Fangoria despliega su 'geometría polisentimental' en las fiestas de Renedo

Los conciertos de ambas formaciones estaban ganados incluso antes de comenzar, en un caso y en otro, porque actuar ante un público predispuesto desde que sale de casa facilita las cosas. Si a eso le sumas un buen sonido -con la dificultad de conseguirlo en un día de tormenta- y una entrega absoluta de cantantes y cuerpo de baile encima del escenario, el resultado es más que positivo.

Con puntualidad británica comenzaron las Nancys Rubias a las 22.30 horas. Lo hacían dedicando sus primeras palabras al equipo técnico responsable del concierto, agradeciéndoles su trabajo, para después dar vía libre a un cancionero repleto de glam, vestuarios imposibles, versiones de Paulina Rubio y Blondie, y una manera de mover la melena al alcance de muy pocos. Primero por la melena; después, por las cervicales.

Versiones aparte, también hubo tiempo para interpretar las canciones originales por las que la banda se ha hecho conocida: 'Marcianos Ye-yés', 'Peluquitas', 'Me encanta' y 'Alfabeto Nancy'. Fue precisamente con la letra de esta última cuando la banda rindió el mejor de los homenajes a la recientemente fallecida Raffaella Carrà: «O Operación Bikini, P Parálisis permanente, Q, Queen, drama, drama queen, R Raffaella Carrà». Y ahí comenzaron los vítores y los aplausos, que se prolongaron hasta dar la bienvenida a los otros protagonistas de la noche: Fangoria.

La formación de Olvido Gara y Nacho Canut se subió al escenario de Renedo a las 23.40 horas al ritmo de 'Momentismo Absoluto', uno de los mejores temas con los que podrían abrir su espectáculo: «Carpe Diem es la única verdad, tenemos que seguir burlando el porvenir, lo que será, será». Y fue una hora y cuarto en la que dejar los problemas en casa.

La banda, que lleva en activo desde 1989, demostró durante la noche del sábado que está más que en forma. Su puesta en escena pasa por una estética cuidada al detalle especialmente en lo audiovisual, y sabedores de ello, quienes ocupamos un pequeño espacio en la carpa de las fiestas de Renedo disfrutamos de sus cambios de vestuario durante el directo -dos, para ser exactos-, y, de manera especial, de la pantalla gigante que utilizaron en su puesta en escena para ambientar las canciones. En ella desfilaron esqueletos, calaveras, obras de arte del tamaño del David de Miguel Ángel, juegos geométricos imposibles, flores y ciudades ardiendo. Ni confirmamos ni desmentimos que la ciudad en pantalla fuera Benidorm, lugar donde la artista presentó junto a Màxim Huerta e Inés Hernand la gala en la que saldría elegida la representante de España en Eurovisión.

Durante su actuación en Renedo, y con la actualidad sobre la ola de calor a la que, parece, estamos expuestos, Alaska agradeció a los asistentes cántabros su presencia: «nosotros somos Fangoria, es un placer estar en estas fiestas y en este clima tan estupendo. Muchísimas gracias».

Allí sonaron lo que muchos considerarán himnos tanto de su carrera actual como de su proyecto artístico anterior, Alaska y Dinarama. Esos temas fueron 'Espectacular', 'Retorciendo palabras', 'Desfachatez', 'Un Boomerang' o 'Perlas Ensangrentadas', tema que posteriormente versionaría Xoel López con su anterior banda: Deluxe. Si se preguntan por 'A Quién le Importa', claro, también sonó en Renedo. Fue el tema que le dio paso a la canción con la que finalizó el espectáculo: 'Mi Novio es un Zombie', momento en el que Mario Vaquerizo se incorporó de nuevo al escenario para reencarnarse en Freddy Krueger, jersey de rayas rojas incluido.

«¡Que vivan las fiestas, que tenemos que seguir celebrando!», dijo el personaje de 'Pesadilla en Elm Street' sobre el escenario. Pues eso, hagámosle caso.

Facebook y Twitter