Casapalma, la reinvención de la tradición sonora de Cantabria

En el centro de Valle, en Cabuérniga, donde antaño se reunía la familia, en casa de la tía Palma, se ha pergeñado un concepto, una filosofía, un proyecto que mira hacia el pasado, imbuido de futuro.

Irena Atienza, cantante cántabra que durante varios años ha surcado con su voz las aguas brasileñas, encontró en Yoel Molina, productor y músico madrileño que aterrizó en Valderredible, la pieza perfecta para armar un puzzle sonoro con inquietudes comunes.

El cancionero tradicional cántabro, las coplas, las jotas, se pasaron por el tamiz de sintetizadores, teclas y procesos digitales. Ahora 'Morenuca' o 'Amores de largo tiempo', un par de los singles que han adelantado del que será su primer disco, sorprenden por igual a los jóvenes que la escuchan como a los vecinos del valle que fueron los primeros auditores. Y para este dúo, una de las opiniones de más peso. «Escuchar Casapalma suena a contraste», resumen.

En el viaje que acaba de comenzar, a pesar de partir de sonidos de antaño, han contado con músicos como David López, Esteban Bolado, Conchi García...Veteranos en esto de los sonidos del folclore y maestros en la materia para nuevas generaciones.

En Escenarios DMúsica, Atienza y Molina, desgranaron los pormenores de su enfoque y sus expectativas, del cómo y el por qué eligieron estas canciones y los planes que tienen para hacerlas crecer y llevarlas tan lejos como sea posible. Ante un público entregado, ofrecieron una interpretación de corta distancia, emocionando a muchos que lo vivieron como «un regalo». Este viernes, en El Diario Montañés, la entrevista completa.

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