Borrar
Una ladera, con varios tramos en zigzag, es la parte más dura del recorrido entre Urdón y Tresviso.
Una ladera, con varios tramos en zigzag, es la parte más dura del recorrido entre Urdón y Tresviso. Marco G. Vidart
DMontaña

La ruta para picarse con los Picos

En el desfiladero de la Hermida, una senda lleva desde Urdón a Tresviso a través de 5,8 kilómetros en los que se salva un desnivel apreciable, con un paisaje que atrapa desde el primer instante

Marco G. Vidart

Urdón

Jueves, 5 de septiembre 2024

Quizá a algún aficionado a las caminatas por montes, las palabras 'Picos de Europa' le impongan respeto. Y le suenen a rutas largas por sitios complicados y con desniveles imposibles. A un nivel que no se tiene. Pero en el Parque Nacional de Picos de Europa hay una para 'entrenar'. Para familiarizarse con ese entorno de moles de piedra, poca vegetación y paisajes que dejan sin habla de los que enamorarse de ellos al instante. La ruta que lleva desde Urdón a Tresviso.

Descubra la ruta a través de este vídeo. Marco G. Vidart

En el desfiladero de La Hermida, cerca de la central eléctrica que impulsa el río Urdón, hay un buen sitio para dejar el coche. La primera curiosidad es que el lugar está a caballo entre dos comunidades, con el cartel de 'Cantabria' apenas a un metro y el de 'Principado de Asturias', a unos 20. El trayecto, siempre de piedra grande suelta, enseguida comienza a subir, paralelo a un prístino río Urdón.

La ruta

La ruta
  • Localización: Desfiladero de la Hermida (Peñarrubia). Tresviso.

  • Duración total: 5.30 horas.

  • Longitud total: 11,6 kilómetros.

  • Nivel: Moderado.

En el primer tramo, en el que los árboles acompañan al caminante, resulta de lo más llamativo ver una especie que no se suele encontrar en entornos 'salvajes': higueras. Y muchas. Algunas enormes, y otras creciendo justo en el costado de un cortado. Tras pasar un par de puentes, la cosa empieza a empinarse. Los carteles del principio, que avisan de los 825 metros de desnivel positivo, no engañan. El camino mira hacia arriba.

Unas revueltas, aún con el abrigo de los árboles y ya con el murmullo del Urdón perdiéndose al ganar altura, dan paso a una zona señalizada y de la que no se olvidará el nombre. 'La Bargona'. Ahí empieza la ruta a mostrar su verdaderos poderes. Y a poner a prueba las 'patas'. Un zigzag, con imponentes paredes de roca de frente y a la derecha, según se sube. No es infrecuente un pequeño resbalón con tanta piedra suelta, así que esta vez no está de más llevar una buena bota que sujete el pie.

*Consulta el punto de partida de la ruta. Inicio desde el aparcamiento donde puedes dejar el coche:

Una rudimentaria portilla conduce a otro tramo que sigue mirando hacia arriba, paralelo a otra pared de roca. Y tras él, el paisaje se abre. En todos los carteles –completísimos– que informan sobre la ruta, se advierte sobre la necesidad de extremar las precauciones. Aunque para los más reticentes a paisajes tan abruptos, hay algo que tranquiliza. No hay tramos de esos que den vértigo, de pasar por voladizos. La sensación es en todo momento de seguridad... Si uno no se asoma.

Reto

Ese paisaje ya más abierto, con las montañas de los Picos de Europa a todo lo que da la vista, antecede al gran reto de la ruta entre Urdón y Tresviso. Una ladera, pelada, dibuja un zigzag por el que se intuye el camino. Arriba de la montaña, unos postes de tendido eléctrico ponen sobre la pista y dan la respuesta a esa voz interior que ha resonado en la cabeza de uno mismo. '¿Hasta allí hay que subir?' Pues sí. Para los que gusten del ciclismo, el paisaje les será muy similar al del Mont Ventoux, esa montaña del Tour en la que de repente la vegetación desaparece para dar paso a un paisaje casi lunar. Ese tramo de la ruta, aunque hay algo de vegetación de montaña, se le da un aire. Una de las últimas 'paellas' del recorrido tiene nombre. El balcón de Pilatos. A ciertas horas hay espectáculo. Los buitres aprovechan las corrientes térmicas de la zona para coger altura y es una delicia para el caminante verlos volar a no más de 15 metros.

Powered by Wikiloc

La aparición de los postes eléctricos supone un alivio. Moral y físico. Se ha acabado la zona más dura y su presencia avisa de un progresivo cambio de paisaje. Más verde, alguna cabaña... Un pequeño descenso conduce a una zona en la que unas cuantas cabras pastan entre los restos de cabañas abandonadas. Ahí, una fuente ayuda a recargar agua o a refrescarse, si el sol aprieta. A la izquierda, sobre el camino, hay un mirador, flanqueado por vallas de madera. Las vistas son increíbles.

Tresviso ya se ve tras dejar atrás el mirador. Y un tramo ya acondicionado lleva a uno de esos pueblos enclavados en el corazón de los Picos de Europa. Con algún lugar para tomar algo o comer y para adquirir alguna de las viandas de la zona, como su famosísimo queso, viene de perlas el recuperar un poco las fuerzas.

Si el ascenso no lo ha puesto fácil, el descenso no le va a la zaga. Ahí sí hay que ser aún más prudente, porque no es raro que el pie resbale entre tanta roca suelta. Pero con la debida prudencia, se va descendiendo poco a poco. Las higueras vuelven a dar la bienvenida y el Urdón parece invitar a bajar a su cauce y aliviar los pies un poco. La prueba de la corta pero exigente ruta entre Urdón y Tresviso se ha completado. Y para quien sea su primer contacto con los Picos de Europa, a buen seguro que no será el último.

1. El comienzo

El inicio de la ruta está junto a la central eléctrica de Urdón. A ambos lados de la carretera hay sitio para dejar el coche. Marco G. Vidart

2. Las vistas

El paisaje empieza a abrumar con postales de cuento desde los primeros metros.

3. La Bargona

El primer gran aviso. La ruta tiene un desnivel considerable y La Bargona, con sus varias revueltas, se encarga de recordarlo.

4. El desafío.

Una ladera, pelada casi de vegetación, es el camino, con varios tramos en zigzag. El poste eléctrico es la señal de que hasta allí hay que subir.

5. La recompensa

Tras un tramo ya más amable de la ruta, se llega a Tresviso.

1 /

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes La ruta para picarse con los Picos