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La fama del bosque de las secuoyas de Cabezón de la Sal comienza a ser tan grande como la altura de estos árboles. El monumento natural será designado kilómetro Cero Mundial de las secuoyas en Europa tras adherirse al denominado Corredor Biológico Mundial, del ... que forman parte enclaves naturales de los cinco continents con un alto valor ecológico. El órgano está dirigido por un Comité Internacional compuesto por personalidades e instituciones nacionales e internacionales, que abogan por la protección de este tipo de espacios, además de varias universidades e instituciones.
El Ayuntamiento de Cabezón ha logrado introducirse en la lista de lugares a proteger «tras dos años de conversaciones», explicó el concejal de Medio Ambiente, Javier Gutiérrez (PSOE). El edil ha mantenido varias reuniones con el presidente del comité, Jorge Extramiana, con el fin de dar a conocer los puntos de interés del municipio en este ámbito, donde destaca el famoso bosque de las secuoyas.
El objetivo del comité es «crear una vía continua terrestre y oceánica de biodiversidad mundial, que apoye la supervivencia del conjunto de especies y ecosistemas del planeta». También se busca fomentar la rehabilitación de espacios degradados. En este sentido, el bosque de las secuoyas se posiciona como un buen objeto de estudio, ya que soporta una excesiva afluencia de público (lo visitan miles de personas cada año), lo que no resulta de todo compatible con su adecuada conservación. Consciente de este problema, el concejal de Medio Ambiente anunció que gracias a la entrada en el Corredor Biológico Mundial, «diversos profesionales realizarán un estudio sobre el terreno y nos propondrán iniciativas para poder disfrutar del monumento natural sin degradarlo». De hecho, Gutiérrez adelantó que «ya hay un par de universidades interesadas, que plantearán la creación de sendas alternativas para cuidar este hábitat privilegiado en Europa» .
El parque natural ubicado en Cabezón se ha visto seriamente afectado por la afluencia de visitantes en los últimos años, de manera que el tronco de algunos ejemplares aparece dañado como consecuencia de la falta de civismo de las personas. Ayuntamiento y Gobierno Regional (propietario del mismo) llevan años tratando de poner en marcha actuaciones para protegerlo, pero hasta el momento ninguna ha dado el resultado esperado y el hábitat continúa degradándose.
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