Retiran un nido de cigüeña de una tonelada en la iglesia de un pueblo de León

Hace unos días, los vecinos del pueblo leoneés de Villacedré presenciaron un suceso que quedará en la memoria del pueblo: la retirada del enorme nido de cigüeña que coronaba la torre de su iglesia. Con un peso estimado de una tonelada y más de un metro y medio de altura, el nido, construido con palos, barro y tierra, había comprometido seriamente la estructura de la torre.

La operación, realizada por una empresa especializada y autorizada por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, fue una medida urgente impulsada desde el Consejo Parroquial y el Obispado. Según explican, el peso del nido estaba «agravando las deficiencias» estructurales del tejado de la torre, poniendo «en riesgo» su estabilidad.

El proceso de retirada no fue sencillo. El nido estaba construido alrededor de la veleta superior de la torre, lo que obligó a desmontarlo cuidadosamente por partes. «Había un contenedor de obra entero lleno de palos, barro y otros materiales del nido», explica la presidenta de la Junta Vecinal, quien también señaló que se instalarán veletas giratorias para evitar que las cigüeñas vuelvan a construir su hogar en la torre.

Aunque la decisión fue avalada por los permisos necesarios y por el evidente riesgo para la infraestructura, algunos vecinos han expresado su preocupación sobre dónde podrían instalarse las cigüeñas a partir de ahora. «Sabemos que estas aves buscan lugares cercanos donde construir su nido, y los tejados de las casas más próximas podrían ser una opción», comenta la presidenta.

A pesar de la retirada, se permitió que las cigüeñas pasaran la noche del jueves en una pequeña parte del nido que quedó intacta, una medida temporal que busca minimizar el impacto en las aves.

Según declaró la alcaldesa de Santovenia de la Valdoncina, María Villagrasa, la decisión final sobre la instalación de nuevas veletas o nidos más pequeños recaerá en el Obispado: «El Ayuntamiento no tiene competencia en estas decisiones. Solo nos aseguramos de que los permisos estuvieran en regla porque no se pueden quitar los nidos de cigüeñas cuando uno quiera. Había un riesgo real de que la torre colapsara, y era necesario intervenir».

Tras la retirada del nido, los trabajos de reparación en la torre ya han comenzado. El peso acumulado durante años había generado importantes daños en el tejado, que ahora serán subsanados para garantizar la seguridad del edificio. Mientras tanto, la localidad de Villacedré se queda a la espera de observar dónde decidirán establecerse las cigüeñas en el futuro. Por San Blas, como dice el refrán, las cigüeñas solían regresar fieles a su hogar en esta iglesia. Este año, tendrán que encontrar un nuevo lugar donde asentarse.

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