con el campeonato en su mano... Y el equipo desfondado.

La primera jornada de la particular Liga racinguista acabó con el primer empate, ante el Real Unión en El Sardinero. Quince días después llegaba la primera de las victorias, contra el Tudelano en los Campos de Sport. Y es que los tres triunfos cántabros han sido en casa, ante su público. Un triunfo por la mínima que fue, además, el último logrado por el equipo la pasada temporada.

A partir de ahí más atasco, problemas y una eliminatoria de ascenso que se decidió por el valor doble de los goles fuera de casa ante el Atlético Baleares. Un empate a cero en casa y a uno en Son Malferit decantaron la balanza. Sin ganar, pero con ascenso. Suficiente. En la eliminatoria de campeones ante el Fuenlabrada, vuelta a la oscuridad.

Con el objetivo cumplido, Chuti Molina contrató a diez futbolistas para dejar al Racing como colista de Segunda. Los fichajes se unían a una plantilla con bastantes mimbres del año anterior que ya desde el principio mostró que los problemas para sumar de tres en tres seguían vigentes. Dos empates y tres derrotas en las cinco primeras jornadas antes de ganar al Mirandés por 4-0.

Parecía que el equipo podía remontar el vuelo, pero otra sucesión de empates derivó en la destitución de Ania y el aterrizaje de Cristóbal Parralo, cuya llegada supuso un soplo de aire fresco. Otra igualada, en Lugo, y una victoria ante el Extremadura fueron su carta de presentación. Era el 23 de noviembre y, desde entonces, ni una más.

Empates, derrotas y goles encajados en los últimos minutos que dejan al equipo colista y con la salvación a seis puntos. Algo que, por otro lado, parece increíble dadas las cifras. Tres triunfos en 38 jornadas, sin contar la derrota copera ante el Murcia. El domingo el Racing tiene la oportunidad de empezar su Liga particular con victoria. Sería la tercera del año. Y la cuarta de una serie demasiado larga.