Otro año más, el gallo del Soundcity cantó a lo grande

Este último, ha ido ganando adeptos en los últimos años gracias a una gran organización, barras con precios populares y carteles con artistas diferentes a los habituales. Es gratuito, ha tenido público hasta de Andalucía, es capaz de traer a bandas internacionales de cierta referencia a la capital del Besaya y se ha ido haciendo un hueco importante en el mapa festivalero de nuestro país.

Este año, el Soundcity llenó la Lechera de Torrelavega con la gira de despedida de Desakato, nos permitió disfrutar de los divertidísimos Anabel Lee, descubrir propuestas interesantes como Tiburona o vibrar con el santanderino Ángel Stanich

Lo de Tiburona, este sábado, en la última jornada del evento, fue una sorpresa: apenas pudieron probar sonido, pero eso no evitó que salieran con ganas de comerse al escenario y se llevaran halagos entre el público. Son enérgicas, reivindicativas, beben del espíritu de formaciones como las Vulpes y no desentonaron. Posiblemente, la única pega que se le puede poner al Soundcity, es la escasa presencia femenina que tenía su cartel, pero, al menos, el evento ha hecho que mucha gente descubra a Tiburona y a las Aiko el grupo, a las que no hay que perder de vista.

El santanderino Ángel Stanich salió al escenario al ritmo de los cántabros Ibio, hizo mención a los torrelaveguenses Bloque, alabó a Portugal, a Industrias Portugal, la asociación de amigos que monta el festival, puso patas arriba a la gente al ritmo de 'Escupe fuego' y 'Mátame camión' y terminó la noche lanzándose entre el público y bailando al ritmo de Franco Battiato.

Fue la gran estrella del día, por encima de los canadienses Danko Jones. Si el año pasado el festival sorprendió trayendo a los Asian Dub Foundation —que protagonizaron un 'show' para el recuerdo—, este año sorprendieron trayendo a los británicos Toy Dolls y a los canadienses Danko Jones, una de esas bandas que se han comido el mundo, han dado que hablar y tienen seguidores por todas partes. Eran una de las grandes apuestas de la última jornada del evento, terminaban su gira de verano en Torrelavega y congregaron 'fans' pero no terminaron de desatar la misma locura que Stanich.

«Somos Parquesvr, venimos de Madrid y nos vamos a comer la noche». Parquesvr salieron con ganas de comerse el escenario y lo cierto es que generaron pogos, risas y halagos. No tienen el mejor sonido ni las letras más elaboradas, pero sorprendieron con un espectáculo divertido, lleno de sátira, en el que sonaron temas con referencias a Tom Petty, a Almodóvar o a Lance Armstrong. Terminaron con una especie de delirio colectivo, bailando sobre el escenario, junto a todo el equipo del festival, al ritmo de «Pelotón, pelotón, pelotón».

La verdad es que parece imposible no enamorarse del Soundcity, el proyecto de una asociación de apasionados de la música que hace siete años soñaron con convertir a su ciudad en un «referente cultural nacional» y que aún no han tocado techo: luchan muchísimo para intentar confeccionar carteles interesantes, han intentado traer a bandas internacionales muy grandes a la capital del Besaya y no dejan de apostar alto.