Davidovich se queda a un punto de su primer título

Alejandro Davidovich vivió un absoluto drama en Delray Beach. El español, en la segunda final de su carrera deportiva, perdió dos puntos de partido contra el serbio Miomir Kecmanovic y se quedó en el Abierto de Delray Beach (Florida, EEUU) a unos centímetros de levantar su primer trofeo (3-6, 6-1 y 7-5).

Davidovich dispuso de dos bolas de campeonato con 5-2 a favor y 15-40 sobre el saque de Kecmanovic. La primera se la jugó con un golpe paralelo que se marchó por unos milímetros fuera, la segunda, en una volea del serbio, la pelota tocó en la red y cayó en el lado de la pista del español. No se lo podía creer el malagueño, que como suele ser habitual vivió una montaña rusa en su segunda final ATP tras la que perdió contra Stefanos Tsitsipas en el Masters 1.000 de Montecarlo en 2023, uno de los mejores torneos de su carrera en el que venció por el camino a Novak Djokovic.

Esta vez, en un torneo menor como un 250, pero que representaba la oportunidad perfecta para a sus 25 años tocar plata por primera vez, Davidovich se quedó a las puertas.

En ese tercer set lo parecía tener hecho, pero su cabeza desconectó tras marcharse los puntos de partido. Pasó del 5-2 al 5-6 y 0-30 con saque para el serbio. Tuvo un amago de renacer, con tres puntos seguidos, pero Kecmanovic salvó la oportunidad de irse al 'tie break' con un saque imposible de devolver y, pese a que el malagueño desactivó el primer punto de partido, mandó una pelota larga en el segundo y entregó el encuentro. Muy difícil de digerir para Davidovich, al que Kecmanovic recibió en la red con un largo abrazo.

Era su segunda final, la segunda perdida, y de forma mucho más dolorosa. Que un tenista con la calidad de Davidovich no tenga un título en sus vitrinas solo se explica con partidos y desconexiones como estas. Ahora toca la misión casi imposible de recuperarse mental y físicamente y viajar a Brasil para disputar el torneo de Río de Janeiro, con cambio de superficie incluido al cambiar a tierra batida. Ahí le esperará su compatriota Pedro Martínez, una dura piedra después de que el valenciano llegara a semifinales esta semana en Buenos Aires.