Nuevo incidente en Alto Campoo, que tuvo que cerrar sus aseos el domingo durante siete horas

La avería comenzó a las diez de la mañana y la alternativa que ofrecían los trabajadores de la estación era subir a la cota 1.850, donde se encuentra la cafetería de El Chivo, único lugar donde funcionaban los servicios. Pero claro, niños, debutantes y cientos de usuarios que no podían acceder hasta tan arriba tuvieron que buscarse la vida por los alrededores, ocultarse entre matorrales o los coches, bajarse los monos de esquí y hacer sus necesidades buenamente como pudieron.

«Ha sido a consecuencia de un acto vandálico», explicó ayer a El Diario Montañés el director general de Cantur, Bernardo Colsa. «Detectamos que alguien había arrancado violentamente la rejilla que filtra el agua antes de llegar al depósito. Sin esta rejilla, un montón de piedras, arena, hojas y palos que arrastra el desnieve entraron a cañón bloqueando el sistema», detalló.

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El depósito del agua que conecta con el edificio multiusos se encuentra en una caseta ubicada en zona montañosa, un lugar apartado. «Estamos revisando las cámaras de seguridad para ver al responsable de lo ocurrido, que dejó sin agua a la estación». «Hay claros signos de actividad vandálica en los filtros del depósito que canaliza el agua hasta los negocios de hostelería de la estación», informó Colsa.

La avería afectó a numerosos esquiadores que se habían acercado en la mañana del domingo a disfrutar de la nieve en la estación campurriana. «Menos mal que no hacía malo y nos pusimos a orinar en la calle», explicaba el domingo una usuaria, Pilar Gómez, que había acudido con su familia. «Después del viaje desde Santander todos teníamos ganas de ir al baño, pero al llegar nos dicen que no se pueden utilizar los servicios y que hay que subir a la cafetería de El Chivo para ir al servicio. Con niños pequeños era inviable, así que lo hicimos por el monte».

«Me parece alucinante, lo estaba pasando fatal», añadía otra esquiadora, María Acero, que había llegado de Madrid a pasar el fin de semana con sus sobrinas. «Después de unas horas por las pistas, me quité los esquíes para ir al baño y... me dicen que no se puede en ninguna de las cafeterías. Casi me da algo, quise coger el coche para ir a otros restaurantes del pueblo más cercano, pero no me daba tiempo y tuve que hacerlo escondida entre dos coches».

Como medida provisional, los encargados reaccionaron lo antes posible efectuando un bypass que llevó la canalización a través de un tuvo de goma. La estación recuperó el agua a las cinco de la tarde y ayer, lunes, el sistema se arregló de manera definitiva.