El ascenso será en otra temporada

San Román acogía el último baile como locales de los verdes en este curso. Los santanderinos llegaban más que fundidos a la promoción ante el antepenúltimo de la División de Honor, el Pozuelo, tras las durísimas semifinales ante Zarautz y plantar cara, cuanto menos en el partido de ida, en la final de la División de Honor B ante el Alcobendas. Mientras, los madrileños llegaban con todo el tiempo del mundo tras el fin de su temporada regular y habiendo preparado con mimo el partido. El encuentro no pudo empezar de forma más trepidante. Primer minuto, y primera anotación de los verdes, con un golpe de castigo pasado por Jabase para el 3-0.

Pero acto seguido, tras un error verde en la recepción de la patada de saque, llegó la primera marca rival, obra de Andrés y pasada por Ortega. El 3-7. Tras otro 'penal' pasado por Jabase para el 6-7, a la primera que tuvieron para jugar los visitantes, el Pozuelo demostró que su rugby a la mano era de muchos quilates. Varios pases y ensayo fácil bajo palos, que pasaba Ortega para el 6-14.

El Mazabi no perdía la cara al partido. Tras una touche en la 22 madrileña, el maul local avanzó unos metros, para que el oval le llegase a Bellelli y ensayase. Con la patada de Jabase, el 13-14 casi al cuarto de hora de juego.

Pero ahí empezó a abrirse la tierra bajo los pies del Mazabi en el sintético de San Román. El Pozuelo empezó a demostrar todos sus poderes. Y eran muchos. Más velocidad, más físico, ni un error en los pases, y un apertura llamado Santiago Ortega que dio un auténtico recital de rugby. Los ensayos empezaron a caer. Primero uno de Arranz pasado por Ortega (13-21), luego otro golpe de castigo para Ortega (13-24). A la media hora, Jabase hizo buenas las intenciones del entrenador del Mazabi, 'Chucho' Mozimán, cuando hablaba de que había que arriesgar algo más en ataque. Un golpe de castigo lo sacó en corto y una patada baja voló para que llegase a ella Franco Mantero, que logró ensayar en la zona de marca rival. Con la transformación del '10' del Mazabi, el 18-24. Parecía que había partido pero el zaguero del Pozuelo, Ramón Fernández de Caleya, que ya había avisado con un ensayo anulado, volvió a demostrar que su velocidad era más propia del correcaminos. Enganchó una buena carrera que nadie pudo detener para posar bajo palos y poner el 18-31 con el que se llegó al descanso.

Sentencia

La vuelta de los vestuarios se antojaba crucial para el devenir del partido. Y tras unos primeros minutos con juego trabado y rugbiers atendidos por los fisios en el suelo, llegó la que sería de facto la sentencia del choque. Tras una melé ganada por el Pozuelo, los madrileños perdieron el balón, lo volvió a perder el Mazabi... El oval le llegó Santiago Ortega que desde la 22 verde sorteó a quienes le salían al paso. Otro ensayo bajo palos. Con su conversión, el 18-38 en el minuto 48.

Todo San Román supo que no solo el partido, sino también la eliminatoria, quedaba cerrada ahí. Y aún más cuando en 12 minutos los madrieños descerrajaron otros tres ensayos convertidos para el 18-59. El Mazabi tiró de orgullo para anotar una marca pasada por Jabase (25-59) antes de recibir casi lo nunca visto, un ensayo de melé para el 25-66. Casi al final, otro ensayo bajo palos, este de De Goicoechea, pasado por Ortega ponía el 25-73 final y cerraba la eliminatoria aunque quede el partido de vuelta. El retorno del Mazabi Santander Independiente a la División de Honor tendrá que esperar.