Una vuelta decreciente

Los dos puntos logrados de los últimos nueve posibles no han sido suficientes para bajar al Racing del pedestal de mejor equipo de los ochenta de la categoría. Sigue al frente, sin discusión. Pero en Las Gaunas quedó demostrado que ni siquiera el parón navideño ha venido bien al equipo de Iván Ania. Al técnico asturiano le toca hacer diagnóstico y buscar posibles soluciones. Quizá el cansancio -con cinco partido más que la mayoría de rivales en las piernas-; un bajón anímico y de confianza o que los enemigos ya le han cogido la matrícula pueden ser algunas de las causas del socavón que atraviesa el equipo cántabro.

El Racing tocó por primera vez el liderato del grupo II en la tercera jornada, pero cuando lo agarró con fuerza fue en la sexta. A partir de ahí, los verdiblancos no se han apeado. Siempre mirando por el retrovisor a los perseguidores. La máxima diferencia que han alcanzado los de Iván Ania ha sido de siete puntos, en la jornada 17, tras empatar frente al Gernika. Un colchón que hoy podría quedar mermado a dos puntos si el Mirandés vence al Arenas en su feudo de Anduva.

Una de las circunstancias más curiosas que se dan alrededor del conjunto verdiblanco es esa impresión que da desde fuera de una enorme dificultad para crear peligro y hacer goles. Sin embargo, el Racing sigue siendo, y con ventaja sobre el segundo, el máximo realizador de la categoría, con 37. De hecho, de los 19 encuentros que se llevan disputados, sólo se ha quedado sin marcar en dos y ambos entran dentro de esta racha de tres partidos sin conseguir la victoria: Gernika y UD Logroñés. Más allá de las decisiones que pueda tomar Iván Ania en el seno del vestuario a nivel táctico, el club aún tiene guardada la «carta blanca» del director deportivo, Chuti Molina, que sigue rastreando el mercado en busca de un delantero que mejore el rendimiento ofensivo del equipo de cara a la segunda vuelta de la competición y, lo que es más importante, para un hipotético play off de ascenso a Segunda División. En el capítulo defensivo, son doce los tantos encajados. En este caso, el Racing mantiene unos buenos guarismos, aunque hay equipos mejores.

En cuanto a la plantilla, Iván Ania tiene más o menos perfilado su once ideal, aunque el buen rendimiento del equipo en la mayor parte de la primera vuelta ha permitido al míster repartir minutos entre sus futbolistas. Así, con los jugadores más utilizados, el asturiano formaría un equipo titular con Iván Crespo en portería -el único que ha disputado todos los minutos-; Buñuel y Julen Castañeda en los laterales, escoltando a los centrales Óscar Gil y Figueras; Sergio Ruiz y Rafa de Vicente en el doble Pivote; Nico Hidalgo por la banda derecha, Enzo Lombardo en la mediapunta y Cayarga por la izquierda, por detrás de Jon Ander. Esos son los que más minutos han jugado, pero lo cierto es que por lo visto hasta ahora y a la espera de ver qué pasa con la llegada de Alberto Noguera, Álvaro Cejudo es el preferido para jugar detrás del delantero, con Lombardo acostado sobre la línea de cal izquierda. Sin embargo, las lesiones han impedido al cordobés tener más protagonismo sobre el terreno de juego. Quizá, por esos reiterados problemas físicos, Molina ha decidido incorporar a otro especialista más.

Lo que esta claro es que, más allá de los tres últimos malos resultados y de que el mes de enero se antoja complicado en esta situación para el Racing, el equipo de Iván Ania parte de cara a la segunda vuelta en una posición privilegiada en la lucha por conseguir el primero de los objetivos, que no es otro que el de proclamarse campeón para luego afrontar el play off de ascenso con beneficios sobre el resto.

De estas cuatro últimas temporadas en Segunda División B para el conjunto verdiblanco, los números del Racing a estas alturas son los mejores de todos, igualados con los registrados en la campaña 2016-17, con Ángel Viadero en el banquillo. Esa campaña en la que el equipo cántabro batió el récord de puntos de la categoría al alimón con la Cultural Leonesa. Sin embargo, cerró la primera vuelta en segunda posición, a cinco puntos de los leoneses.

El Racing de Pedro Munitis, que culminó el curso como campeón, apenas tenía 34 puntos en el ecuador de la competición y era tercero, seis puntos por detrás del Racing de Ferrol, al que finalmente daría alcance. Y en cuanto a la temporada pasada, con 37 puntos tras 19 encuentros y en tercera posición, a seis de la cabeza que ocupaba el Mirandés, el equipo dirigido primero por Viadero y después por Carlos Pouso fue cayendo en barrena a lo largo de la segunda vuelta hasta completar la peor campaña de los 105 años de historia de la entidad verdiblanca.