Vuelve el público a los Campos de Sport

El miércoles se volverán a abrir los tornos, aunque está por ver cuántos. No será necesario ni muchos menos que se abran todas las puertas ya que tan solo accederán al estadio mil aficionados. La cifra es la que permite actualmente el protocolo de seguridad y hoy se reunirán los responsables racinguistas para determinar la pauta para el acceso. En principio uno de los criterios que se tendrán en cuenta será la antigüedad. El club pretende premiar la fidelidad de los abonados con más años de carné al darles prioridad si desean acudir al estadio. No ha trascendido cómo ni en qué medida se estimará esa antigüedad, pero en cualquier caso serán los más incondicionales los que pasarán primero. En función del paso de los más antiguos se irá accediendo hasta completar el aforo permitido. De lo que no hay ninguna duda es de que como máximo serán mil los espectadores que puedan presenciar el partido desde las gradas del estadio, o lo que es lo mismo, algo más del 4% del aforo total de El Sardinero.

Hoy también se estudiarán algunos de los epígrafes que se incluyan en el protocolo de seguridad que se cumplirá antes, durante y después del partido. En ese planteamiento inicial quedará prefijado el modo de entrada de los futbolistas, así como la hora de llegada de los equipos y cuerpo técnico de ambos para que no se junten en los aledaños. En este sentido también se adelantará cómo deben acudir los aficionados al estadio para entrar al interior del recinto. No se abrirán todas las puertas ni, como es lógico, todas las zonas del graderío para albergar a los espectadores. Ahora bien, el plante evitará las aglomeraciones en el exterior y regulará el lugar donde se colocará cada aficionado. También se fijará con antelación el modo de salida con el mismo objetivo: no juntarse y respetar las distancias de seguridad propias y necesarias en estos momentos.

Será la primera vez que se abra el estadio al público, después de los seis partidos que sí se jugaron tras el confinamiento, todos ellos a puerta cerrada. Falta un mes para que arranque la Liga y el club estudia ya -como ya se adelantó en este periódico la pasada semana- la posibilidad de que acceda un mayor número de espectadores al estadio en los partidos oficiales. Todo dependerá de las normas sanitarias que rijan en cada momento como consecuencia de los efectos de la pandemia, pero en cualquier caso el club espera apoyar su tesis en la diferencia palmaria que existe entre cualquier instalación deportiva de Cantabria y El Sardinero.

Los protocolos de seguridad que aprueba la Federación Cántabra -en cada comunidad lo hace su territorial- a cumplir para toda celebración de eventos deportivos al aire libre o en interiores, debe ser ratificado en último caso por la Consejería de Sanidad, sobre quien reside la competencia última en la materia. Así las cosas, y en función de la situación del momento, el Racing espera que llegado el caso se pueda aumentar el número de espectadores dado que las condiciones de seguridad que puede ofrecer el estadio -distancia, habitáculos, zonas comunes...- permite pensar que mil aficionados son muy pocos para los que podrían acceder sin ningún riesgo real de contagio. Ahora bien, esta circunstancia se llevará a cabo de cara a la Liga, hasta entonces, los partidos amistosos como el del próximo miércoles se someterán al protocolo en vigor.

Por otro lado, el partido, en lo deportivo aumenta el atractivo dado que el rival, el Athletic de Bilbao B, será uno de los rivales por los tres puestos de play off de ascenso en el subgrupo A del grupo II en el que se enfrentarán en la Liga. No será una presentación al uso -por muchos motivos-, y después de que el primer equipo de los de San Mamés haya servido de invitado en estas fechas durante muchos años hace que la asistencia del filial desluzca la función. Sin embargo, hoy en día la categoría no engaña y el Racing está muy lejos de jugar contra el primer equipo rojiblanco. Después de inaugurar los amistosos de pretemporada ante otro filial, la Real Sociedad B, Rozada podrá analizar de nuevo el potencial de la plantilla que tiene por ahora ante un rival directo y sobre el mejor de los escenarios. Un ensayo general.

Por otro lado, el próximo sábado (26 de septiembre), en las Instalaciones de Mareo (Gijón) y por la mañana, a las 12.00 horas, el Racing jugará de nuevo un amistoso ante el Sporting de Gijón B. Será el tercer filial de esta pretemporada, dado que al principio del trabajo estival no estaba permitido jugador ante equipos de la LFP y ahora, obviamente, la competición para estos ya ha comenzado y no es posible. Será el sexto amistoso después de los partidos ante Real Sociedad B, Laredo, Lealtad, Gimnástica y Athletic de Bilbao.

Para el partido ante el filial rojiblanco, Rozada ya podrá contar con Villapalos no así con Balboa, al que aún habrá que esperar para que pueda integrarse en la disciplina verdiblanca.