«Con estas canciones reivindico el lugar de procedencia y eldeshacer de los caminos»

Casi seis años después, con las distancias marcadas y tras un amplio periodo de reflexión, la artista acaba de publicar su primer disco, 'Prenderé una velita', (Esmerarte Industrias Creativas, 2023), un trabajo compuesto por diez canciones de raíz que homenajean a la tierra; a la suya, Canarias, y a la de sus familiares, emigrados a América Latina. Con la cuenta atrás en marcha para la que será su primera actuación fuera de España, la del 2 de marzo en el festival Portamérica Latitudes de Guadalajara (México), charlamos con la de Gran Canaria sobre este trabajo.

-Acaba de publicar su primer álbum y en él ya marca los ritmos y tiempos que quiere seguir, «despacito y con buena letra, como me dice mi abuela». ¿Así ha creado este disco?

-Pues sí. Yo creo que ya en las canciones y en las historias que hay detrás de ellas se refleja un poco el ritmo que hemos llevado con todo este proyecto. Yo necesitaba tiempo, parar un poco, escucharme a mí misma y saber cómo sacar lo que llevaba dentro y de qué manera. Para eso necesitaba tiempo, mucha paciencia, mucha calma. Entonces creo que, en contra de lo que dicta la sociedad, que al final es como que lo eterno se vuelve efímero y todo va muy rápido, frené, cosa que me vino muy bien. Hay una de las canciones, 'Lo que Guardo', que creo que refleja muy bien ese momento de mi vida en el que no tenía miedo a frenar porque estaba haciendo lo que sentía. Estoy contenta con el resultado, la verdad.

-¿Lo aplica más allá de lo profesional?

-Sí. Creo que es algo que ya se ha implantado en mí misma no solo como artista, sino como persona. Hay gente que me dice que también tiene mucho que ver el ser canaria, porque el ritmo canario es diferente a otros tiempos, y estoy segura de que también influye. Pero sí, lo intento llevar un poco a rajatabla. Ya que lo he experimentado y me ha ido bien, creo que debo seguir por este camino.

-En el álbum también tiene palabras para las manos que la cuidaron. ¿De quiénes son esas manos?

-Bueno, pues mira, con estas canciones reivindico un poco el lugar de procedencia y el deshacer de los caminos. Yo, de una forma u otra, creo que con estas canciones volví a mi tierra, y a mi no me parecía mejor carta de presentación —en ese regreso— que hablar de los círculos cercanos en los que me siento cuidada, respetada y querida. Por supuesto eso significa hablar de mi familia y de mis amigas de toda la vida. Ha sido bonito tenerles presente en toda esta etapa y ahora verles disfrutar con las letras y con el resultado.

-Su sonido recuerda a figuras de la canción iberoamericana como Silvana Estrada o Natalia Lafourcade; música de raíces hondas y apego por la tierra. ¿Ser isleña condiciona la sonoridad de una artista?

-Creo que de alguna manera sí. Canarias y Latinoamérica tienen un vínculo muy fuerte y un sello indiscutible, y eso, de una forma u otra, los canarios lo llevamos en la sangre. Mi abuela tiene primos en Venezuela y creo que yo eso también lo llevo adelante, así que en estas canciones quisimos tener presente estos tintes del otro lado del charco, y creo que se ve muy bien reflejado.

-Y las historias sobre las que se escribe, ¿también las condiciona?

-Sí. En mis canciones están muy presentes el mar y la naturaleza, y creo que todo eso evoca también a Canarias, a los ecosistemas de aquí, a lo que vivimos y a lo que tenemos todo el rato alrededor. Es verdad que llevo cinco años viviendo en Madrid, pero volver a casa, a pesar de que en algunos momentos también se sufre una especie de desarraigo, me reconcilia con la Marilia que estuvo aquí en su infancia y adolescencia. Este disco me reconcilia con esa Marilia. Ha sido muy bonito deshacer esos caminos y volverme a encontrar en esta isla.

-«Nadie es de ningún lugar, voy donde soy y quiero estar. Mercantes y feriantes, reyes y navegantes, somos todos hijos de inmigrantes», canta en 'Tranquilo, mi corazón'.

-Creo que todos tenemos muy presente este tipo de movimientos —migratorios—. Yo en particular tuve una experiencia con un grupo de chicos que venían de Malí, y todas estas historias y esta experiencia en concreto me marcó mucho. Creo que todas esas emociones y lo que me recorría el cuerpo en aquel momento se canalizaron en esta canción, que para mi es como un abrazo al alma, como una fe, una esperanza en todas esas personas que tienen que dejar sus casas y sus familias en busca de nuevas oportunidades.

-El presente de unos fue el pasado de otros. ¿Fue el de su familia?

-Exacto. Por parte de mi abuelo, muchos estuvieron en África trabajando y viviendo durante muchos años; luego ya vinieron para Canarias. Creo que eso también está muy presente en mi familia.

-Ha contado con Juanma Latorre (Vetusta Morla) en la producción y Nacho Sotelo (Mon Laferte, Carla Morrison) en la masterización. Gente de aquí —España— y de allá —México—. De nuevo esa unión entre ambos lados del Atlántico.

-Total. Ha sido muy guay trabajar con Juanma, porque más allá de su arte me ha enseñado mucho como persona y me ha entendido desde el primer momento; creo que hemos hecho muy buen equipo. También he tenido la fortuna de contar con Nacho Sotelo, un chico mexicano muy talentoso que ha sido el mezclador de mis canciones y considero que le ha puesto la guinda al pastel. Si te digo la verdad, una de las cosas que he aprendido de este proyecto y que más valoro de este proceso creativo ha sido la gente que me ha rodeado, que se ha sentado a mi lado pero que también ha puesto un poco el freno y, dentro de toda esa paciencia y esa calma, ha trabajado conmigo mano a mano, olvidándose de todo lo demás. Estaré siempre agradecida a Juanma, a Nacho, a mis músicos, a Pablo y Adrián Seijas, y por supuesto a todo mi equipo de Esmerarte.

-En marzo cruza el charco para cantar en el festival Portamérica Latitudes de Guadalajara (México). Primera actuación fuera de España. ¿Está ya en modo 'cuenta atrás'?

-Total. Estoy muy emocionada con este proyecto, porque llevo mucho tiempo deseando que llegue el momento y por fin vamos a estar en Guadalajara en el festival Portamérica Latitudes. Además acabamos de anunciar también el concierto en el Foro del Tejedor, también en México. Vamos a estar una temporada allí para seguir aprendiendo de todas esas raíces mexicanas que, creo, me van a inspirar muchísimo para componer, y también haremos mucha promo. Luego volveremos a España para seguir con la gira.

-De momento no tiene fechas en Cantabria.

-No, aún no, pero ojalá las haya pronto.

-El gran público la conoció en 2018 durante su participación en Operación Triunfo. ¿Qué tal lleva que le sigan preguntando por el talent?

-Bueno, creo que es completamente normal porque forma parte de mi trayectoria, pero estoy en un punto tanto personal como artístico en el que este programa y todo lo que se vive respecto a él no me representa. Lo recuerdo como algo bonito porque lo viví siendo muy joven y conocí a personas con las que sigo manteniendo el contacto hoy en día; eso es lo bueno de la experiencia y lo que me llevo. Además hace poquito volví a la academia para estar con los nuevos concursantes y fue emocionante volver al lugar donde estuve viviendo una temporada. Siempre estaré agradecida por la oportunidad que me brindaron, claro.

-¿'Prenderé Una Velita', su primer largo, marca distancias respecto a esa época?

-Sí. En general marca distancias con todo lo que he sido, ¿no? 'Prenderé Una Velita' es un disco de presente, muy firme y muy sobre lo que estoy viviendo ahora, y creo que de una forma u otra eso ya de por sí marca distancia con lo que fui en 'Operación Triunfo' o lo que he sido en mi etapa musical anterior.

-Cierra el disco 'bailando consigo misma'. ¿Invita a quien esté atravesando un mal momento a que haga lo mismo, a que se conozca a sí mismo y se pregunte si está donde quiere estar?

-Sí, claro. Esta canción cierra un poco el ciclo. Fue una de las últimas que compuse y justo la última que entró en el disco. Fue como sacar todo lo que me recorría el cuerpo en ese momento, que era el deseo de estar conmigo misma, de aprender a vivir con la soledad y de querer hacer ver que tenemos que vivir con respeto hacia uno mismo.