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Aficionados toman fotografías en el vestuario del Racing. Vídeo: Pablo Bermúdez | Foto: Roberto Ruiz

Las tripas del Racing

Aficionados al equipo verdiblanco visitan hoy y mañana las entrañas de los Campos de Sport, desde el palco hasta las taquillas que usan sus jugadores | Tour Real Racing Club tiene un precio de 2,95 euros para los socios y de 5,95 para los que no lo son

Ana del Castillo

Santander

Jueves, 26 de diciembre 2019

Hugo tiene tres años y le cuesta subir y bajar las escaleras de los Campos de Sport de El Sardinero, pero para eso está su abuelo Manuel, que le da la mano para ayudarle en su visita al estadio. Poco importa el esfuerzo cuando se trata de meterse en la piel de su jugador favorito, Luca Zidane. Vestido como él, con la equipación azul, se cuela en su taquilla -y le sobra espacio- y no duda en arrancarse a cantar con su dulce e infantil voz lo que haga falta o lo que habitualmente se corea cuando hay partido: «Racing de Santander no hay quien le gane porque tiene unos huevos así de grandes. ¡Racing oe! ¡Racing oe!».

El Club ha abierto sus puertas este jueves y mañana, viernes, a los aficionados para que, por 5,95 euros para los que no son socios y 2,95 para los que rigurosamente pagan su carnet, puedan visitar el vestuario, las vistas desde el palco presidencial -donde las acolchadas sillas son bien diferentes a las de preferente o tribuna-, el museo, la sala de prensa, el propio campo, el área VIP y la cafetería y los boxes.

Galería. Uno de los grupos, en el palco presidencial. Roberto Ruiz

Con la excusa de llevar a los chavales, algunos padres han disfrutado incluso más que ellos, como Félix Orizaola, que es socio del Racing desde hace 40 años y hoy ha recordado «aquel partido contra el Espanyol, en Primera División, y el campo con 25.000 personas. Aquel fue un día maravilloso», cuenta.

Aunque el estadio no destaca por su original arquitectura, en el interior sus paredes son pura poesía bélica. Y cuentan hazañas bonitas, gritos de guerra al más puro estilo William Wallace. Que si «un campeón es alguien que se levanta cuando el otro no puede», que si «los partidos no se juegan, se ganan», frase por cierto de Tuto Sañudo, que si «ganar requiere talento, repetir requiere carácter». ¡No será por falta de motivación! El vestuario del Racing rebosa energía y por los pasillos que llevan desde las taquillas hasta el campo más de lo mismo. Fíjense en esta frase: 'Por los héroes verdiblancos que defendieron vuestra camiseta'. ¿Hay algo más inspirador?

Manuel y su nieto Hugo. DM

Sí, escuchar al pequeño Hugo con el equipaje del Racing cantando la Fuente de Cacho y alzando los puños. Al fin y al cabo, la afición es la que está siempre al lado de su equipo, como un matrimonio bien avenido, en los buenos y en los malos momentos.

Los grupos de 25 personas cada uno que fisgan estos días las entrañas del Racing, libres de hacer tantos selfies como quieran durante los 45 minutos que dura la visita, van acompañados por guías de la Escuela Universitaria de Turismo Altamira que, un poco nerviosos, explican como pueden la historia del equipo. «En la zona VIP les contamos que no pueden acceder si no tienen 18 años y que deben ir bien vestidos, pero lo que más interesa no es escuchar, es ver y hacerse fotos en el campo y en los vestuarios de los jugadores», cuenta Pablo Gutiérrez.

El tour está programado cada día desde las 10.15 hasta las 14.15 horas y las entradas se pueden adquirir a través de la página web del Club, en la dirección entradas.realracingclub.es.

Hasta el hilo musical

En el museo suena el himno 'Tus cien primaveras', el tema que Rulo creó en 2013 para el centenario del Racing, un hilo musical que acompaña al visitante por el recorrido de la historia de su equipo, sus trofeos, su palmarés, las fotografías históricas, como la de los fundadores del Racing en 1913 bromeando en El Sardinero. Vamos, lo que viene siendo un museo. Pero algo llama la atención sobre el resto. Allí donde se forma un corrillo donde no se alcanza a ver lo que hay en su interior: la maqueta del antiguo campo. Impresionante.

La maqueta del antiguo campo está ubicada en el museo. Roberto Ruiz

Hugo, que aún no sabe leer -salvo la palabra Luca, que esa la domina a la perfección- le pregunta a su abuelo Manuel por una de las leyendas en verde sobre negro que llama la atención en el vestuario: pone 'Un trofeo atrae el polvo, los recuerdos duran para siempre'. Como esa visita de nieto y abuelo a los Campos de Sport de El Sardinero.

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