El clarinetista Toño Gutiérrez publica su primer disco, 'Maestro carpintero'

Toño Gutiérrez encuadra su propuesta dentro del «jazz-fusión con diferentes estilos, porque hay desde temas latinos hasta otros de tipo funk o folclore». En ese aspecto, define este primer trabajo como «un resumen de lo que han sido mis últimos años como músico». Esa síntesis musical, resalta el creador cántabro, surge como «un homenaje a mi padre, que fue carpintero y músico semiprofesional y mi primer profesor, quien desde los ocho años me inculcó el gusanillo de la música». El álbum se convierte así en un sentido recuerdo a su progenitor, que toma forma en nueve temas de diferente factura que aluden a realidades cercanas y conocidas por el compositor: «La primera canción del disco se titula 'El dormilón' y está dedicada a mi hijo«, detalla Gutiérrez, quien explica que la canción «alude a la importancia de esforzarse, de no quedarse en la cama y trabajar para aprender música o lo que corresponda». En otro de ellos, 'Rvbicón', también homenajea al bar del mismo nombre de la Calle del Sol de Santander, conocido por su apoyo a la cultura y a la música. En 'Amanecer', por su parte, retrata la vida de los músicos, un colectivo «que siempre trabaja de noche y llega a unas horas un poco extrañas, por lo que siempre vemos el comienzo del día», afirma. Otros temas de 'Maestro carpintero' son 'Santander - Corrales', que retrata un itinerario tan físico como emocional; 'Tributo a Jaco', en el que homenajea a Jaco Pastorius, «un músico pionero y excepcional»; 'My mambo', en la que recupera y ensalza la estrecha relación de Cantabria con la cultura y la música del Caribe; 'Carahuevo', que refleja su relación cotidiana con los alumnos del Conservatorio; y el tema que da nombre al disco, 'Maestro carpintero', en el que a través de la figura de su padre alude al ideal del maestro y de la maestría.

Además del compositor de las nueve piezas que componen 'Maestro carpintero', Toño Gutiérrez se ha encargado también de «del bajo y de los arreglos de los vientos, dejando libertad absoluta a todos mis compañeros». Dichos colaboradores han sido en todos los casos «músicos de Cantabria, desde Rafael Santana al piano y Javier García Escudero a la guitarra hasta Chus Gancedo a la batería, Chisco Villanova al saxo y a la flauta o Benjamín Branas a la trompeta», señala.

Toño Gutiérrez se estrena así como artista en solitario, con una propuesta «que es novedosa aquí, porque ningún clarinetista había hecho un disco así antes». Un proyecto que para el santanderino ha constituido «todo un reto porque tengo un perfil de músico clásico y aunque toco otros estilos y el bajo eléctrico, a veces parece que los músicos clásicos no podemos hacer otro tipo de cosas, cuando en realidad es algo que a día de hoy cada vez ocurre más», señala. Esta novedosa propuesta ya está a la venta en Bazar Musical, en la página de Facebook del artista y en las plataformas de Spotify y Amazon Music.

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