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A Duras Penas: «El Barrio Covadonga no se explica con palabras sino con canciones»
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A Duras Penas: «El Barrio Covadonga no se explica con palabras sino con canciones»

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El cuarteto presenta este sábado 'Reyes de las Dudas', su tercer disco. Será en la plaza de La Llama de Torrelavega con las últimas entradas en taquilla

Sábado, 4 de diciembre 2021, 12:22

Frente a frente en la terraza de un bar. Así comienzan muchas de las conversaciones que anticipan lo que, con el tiempo, serán proyectos importantes en lo personal y en lo profesional, como un disco. El tercero de 'A Duras Penas' ve por fin la luz tras recorrer un camino con más dudas que certezas; también con cambios en lo cuantitativo —han pasado de ser siete a ser cuatro—, y sobre todo con mucha rumba y espíritu local, porque «aquí lo tenemos todo».

Horas antes de su presentación oficial, apertura de puertas a las 19:00 horas, hablamos con Toño Quevedo, vocalista y guitarra de la banda.

- Presentan en Torrelavega su tercer disco, 'Reyes de las Dudas'. Dado que en plataformas digitales sólo está disponible un adelanto, canción homónima, ¿qué palabras escogen para definir este trabajo?

- Un trabajo más madurado; de prueba y error al componer. Yo creo que ha quedado un disco super maduro, hasta demasiado incluso. Ha quedado muy bien empacado con este formato cuarteto, que funciona como un tiro, y grabar en los estudios Cubex con Javier G. Escudero, que es una máquina, ha sido un lujo. Nosotros íbamos con las canciones bien preparadas, pero allí él las ha dado una vuelta de tuerca que le ha sumado calidad.

- No repiten con Fernando Balbás, de Estudios Vindio. ¿Por qué el cambio?

- Por buscar otro sonido. Estábamos muy contentos con la gente de Vindio pero queríamos otro sonido que volviera un poco a los orígenes, más 'primitivo', por decirlo así, aunque suene feo. La verdad que fue de casualidad; nos llamó un chico para hacer una colaboración allí y cuando vimos su manera de trabajar y que había grabado algo de flamenco y de rumba, se la tiramos. Y coló. Estamos muy contentos con Javi.

- Llevan tres discos en cinco años; no es mal ritmo.

- Los dos primeros discos fue muy fácil porque yo —Toño, cantante de la formación— componía con mi compadre Ángel tal y como estamos tú y yo aquí ahora —sentados frente a frente— y salían las cosas; dos mentes hacen más que una. Al final lo que nos gusta es hacer nuestras canciones, aunque al principio hiciéramos versiones porque de alguna forma había que empezar. Cobrábamos por el concierto, así que qué menos que ofrecer hora y media de espectáculo… y ahí antes entraban las versiones.

- Han tenido tiempo para meditar los pasos a dar en un directo.

- (Risas). Al principio era una batalla, entrábamos a matar; ahora ya hemos escarmentado. Sabemos lo que es ganar mucha pasta en un verano y fundírsela al momento, ya no queremos hacer eso.

- Para esta presentación han querido que les acompañen en el escenario Bardal, de Cantaebria; Nano, que hará graffiti en vivo y Sara Puaj, que cerrará la jornada pinchando temas. Distintas artes y todas en directo, ¿Tocar con amigos aporta valor añadido?

- ¡Cómo no! Además, aunque no lo anunciamos hasta este viernes, también tendremos a Luiso TLV y Frank, unos chicos que hacen hip-hop.

- ¿Cómo se ha cocinado este disco?

- Entre un cambio en la formación y muchas dudas sobre qué hacer.

- Han pasado de ser siete a ser cuatro.

- Eso es. La partida más difícil fue la de Ángel, pero al final cada uno tiene su proyecto de vida y tienes que respetarlo. Estando él ya barajábamos la idea de hacer algo más acústico y rumbero, así que cuando nos quedamos sin él llamé al resto de los chavales y tiramos hacia adelante.

- Y lo hicieron con la rumba, la percusión cubana y africana, la música de conservatorio y el reggae. ¿Cómo trabajan con todos estos elementos para encontrar ese sonido que agrade a todos por igual?

- Con libertad, aunque ahora sea una palabra desprestigiada. Al final cada uno pone sus influencias; Omar ha girado con gente muy conocida del mundo del reggae, Jesús pone sus remates flamencos, Valentín es un guitarrista clásico con mucha formación y no tendría sentido tenerlo todo el día con la púa arriba y abajo…

- Y con todo eso, llegan a buen puerto.

- Sí… Estamos muy a gusto los cuatro y dar con Javier y Cubex ha sido maravilloso.

- Como banda se apoyan, y mucho, en lo local. Dobra Underground ha serigrafiado su merchandising; Tricio Ink y la Asociación Vecinos del Besaya han editado la portada de este trabajo; han coincidido con Adrián Deerre para animar distintos eventos… ¿Esa forma de entender un proyecto da vida a un barrio y a quien se gana la vida en él?

- Es algo que nos encanta hacer y sacar pecho de ello porque todos son primordiales; aquí lo tenemos todo. Para esta presentación podríamos haber traído a alguien de fuera, pero al final aquí tenemos los contactos, gente a la que queremos y con la que tenemos afinidad. Se trata de ayudarnos entre nosotros.

- ¿Qué es el Barrio Covadonga para ustedes?

- Como dice el anuncio, es nuestra manera de vivir. Yo llevo toda la vida aquí y es un sitio super importante para nuestras letras. Además tenemos el parque de La Viesca al lado y eso ayuda, porque si un día estás en casa atascado sales, te sientas un rato al lado del río y ya te sale algo, independientemente de si es mejor o peor. La historia de la gente de El Barrio es la de gente super trabajadora; de hecho, la asociación de vecinos nos ha ayudado a hacer todo el artwork del disco porque está basado y extraído de un libro del veinticinco aniversario de esta asociación. El Barrio no se explica con palabras, se explica con canciones.

- En abril avanzaron dos temas de este disco durante su actuación en 'Notas Al Margen', proyecto amparado por La Vorágine de Santander. Ya entonces, sin haber entrado al estudio, decían que éste iba a ser «el disco». Ahora que se acerca la presentación oficial, ¿confirma lo dicho el paso del tiempo?

- Sí, sí; como te decía es un trabajo de prueba y error al componer, mucho más madurado. Tenemos muchas ganas de presentarlo y quizá de ahí esta semana, la recta final, hemos tenido doble jornada de ensayo miércoles y jueves.

- ¿Ensayan aquí?

- No… Ensayábamos en Cartes y ahora lo hacemos en Rinconeda. Es una pena, nos haría falta un sitio aquí en El Barrio, un espacio creativo donde la gente con inquietudes artísticas pudiera acudir.

- Hace no demasiado se viralizó la expresión 'la galicia profunda' por la consideración despectiva de una jueza. Ustedes en este disco le cantan a 'su Cantabria rural'. ¿Cantarle a la tierra es homenajearla?

- Claro. Este tema —'Mi Cantabria Rural'— no es un tema compuesto por nosotros sino por un fan y amigo que se llama Jorge. La historia es curiosa; su chica me dijo que él tenía una montañesa escrita, algo que no me dijo porque sabía que en cuanto yo lo supiera iba a querer hacer algo con esa letra. Jorge es ganadero, juega a los bolos y trabaja en su fábrica con sus animales; esa Cantabria tradicional. Cuando una persona que vive ahí escribe algo así, es por algo. Yo podría hacerlo también pero mi perspectiva sería la de alguien que lo ve desde fuera, porque ni soy ganadero ni vivo en los Valles Pasiegos. ¿Podría plasmar el descontento de los ganaderos? Sí, pero nunca como alguien de allí. Entonces este tema es un guiño; no queríamos hacer la típica montañesa así que la metimos por rumba y quedó un resultado guapísimo.

- Esperamos que tengan por delante las fechas suficientes como para no dejar hueco sin homenajear a la tierra, y al barrio.

- Queremos empezar a plantear nuestro 2022. Sí que tenemos llamadas y fechas para confirmar, pero tenemos que sentarnos todos y ver hacia dónde tiramos, porque hemos tocado mucho en bares y ahora, sin olvidarnos de ellos, tenemos que dar ese escalón a las salas más preparadas, como la Rock Beer the New de Santander. No renegamos de los bares, al contrario; si no hubiéramos tocado en ellos no hubiéramos hecho ni la mitad de bolos, pero las salas también tienen su función. ¡Si hubiera una sala como esa en cada provincia nos recorreríamos España de New en New!

-Lo de este sábado no será en una sala.

-No, pero está todo el mundo invitado. Habrá alguna entrada en taquilla, ¡pero no muchas! Así que vengan, que lo pasaremos bien seguro.

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