«La gente joven tiene que ser la que empiece a tirar del carro»

-¿Qué tal estos primeros meses en Pedreña? Han sido un cambio radical para usted y para el club...

-Muy bien; contento, con ganas. Estamos haciendo las cosas bien. Había que cambiar la dinámica del año pasado. Las cosas no se hicieron como debían o no salieron del todo bien, pero hay que quedarse con lo positivo y empezar un nuevo proyecto.

-¿Qué tal lleva tantos kilómetros, casi todos los días de Castro a Pedreña en coche?

-Bien, siempre voy con algún compañero y se nos hace ameno.

-Se ha traído a unos cuantos castreños en la aventura.

-Sí. Este año seremos siete remeros de Castro. Dos ya estaban el año pasado, otros dos vienen sin remar el año pasado y otros dos han llegado conmigo. Castreños somos Unai Herbosa, Antonio Torres, Adrián Vega, Álvaro Vitoria, Imanol Costelar, Yeray San Martín y yo mismo.

-Además de esas cinco novedades, el cambio ha sido radical. Una Pedreña muy distinta...

-Conservo seis remeros del año pasado y vamos a subir a tres juveniles. Además, han venido un par de chavales de Astillero y otro que había descartado Camargo.

-Pedreña va a pasar de ser un equipo muy veterano a todo lo contrario, bastante joven. ¿Lo puede pagar en el corto plazo?

-Tampoco todo lo contrario; vamos a tener una mezcla entre los chavales y veteranos o muy veteranos que va a aportar mucho. Hemos hecho un proyecto para que la gente mayor nos eche una mano, pero que sea la gente joven la que empiece a tirar del carro; es un cambio. Por eso subir a los juveniles, para dar ilusión al equipo.

-¿No le ha quedado una plantilla un poco corta? ¿Espera aún algún fichaje o descarte?

-No tenemos objetivo de traer a nadie. Si hace falta tiraremos de la cantera y llegaremos hasta donde tengamos que llegar, sin buscar descartes ni chavales de otro lado.

-¿Habrá que pedir paciencia?

-La idea es que poco a poco la gente vaya creciendo. Tenemos buenas categorías inferiores y progresivamente queremos ir dando un salto. Y al mismo tiempo hay que trabajar bien, porque tampoco se puede esperar mucho tiempo. Se trata de no pasar apuros y estar en la mitad de la tabla; estaría bien en la segunda tanda, porque se han machado remeros punteros de toda la vida y va a costar echar a andar.

-¿Espera resultados pronto?

-Bueno; veremos. Creo que tenemos un nivel majo. Ahora hay que esperar a que empiecen las regatas y el cara a cara; a ver cómo estamos en comparación con los demás. Nuestro objetivo es estar cerca de Camargo, que es el campeón de Cantabria.

-¿Firmaría ahora un séptimo puesto en ARC, uno más del que hizo Pedreña el año pasado?

-Si somos capaces de hacer cosas bien y terminamos séptimos estaré contento, pero no sé aún el rendimiento que vamos a tener en verano. Hemos hecho un buen invierno, trabajado bien y al final vamos a valorar sensaciones. Es todo muy nuevo, pero el objetivo es estar lo más arriba posible.

-¿Podemos imaginar de nuevo a medio o largo plazo a Pedreña de nuevo en ACT?

-Por imaginarnos, claro que sí. Pedreña tiene una cantera con muchos chavales con muy buena progresión. Y el remo cántabro no es solo Pedreña. Si se sigue trabajando con la cantera se puede pensar en ello. No sé si en 2025, 2026 o 2027 ni si será Pedreña u otro club, pero en el futuro el remo cántabro puede regresar a ACT, porque tiene remeros de calidad.

-Porque piensa en estar mucho tiempo en Pedreña, ¿no?

-He dado el paso para crecer como entrenador y si las cosas se hacen bien y hay proyecto para seguir, lo haré encantado y agradecido.

-¿Hizo el remo cántabro las cosas mal durante las vacas gordas?

-Sí. La cantera pasó a un segundo plano y al final la mayoría de los clubes ha tenido que optar por ella para sobrevivir. Creo que ha servido como cura de humildad; para que nos demos cuenta de que es importante trabajar la base.

-Con un breve espejismo con Quique Vitoria, Castro lleva años sin levantar cabeza ¿Le da pena?

-Sí, claro que me da pena. El problema de Castro es que ha habido dos clubes y Actividades Náuticas ha trabajado mejor que La Marinera, pero esperemos que de cara al futuro se puedan unir para hacer una trainera mejor. Con remeros de Castro se podría armar una tripulación que no tendría problemas para estar en la zona media de la ACT, tanto por cantidad como por calidad. Hay muchos fuera: en Hondarribia, en Zierbena, en Kaiku... pero son gente de Castro.

-El problema es que económicamente no se puede competir con los clubes vascos. Si tocan a un remero, ¿cómo retenerle?

-Pero al final no es fácil que despunten tanto todos los que salen. Lo que está claro es que hay que pensar tanto en el club como en el remero, y si tiene calidad para estar en ACT es muy complicado y es muy difícil pensar en frenar su progresión.

-¿Van las cosas como esperaba?

-Nuestro objetivo era llegar bien al Descenso de San Pedro de este fin de semana. Hemos hecho pruebas y en el Campeonato de Cantabria de larga distancia fuimos a ganar, aunque no pudo ser; no salieron las cosas como pensábamos.