Gustaff Choos: «En la música he hecho amigos, buenos amigos y hermanos del alma»

Gustaff Choos lleva más de quince años mirando a través de un objetivo. Ha trabajado para grandes firmas deportivas, ha tenido frente a frente a ídolos del balón, lo que para un proyecto frustrado de futbolista, es casi una ironía. Ha fotografíado a artistas de todos los perfiles, algunos de los cuales, le han dejado huella hasta en la piel. Es selectivo. Sabe parar y darle así valor a su propia labor, en la que, dice, ha encontrado «amigos, buenos amigos y hermanos del alma» moviéndose en el sector musical.

Hablamos con el fotógrafo, y disfrutamos de su selección personal de imágenes, en la serie de entrevistas más allá del escenario.

- Defina su trabajo en una frase que quepa en un tweet.

- En un tweet caben hasta 4 fotos. Mi trabajo radica en que esas 4 imágenes sean originales, únicas y, al mismo tiempo, documenten con veracidad -y belleza si la hay- una historia, momento, lugar o personaje relacionado con la música.

- ¿Recuerda la primera vez que cogió una cámara?

- De pequeño jugaba con ellas sin intención ni especial interés. Pero llegando a la veintena, un cliente de mi padre que tenía un estudio fotográfico se jubiló y desmontando el tinglado me regaló una cámara analógica profesional -maravillosa- con la que empecé a disparar, ya sí, con intención e interés. No sé porqué, quizá porque dejé de jugar a fútbol aquellos mismos días. Desde entonces siempre juntos.

- ¿Se reconoce en las imágenes que ve pasados los años?

- Sí, siempre con cariño, comprendiendo la perspectiva del tiempo pasado y la lógica evolución en mi trabajo. Alguna vez también he apartado la vista de una foto propia, sea dicho. Intuyo que lo mejor de mi obra está por llegar, me gusta pensar que tal y como maduro evoluciono.

- Elige el blanco y negro en muchas de sus imágenes. ¿El color es una distracción?

- El color es una opción, cuando elijo blanco y negro es porque la foto «me lo pide» por la razón que sea. He de reconocer que me encanta, me da paz y la sensación de atemporalidad.

- Ha probado también con los videoclips. ¿Es difícil elegir la imagen que ilustra un acorde?

- No especialmente, depende de todo lo que rodea al acorde. El reto al realizar un videoclip siempre es el de aunar un concepto artístico viable con las partes implicadas: banda, sello, management, oficina de comunicación, operador de cámara, dirección, producción, arte, etc… y no morir en el intento. Ahora voy a realizar uno con Tachenko.

- Cuando quiere desconectar; ¿deja la cámara a un lado o le cuesta moverse sin ella?

- Cuando estoy en modo desconexión sigo haciendo fotos, la cámara no es un peso, no me carga, me alivia. Alternar la fotografía musical con la gastronómica, el reportaje social, comercial, editorial y demás, me oxigena el coco y lo llevo bien. Puedo estar semanas editando o escribiendo sin cogerla prácticamente para nada aunque siempre esté lista y a mano; el iPhone echa un cable con la movilgrafía cuando aprieta.

- ¿En qué situación nunca tomaría una fotografía?

- En cualquiera si es por una razón loable. Hay cosas más importantes que una fotografía.

- Las redes sociales, ¿posicionan o devalúan el trabajo de un fotógrafo musical?

- El valor del trabajo de un fotógrafo musical es el valor artístico-documental que puedan tener sus fotografías, al margen de todo lo demás. Las redes posicionan de muchas maneras diferentes dependiendo de muchos factores e intereses, pero no me interesa prácticamente nada de esa movida. Hacía fotos antes de que existiesen y sigo haciéndolas ahora, trato de convivir con naturalidad con el fenómeno social y aprovecharlo a mi manera, como el escaparate del red district de Amsterdam que son.

- ¿Qué personaje le ha impresionado al tenerlo delante de su objetivo?

- Ninguno en especial. Quizá mi hijo neonato, su madre (y los procesos de ambos) me han impresionado brutalmente estos días, el enano no es todavía un personaje, pero apunta maneras. El proceso degenerativo de mi padre y su muerte también, pero son reportajes que aun no estoy preparado para publicar ni exponer.

- Disfrutar un concierto y tratar de captar cada momento con la cámara, ¿es compatible?

- Totalmente, de hecho, a mayor disfrute mejores fotos, todo fluye por inercia, incluso en los momentos más chungos, que los hay. Personalmente voy canturreando las canciones según el caso y hago coincidir el click con los momentos álgidos de cada tema. Supongo que es lógico pensar que son los momentos donde artista y publico se encuentran y conectan con mayor efusividad, hecho que aprovecho para capturar.

- ¿Ha hecho amigos en la música gracias a su trabajo o prefiere separar sus facetas?

- He hecho amigos en la música, buenos amigos y hermanos del alma. Y también he sufrido conflictos, como cualquiera en cualquier otro ámbito. No suelo separar la amistad de ninguna de mis facetas, por nada, mucho menos por dinero.

- ¿Podría elegir una sala, festival o escenario donde le haya gustado especialmente trabajar?

- Sorry, no podría. No es la sala, el festival o el escenario lo que hacen de un trabajo algo bonito -para mí- porque todos tienen su encanto: aquí en España, en México, EEUU o en Londres. Son los compañerxs de cobertura de la Mondo o los equipos de producción y técnicos en cada ocasión los que, en el devenir de los trabajos, conforman las memorias que me gusta disfrutar; especialmente por la confluencia de emociones y personas. Si el show ha desprendido magia entre artista y público por añadido, la cosa cala hondo y se refleja en cada fotografía. El marco cambia en cada ocasión, pero no es lo importante, sólo es el envoltorio. Huelga decir que hay templos maravillosos en los que siempre gusta trabajar y conocer.

- Los libros de fotografía, como los vinilos, ¿son piezas de coleccionismo?

- Los buenos sí, por supuesto, como los vinilos buenos. Los malos, no. Ahora cualquiera puede publicar un disco o un libro sin pasar por el cribado crítico-especialista, y eso hace que haya que ser más selectivo porque hay mucha morralla. Yo aun no he publicado ninguna de las dos cosas, aunque día que pasa, día que está más cerca. Llevo quince años en esto, de momento voy sumando material...

- ¿Quienes han sido o son referentes para usted?

- Aquellos que reinterpretaron y dignificaron el arte del gremio de fotógrafo/a musical en los ochenta y noventa y por cariño Don Xavi Mercadé (dep), por su profesionalidad, perseverancia, pasión y respeto por la fotografía musical, lo amaré siempre.

- ¿A quién le gustaría leer en esta misma sección?

- A cualquiera que haya leído hasta aquí, por corresponder.

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