Carlos Soria ya está en Katmandú para intentar por undécima vez hacer cumbre en el Dhaulagiri

A sus 82 años Carlos Soria no se rinde en su intento de demostrar que hay retos físicos y, sobre todo, humanos capaces de ir mucho más allá de la edad, como el de conseguir convertirse en la persona más longeva en completar las catorce montañas más altas del planeta. Una lista ya de por sí imponente, en la que lleva inmerso desde los 51 años cuando coronó en Nanga Parbat (8.125 m), su primer ochomil, y a la que ese amor por la montaña que lleva sintiendo desde los 14 años le ha encaminado a seguir inmerso sin rendirse.

Un desafío que ha vuelto a llevar a este montañero a Nepal para intentar nuevamente, y ya van once, hacer cumbre en el Dhaulagiri (8.167 m). Esta cumbre y la del Sisha Pangma (8.013 m) son las que faltan al abulense para conseguir hollar los catorce ochomiles del planeta. La pasada primavera, Soria y su equipo pensaban que a la décima iba la vencida, pero tuvieron que abandonar Nepal ante la situación sanitaria del país por el covid-19.

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Una montaña más que conocida para este veterano montañero y cuya cumbre ha llegado a resistírsele hasta en diez ocasiones anteriores, pero con la que Carlos Soria no pierde el optimismo. Por eso ha vuelto a Nepal junto a Miguel López Soriano: «Este año hay muchos problemas, no hemos tenido patrocinadores, pero tenemos suerte por otro lado y vamos a poder marcharnos y estamos encantados de poder hacerlo. Este año iremos sin logos en la ropa, pero vamos a llevar los mismos medios para seguir mandando lo que nos pasa por allí, lo que vamos viendo, lo que hacen los demás, la vida de los sherpas», explica el abulense en uno de sus recientes vídeos compartidos en redes sociales.

«Estoy encantado de poder ir. Y sé que quizás debería esperar a la primavera, pero me encuentro muy bien, estoy haciendo un entrenamiento muy bueno, como pocas veces y me encuentro estupendamente. Sé que si espero a la primavera ganar no voy a ganar, si acaso perderé algo aunque procuraré perder lo menos posible de todas formas, pero prefiero aprovechar ahora que es el momento e intentarlo», asegura el montañero.

«Estamos encantados de haber ido y haber vuelto tantas veces del Dhaulagiri, esta vez vamos a ver si volvemos igual de enteros que siempre pero con la cumbre hecha», finaliza Carlos Soria agradeciendo también el constante apoyo que sigue recibiendo para cumplir su sueño. Un sueño que esta vez volverá a afrontar con más ganas y garra que nunca.