Secciones
Servicios
Destacamos
MARA LLAMEDO
Santander
Miércoles, 13 de abril 2022, 15:10
En pleno corazón del Parque Natural de Redes, en un pequeño pueblo del concejo de Caso llamado La Felguerina, existe un lugar cargado de magia y rodeado de naturaleza que es punto de partida para decenas de rutas de montaña. Eso sí, no se ... trata de unas rutas de montaña al uso: las aventuras que surgen desde este punto son muy diferentes, cargadas de potencia y aprendizaje. Tanto, que nadie vuelve de ninguna sin sentir algo distinto, como un ronroneo de felicidad y positivismo dentro del alma misma.
Como una nuevo matiz, muy situado en el aquí y ahora, que hace mirar la vida de otra forma. Y esto, principalmente, surge por un detalle muy concreto e importante: todas las rutas de montaña que parten de este lugar se hacen en compañía de caballos, escuchándolos y dejándolos ser los guías, conociendo así bosques, valles, cresterías y colladas desde una perspectiva eminentemente equina.
«Somos especialistas en hacer viajes por la columna vertebral de la Cordillera Cantábrica: desde Fuentes Carrionas hasta los Ancares, pasando por el macizo de Mampodre, los Picos de Europa, Redes, Ponga, Somiedo…», cuenta Héctor Calderón, responsable de organizar estos viajes y propietario –junto con Vanesa Jiménez- de «Cabalgando Sueños», una suerte de santuario ecuestre donde la no dominancia, la cooperación y el cuidado son las bases de un proyecto que, con profundas raíces en la doma natural, aúna experiencias en naturaleza con el conocimiento de los caballos..
«No hacemos rutas a caballo sino rutas con caballos», señalan, indicando que en ese pequeño matiz hay una gran diferencia. «Los caballos son nuestros maestros, nuestros compañeros de aventura. Aquí no hay lugar para las jerarquías o las imposiciones: nuestros viajes son una experiencia de cooperación y, desde luego, una aventura única y una oportunidad genial para dejarse fluir, disfrutar el aquí y ahora y desconectar del ritmo acelerado del mundo actual», cuentan con entusiasmo, explicando que –aunque la monta, el galope y los trotes siempre se dan- en sus viajes se camina mucho junto al caballo, dejándole descansar y respetando su bienestar en las zonas, tramos o pasos en los que montarlos puede incomodarles.
Noticia Relacionada
«Hay que escuchar, entender y respetar al caballo. Y hay que tener en cuenta que la naturaleza es su terreno natural: dejarles tomar decisiones, dejarles marcar el camino… Así es como conseguimos que disfruten y así es como conseguiremos nosotros disfrutar a lo bestia. Ellos ayudan a ver y sentir cosas, momentos e instantes que, sin la mirada y el lenguaje gestual de un caballo, son invisibles para el ojo humano», añade Héctor, que lleva toda su vida conviviendo con estos animales y formándose para aprender su forma emocional y pacífica de estar en el mundo.
Así, siempre en compañía de caballos y siempre dejando atrás el ritmo acelerado y todos los prejuicios o vicios que puede haber asociados con estos animales, desde Cabalgando Sueños se organizan rutas a la carta y para todo tipo de público: desde paseos de unas horas por los alrededores (cruzando imponentes hayedos o recorriendo las montañas próximas) hasta travesías de varios días, durmiendo en tiendas, cabañas, refugios y alojamientos rurales.
«Nos gusta más decir que organizamos viajes. O, si quieres, experiencias con caballos en la montaña. Las personas sólo tienen que decirnos qué recorrido prefieren y nosotros nos ocupamos de todo: comida, lugares para pernoctar, transporte desde el aeropuerto o las ciudades hasta aquí… Además, si vamos a realizar una ruta de varios días con gente sin experiencia previa, también organizamos cursos y jornadas destinados a adquirir un conocimiento básico del comportamiento y la filosofía equina. Hay muchos mitos que derribar acerca de estos animales y mucho que aprender de su comportamiento y manera de estar en el mundo», cuentan, tratando de condensar en pocas palabras un proyecto con tanta alma y tanta conexión con lo natural que, a los pocos minutos de pisar sus terrenos, ya reconfigura la energía –para bien- y transforma los humores, saneándolos y serenándolos.
El proyecto, además, no sólo busca acercar el fascinante mundo de los caballos y recorrer los montes en su compañía, sino que tiene profundas raíces en el deseo de habitar las zonas rurales, recuperando la vida en los pueblos, llevando a cabo iniciativas sostenibles y cuidando idiosincrasias como la vecindad, la crianza en la naturaleza, el pastoreo o la autonomía que otorga cultivar un huerto.
«Llevamos aquí diez años, viviendo y adentrándonos a diario en el increíble Parque Natural de Redes, conviviendo con una veintena de caballos libres y organizando travesías a través de los montes de la Cordillera. Apostamos por un turismo sostenible y respetuoso, que se sumerja de forma consciente en la naturaleza asturiana y ponga en valor su belleza, su biodiversidad y la enorme riqueza que proporcionan las zonas rurales. Y, a la vez, apostamos por los caballos, por una revisión de nuestra relación con ellos, por poner en valor sus valiosas enseñanzas y por dejar que sean ellos quienes muestren los secretos de lugares tan mágicos como, por ejemplo, la Peña del Viento, el Tabayón, el Visu la grande o el Retiñón, por mencionar algunos lugares por los que habitualmente transitamos junto a ellos… la montaña, junto a un caballo, te regala matices y aprendizajes bellísimos».
Teniendo en cuenta que la Cordillera Cantábrica son el marco y que la filosofía equina (pacífica y cooperante) es la base de estas rutas, lo que Cabalgando Sueños describe como un viaje parecen más retiros, hechos a la medida de todos aquellos que amen la naturaleza y quieran adentrarse en ella de la forma más sigilosa y natural posible, con profundo respeto por la tierra que se pisa y por las emociones y necesidades de toda la compañía de seres que participa en el viaje.
Un punto de vista y un turismo diferente que está arrasando en el Parque Natural de Redes y que aún tiene algunas plazas libres para las travesías largas que, durante semana santa, tienen programadas. De todas formas, no serán las únicas: a partir de ahora, con días más largos y temperaturas agradables, las expediciones a los montes asturianos con los caballos como guías partirán con regularidad desde Cabalgando Sueños, un lugar cargado de magia, mapas con caminos de montaña y una veintena de caballos con muchos sabiduría para compartir.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.