Marcos Cao- Cantante y compositor

«Si ser músico es compartir contenido en redes sociales, preferimos no serlo»

La historia de unos amigos que se juntan para hacer canciones es tan clásica como la vida misma. Lo extraordinario es que pasen dos décadas y los mismos amigos y sus canciones resistan el paso del tiempo disfrutando del mismo modo e incluso más. Quedará patente esta noche en la campa de La Magdalena, con el concierto de La Sonrisa de Julia, en el Magdalena en Vivo, en plena celebración de sus veinte años que su cantante, Marcos Cao, define como «un privilegio»

–¿Cómo se vive en esa «casa», que es como definen su banda?

–Pues en esta casa, en estos momentos se vive súper bien. Lo llamamos casa porque nos damos cuenta de que hemos crecido juntos, es literal; nos hemos hecho mayores, hemos pasado de ser chavales a ser personas adultas y la verdad es que cada vez que volvemos a retomar el proyecto, es con más salud emocional. Curro del Moral podrá estar hoy y lo viviremos como la experiencia de unos amigos que se juntan para tocar música, que además es la excusa para pasarlo bien y seguir disfrutando en torno a un proyecto precioso para nosotros.

–¿En qué momento uno se da cuenta de han pasado 20 años y qué ocurre?

–La verdad es que son son muchísimos. Lo vemos como un privilegio. Cuando celebras, como en este caso, veinte años, es maravilloso juntarse y ver que tienes un montón de canciones posibles para tocar, eligiendo las que nos apetecen.

–Canciones que han resistido el paso del tiempo, sin quedarse perdidas en una época, envejeciendo con salud por su buenos cimientos?

–Sí, porque si uno las coge veinte años después y siguen sonando bien e incluso mejor, es porque hay algo sólido detrás. No te ocurre con todas, lógicamente, pero con las que son una referencia para esta banda, es una suerte. En esta gira hemos recuperado canciones que hacía quince años que no tocábamos y que suenan maravillosamente bien. Por eso es una celebración. la perspectiva del tiempo ayuda a disfrutar cosas que antes no veías.

–No solo las canciones, ustedes tampoco se han quedado anclados en un sonido en un momento determinado de vuestra vida, sino que han evolucionado

–Sí, porque hace veinte años éramos muy jóvenes y sabíamos menos cosas, tanto a nivel vital como musical. Teníamos pendiente alguna deuda con alguna canción, sobre todo del primer disco, hecho con una inexperiencia brutal y sin un productor que nos ayudará. Le tenemos mucho cariño al disco, pero a temas como 'Llevo tu voz', queríamos volver a grabarla.

–A Manuel Carrasco le gustó mucho...

–(Ríe) Sí, la revisión le encantó. Es que Manuel Carrasco siempre ha sido muy fan de La Sonrisa de Julia. Es una persona increíble, llenísimo de talento, que conoce muy bien el oficio y compartió un storie con la versión nueva y empezó a ocurrir algo raro en nuestras redes.

–¿Ha sido muy grande el aprendizaje por la vía personal y profesional desde aquella juventud?

–Es que no puede darse una sin la otra. Quien no crece como persona, no aprende nada. Todo lo que hemos aprendido nosotros, que creo que es mucho, porque amamos esta profesión, que tiene muchas vertientes, si eres orgulloso y crees que lo sabes todo, se nota. Nuestros directos, tienen una gran diferencia con respecto a los de hace veinte años.

–¿Los disfrutan más?

–Infinitamente más. Y nuestro público creo que también. Ven una banda que está en el escenario celebrando la música, celebrando su amistad. Antes había otras cosas que nos impedían disfrutar así.

–En paralelo ha cambiado el sector. ¿Sienten vértigo o ven oportunidades?

–La industria discográfica ha cambiado muchísimo. En unas cosas para bien y en otras, depende de tu gusto. A nosotros nos gusta hacer canciones, juntarnos, grabar, ensayar, ir de gira… Estar constantemente haciendo videoclips, material audiovisual, donde lo de menos es la música, mostrando facetas que no nos interesan, forma parte de la actual industria y no nos gusta nada. Nos aburre muchísimo. Si ser músico significa eso, preferimos no serlo. O serlo a nuestra manera y asumir las consecuencias. A las discográficas o a Get In nuestra empresa de management, siempre le dejamos claro de antemano que nos juntamos para hacer esto. Al que le guste bien y al que no, también, porque hoy en día te vas a dar un concierto y parece que tienes que estar durante meses promocionándolo en redes sociales. Lo siento, no lo hago y asumo el resultado. Si hacemos un disco nuevo, será con tiempo y a la manera que nos gusta.

–Menciona Get In, a cuya cabeza está Íñigo Argomániz. ¿Qué importancia ha tenido en que vuelvan con esta gira?

–Te voy a ser sincero; fue una llamada con Íñigo, personal, lo que me llevó, junto al resto de la banda a tomar la decisión. Sabíamos que se acercaba la fecha, pero no sabíamos cómo hacerlo. Teníamos una relación emocional con Get In pero no trabajamos con ellos, pero nos pusimos hablar y nos dijo: lo que hagáis, yo quiero estar ahí si vosotros queréis. Para la historia de la música de este país significa mucho. Lleva muchos años en esto, siendo una de las personas más influyentes de este país. Es increíble su energía. Su apoyo fue un extra de confianza que nos hizo decidirnos porque podríamos hacerlo bien. Fue muy bonito volver a los inicios en la música, que para nosotros fue Get In.

–Otra parte importante es el público. ¿Qué pasa al volver a tocar esas canciones en casa?

–Para nosotros, este concierto está señalado como lo más importante del año, porque, obviamente, tocar en casa es muy especial para todos. En el Palacio de la Magdalena, en las fiestas de Santander, el día 24, aún más. Cuando tocamos hace unos meses vimos la reacción de la gente y fue alucinante, porque vimos que el público seguía ahí, con la misma emoción. Tocamos además con otros artistas que admiramos, especialmente La Oreja de Van Gogh a los que conocemos desde hace veinte años también.

-La última canción que han publicado se llama 'Para siempre'. ¿Un tanto premonitorio?

–Tenemos una serie de ideas que nos gustaría desarrollar con el tiempo y con algunas ya hemos empezado. Entre ellas había una canción que cerraba bien el círculo, porque nos recordaba mucho, en cierto modo, a 'Llevo tu voz', la primera que publicamos en nuestra vida y que sonó en las radios, pero que tenía un toque mucho más actual. Para nosotros lo bonito y lo que disfrutamos y lo hace verdadero, algo que hemos hablado mucho, es que no volvemos a esta casa que es La Sonrisa de Julia por el éxito, sino por el placer de volver y tocar juntos. Es un objetivo en sí mismo que no teníamos cuando éramos chavales. No queremos acelerar los procesos. Tenemos otros proyectos, otras inquietudes, y al ritmo al que queramos, será como vayan saliendo las cosas. Al menos esa es la intención. Por eso sentimos que es un privilegio y se nota en el escenario.

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