«Con cada disco somos como un escalador que intenta ascender varios ocho miles»

-Un ejército implica disciplina, uniformidad y organización. ¿Tiene esas tres cosas su disco?

-Pues a decir verdad, no tiene ninguna. Quizás algo de organización, porque se requiere mucha organización y logística para grabar un disco. Uniformidad, es bastante discutible a tener en cuenta tantas colaboraciones. Y disciplina... La que se requiere para intentar componer, porque eso implica muchas horas de fracasar y persistir.

-Y, ¿qué cargo marcial ostenta cada uno?

-Yo diría que hay varios tipos de liderazgo: el creativo diría que lo lleva servidor. El estratégico sería cosa de Julián, mientras que el administrativo -contable Jordi y Oriol. Creo que con el paso del tiempo hemos aprendido no meter la pezuña en otros ámbitos que no dominemos con naturalidad.

-Un disco y una gira atípica, en la que, por ejemplo, como anunciaron vuelve a Apolo y con entradas agotadas. ¿Qué se va a encontrar el público en sus directos?

-La verdad es que nos hace especial ilusión informar a nuestra fan base de que los conciertos de Apolo, Razzmatazz y el resto de ciudades donde vamos a estar a principios de año, van a ser con un formato atípico y una propuesta de puesta escena mucho más cercana que en ocasiones anteriores. Iremos informando, pero creo que la gente se lo va a pasar genial y va a experimentar otra manera diferente de ver a Lol.

-Ahora el éxito se mide en WiZinks?

-Es probable. Es incuestionable que si haces unos cuantos WiZinks tu cuenta corriente está bastante saneada (ríe), perodeberíamos acotar primero qué entendemos por éxito.

-Dicen que ya no tratan de superarse a sí mismos, sino de mantenerse. ¿Eso cambia

el método de trabajo?

-Es una manera de decir que no queremos volvernos locos intentando superar a cada disco las ventas del anterior. Te haría la siguiente comparación: somos un escalador que intenta escalar varios ocho miles.

-¿Han tenido que esperar casi treinta años para decirse lo que encierra el disco a través de canciones?

-Probablemente. ¡Alguna avería represiva tenemos!

-Y diez discos para llegar al más poliédrico de su carrera.

-¡También! Supongo que ya actuamos como el triceratops que mira el meteorito.

-Resúmanlo en una frase.

-¡Artista: haz fácil lo complejo!

-También las dicen con la presencia de amigos en su escuadrón particular. ¿Son

compañeros y también fans? -Son colegas. Nunca he preguntado si son fans. Creo que sí, ¡pero eso no se le pregunta a las divas!

-¿Se reconocen en los sonidos de bandas que han llegado después y se han fijado en su estilo?

-Siempre tenemos una oreja pendiente. Es moralmente obligatorio.

-Entre los dramas modernos, ¿la música sigue siendo terapia?

-Siempre. Y de las más efectivas.

-¿Qué pasará después de este disco?

-Preveo proyectos más pequeños que sirvan como válvula de escape, por donde se evapore un cierto vapor acumulado dentro de esta olla a presión que supone estar en un grupo conocido.

-¿Se imaginan en otros treinta años, sentados en el porche, contándose anécdotas de aquellas giras con las que todo empezó

-Ya lo hacemos ahora (ríe).