A vueltas con el sustituto de Mboula

El técnico asturiano parecía haberlo encontrado en Arturo Molina, después de la buena actuación del murciano el pasado sábado frente al Albacete. Sin embargo, en ese encuentro se tuvo que retirar lesionado durante el descanso y no tiene pinta de que vaya a estar disponible para Zaragoza. Ayer no trabajó con el grupo y sólo se le vio sentarse en el banquillo del estadio racinguista, en playeras, para ver las evoluciones de sus compañeros. Era una gran oportunidad para él.

Otro de los futbolistas que José Alberto tenía en su lista de secundarios para el puesto, Marco Sangalli, también es a día de hoy inquilino de la enfermería junto a Arturo Molina y Mboula. El protagonismo del vasco ayer fue similar al del catalán. Apenas un poco de carrera continua, gimnasio y a esperar.

El recambio más lógico parece el de Yeray. De hecho, el canterano fue titular en la primera ausencia de Mboula desde que se produjo su lesión. Sin embargo, en los dos siguientes encuentros, el entrenador verdiblanco se decantó por otros compañeros. Y de cara a La Romareda, no se barrunta que el de Isla vaya el primero en la carrera. No anda fino últimamente el chaval, cuando le han dado algo de protagonismo.

Tiene pinta de que al técnico asturiano le mola la opción de Juergen Elitim. Ya fue realidad durante un rato el sábado frente al Albacete. Desde que al descanso se retiró Arturo Molina hasta que se marchó Aldasoro y entró Mantilla para doblar lateral con Unai Medina por delante. 31 minutos. Entonces, el colombiano regresó a la mediapunta en la que había iniciado el encuentro.

El problema para José Alberto es que le gustó la versión de Juergen detrás del delantero y se debate entre mantener lo que le funcionó frente al Albacete o reubicar al de Cartagena de Indias pegado a la banda, pese a ser un mediocentro.

En esa controversia, entra Jorge Pombo. Sin Arturo Molina, el aragonés podría volver al once. Precisamente, ante el equipo en el que se formó. Y por eso ayer, en los Campos de Sport, el entrenador racinguista también probó al maño en la mediapunta -su posición natural- y la banda derecha. No es nuevo para él lo de jugar como extremo, y además es diestro, aunque ha actuado más en el flanco zurdo, para aprovechar sus características y colarse hacia adentro. Pombo tampoco pasa por un buen momento después de sus dos penaltis consecutivos fallados, pero la motivación por jugar en su tierra, en su casa, puede ser un aliciente extra a aprovechar para tratar de recuperar anímicamente a uno de los futbolistas más importantes de la primera vuelta racinguista.

Otro jugador en discordia, al menos a tenor de lo visto en la sesión de ayer, aunque parece el peor colocado de todos, es Peque. El futbolista catalán, habitual mediapunta, está rindiendo a un nivel alto en los entrenamientos, pero aún así no está encontrando su hueco, más allá de algunos minutos sueltos en los tramos finales de los encuentros. Sus opciones son las más remotas de los aspirantes, pero ahí queda su candidatura.

En cualquiera de estos cuatro casos, el técnico verdiblanco tiene el problema de las características. Lo dijo en la última rueda de prensa. La importancia de ir al espacio, como hace Jordi Mboula. Porque Yeray, Pombo, Juergen y Peque son más de recibir al pie. Arturo Molina, un tipo disciplinado, sí que podía cumplir esa función en cierto modo, pero su lesión ha llegado en un momento más inoportuno de lo que ya es de por sí un problema físico.

Y ahí, en la búsqueda de un futbolista más vertical, entra la quinta de las alternativas: Unai Medina. El retorno de Dani Fernández al equipo abre esta posibilidad, aunque no parece que José Alberto la esté valorando como planteamiento inicial. No sería nada nuevo. Ni extraño. El vasco, en buena forma y que ante el Albacete completó un gran partido en el lateral diestro, ya ha actuado ahí en más ocasiones. Sin ir más lejos, catorce minutos, más el tiempo añadido, en el último compromiso, cuando Mantilla entró para reforzar el flanco derecho de la zaga. Medina cumple esa premisa de futbolista de banda, vertical, que puede buscar el espacio, pero esta opción, la más defensiva, parece guardada por el técnico asturiano únicamente para las segundas partes si el momento del partido lo pide.

Así, José Alberto tiene trabajo para estos días. La del extremo derecho vuelve a ser, por tercera semana consecutiva, la principal incógnita en la alineación del asturiano. La sombra de Jordi Mboula es alargada y al míster le está costando encontrar un sustituto de garantías. El de Zaragoza será el cuarto encuentro sin el catalán y podría verse al cuarto titular diferente en el puesto.

Por lo demás, salvo lo que pueda pasar en el lateral derecho, todo apunta a que el entrenador verdiblanco repetirá el resto del once que aplastó el pasado sábado al Albacete, de cara a un choque, el de La Romareda, en el que están enfrascados dos rivales en la lucha por la permanencia. De ahí la importancia de los puntos en juego. Cuanto antes se consiga el objetivo, mejor.