«Sara, vamos a ganar el bronce»

Álex Corretja, uno de los nombres ilustres del tenis español, entrevistaba a pie de pista en la Chatrier a las flamantes medallas de bronce olímpicas en dobles femeninos. Aunque al principio sólo acertaba a hablar una. «Qué barbaridad», acertaba a decir Sara Sorribes. Al punto, su compañera salía al rescate, como si fuese un punto comprometido del partido. «Creo que Sara no tiene palabras. Está llorando. Tiene la piel más que de gallina», decía Bucsa con una gran sonrisa.

Y la cántabra empezó la ristra –aunque breve– de agradecimientos. «Quiero agradecer sobre todo a mi padre, por haberme hecho este sueño realidad. Y a todos los de Torrelavega que me han seguido, y a todos las personas que me apoyan. Así que muchísimas gracias y este bronce también es por vosotros».Ya recobrada, Sorribes acertaba a decir que era «increíblemente feliz. El sueño de mi vida era conseguir una medalla. Y lo hemos conseguido. Qué mas puedo decir».

La voz entrecortada de la castellonense hacía casi emocionarse a un Álex Corretja que le preguntaba a Bucsa cómo fue el recobrarse en el momento que perdieron las semifinales para jugar este domingo al 100%. Y en ese momento, Sorribes, como si se cruzase en la pista para meter un punto en la red que iba al cuerpo de su compañera, salió tajante. Y dio la clave del éxito en la pelea por la medalla. «Perdón, perdón, perdón», se disculpaba al interrumpir al entrevistador. «No existe ese momento para Cristina. No existe. Cristina salió de la pista el otro día y en mitad del pasillo me dijo: 'Sara, vamos a ganar el bronce'. Y yo pensé. 'Dame un ratito, porque igual ahora no lo veo muy claro'», añadía entre las risas de todos. «Pero para ella no existe otra opción que no sea ganar una medalla, no existía otra opción que no fuese ganar en Madrid... Somos totalmente diferentes en eso. A mí me colapsa un poco la cabeza a veces. Pero ella lo tiene tan claro que yo solo intento seguirla».

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