Los puertos de Pinos se disputan entre León y Asturias

Subimos con Pedro Álvarez, pedáneo de una de estas localidades, hasta el puerto de la Alcantarilla, enclavado en los conocidos como puertos de Pinos. Desde este punto con vistas privilegiadas se puede observar cómo los asturianos han ido haciendo suyo un paisaje en territorio leonés.

Hasta 40 construcciones, una casona, un embalse y una carretera, todo ejecutado con permisos del Ayuntamiento de Mieres, decoran los puertos a los que llegan atravesando el límite provincial que marca la barrera natural de la Cubilla.

El origen del conflicto territorial nació hace casi un siglo, en 1926, tal y como recuerda este veterano alcalde-presidente. Su padre y su abuela ya «sufrieron» este problema del que considera «es el momento» de darle solución. La lucha lleva en la vía judicial los últimos 18 años, de la mano del abogado de la Federación Leonesa de Entidades Locales Menores, Carlos González Antón, que de forma desinteresada busca derrocar el reglamento de aprovechamiento de los puertos que dictaminó el Ayuntamiento de Mieres. «Nos limitan el acceso a los pastos, por fechas, y tenemos que luchar por nuestros derechos».

Unos derechos que ya son «históricos, tal y como aparece reflejado en el testamento de Francisco Sierra-Pambley, propietario de los pastos tras la desamortización de Mendizábal que expropió los terrenos a la Basílica de San Isidoro. «Ya entonces los tenían estas pedanías. Y Paco Sierra dejó escrito que el día que se vendieran, esos derechos de aprovechamiento quedarían reflejados en la escritura de compra-venta». Una carga que Mieres asumió en la compra de estos pastos tras una subasta pública que permitió al concejo asturiano solventar un conflicto abierto que mantenía con sus ganaderos tras vender los pastos con destino a explotaciones mineras de carbón.

El conflicto se ha hecho «fuerte» tras la intención de Mieres de imponer su normativa y solo criar la raza asturiana de los valles. Este verano, ganaderos apuntillaron a un toro que era asturiano de montaña. También encerraron en un corral a 35 yeguas y potros que recogieron en este entorno e hicieron «una catástrofe».

En el año 2006, el propio Pedro Álvarez fotografió a la Policía Municipal de Mieres regulando el tráfico en la fiesta que realizan en Pinos el 5 de agosto. «Policía de Mieres regulando el tráfico en la provincia de León, fuera de su municipio y de su comunidad. Inexplicable».

En esta zona se han levantado 40 construcciones que se consideran «ilegales» ya que se ejecutaron bajo licencia del concejo mierense y no de San Emiliano, que es el territorio que ocupa. Se trata de residencias de verano para los ganaderos que «con que tengan dos o tres vacas pueden venir aquí a pasar el verano».

Otro giro de tuerca ha sido el asfaltado de la carretera que conecta el pueblo de Pinos con el alto de la Cubilla. En la vertiente leonesa se encuentra como «un camino de cabras», con dos arroyos y múltiples baches formando el camino de tierra. Sin embargo, al llegar a la edificación conocida como 'casa de Mieres', hasta el alto que limita León con Asturias, ha sido el Principado quien ha asfaltado una carretera en la provincia de León. En este apartado, también se exige a la Junta que intervenga en el tramo autonómico que le corresponde para facilitar el acceso de los leoneses a los puertos de Pinos.

La última sentencia, dictada por un juzgado asturiano, también da la razón a los leoneses. Se suma a las que se han señalado desde León y el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Y con la justicia de su mano, desde San Emiliano piden a Mieres «que deje ya este conflicto» porque los tribunales les están diciendo «que no tienen razón» y que no pueden acudir aquí a pastar. También reclaman a la Diputación de León y a la Junta de Castilla y León «que tomen cartas en el asunto» tras 18 años de lucha sin contar con el «apoyo explícito» de las administraciones. «Somos sus vecinos, sus votantes; se acuerdan de nosotros para las elecciones, pues que tomen cartas ahora».

La solución pasaría por la expropiación de los terrenos y ejecutar un proyecto de desarrollo en la zona con la fuerza del hispano-bretón, la vaca mantequera leonesa, el mastín leonés y crear una escuela de pastores y un aula de la universidad en el entorno del parque natural y la reserva de la biosfera. «Aquí tenemos algo muy interesante para explotarlo y dar vida y mover la economía de la zona de Babia», sentencia Pedro Álvarez.

La ejecución de la sentencia acarrearía que este mismo verano las 1.500 cabezas de ganado mayor de Asturias no puedan venir a pastar a los montes de León. Para ello recuerdan que no están en su municipio ni en su comunidad, que están en San Emiliano, en León. «Si Mieres no puede ejercer competencia, lo siento mucho; tenían que haberlo pensado antes, cuando hicieron la compra de los pastos».