'Don Giovanni' vuelve a sus orígenes y se aleja del romanticismo en el Palacio de Festivales

Todos ellos destacaron la importancia de esta nueva propuesta lírica, tanto por la calidad de los compositores –«Mozart nunca falla» en palabras de Lanuza–, de los intérpretes y, sobre todo, la apuesta de Cultura por traer a Santander espectáculos de ópera de gran formato a precios asequibles para todos los públicos pues, las andanzas de Don Giovanni se pueden seguir con entradas que oscilan entre los 12 y los 55 euros.

¿Y qué va a ver el público que pague esos precios? «Un 'Don Giovanni' próximo a la partitura original de Da Pontei y Mozart y alejado del romanticismo que fue cogiendo este personaje en las posteriores versiones. «Un Don Juan que vuelve a sus orígenes para que la historia que explica en el escenario sea comprensible para el público», tal y como explicó Monterde.

Aún así, la obra está más de actualidad que nunca, como destacó Carles Pachón. «Para mí ha sido un placer recuperar a este personaje tal y como los autores lo escribieron en su momento porque en posteriores versiones se ha tendido a obviar su origen e incluso se ha alterado. Me parece que, por desgracia, en los tiempos que corren es necesario mostrar a este personaje depredador a nivel seductivo que es un claro ejemplo de lo se debe dejar de hacer. Si estas cosas pasan en el escenario no pasarán el vida real», aseguró en una alusión a la violencia machista.

Daniel Gil de Tejada quiso destacar la parte musical. Una partitura que, según señaló, es «de las tres que Mozart escribió con Da Pontei, la más complicada». También la más bella y con muchos elementos innovadores, «como esa escena final en la que participan tres orquestas: una el foso y otras dos en el escenario que permiten la polirritmia, evitando sobrecargar el sonido», dijo.

El director musical también quiso destacar la calidad de los intérpretes que forman parte de la Escuela de Ópera puesta en marcha por la Fundación. «Gente joven y muy preparada».

Uno de los alumnos de esa escuela fue Pachón, que ahora es miembro fijo del plantel de la Ópera de Berlín por lo que volver «a casa» para interpretar este rol supone para él «cerrar un círculo».

Su compañera en el reparto, Tina Gorina, insistió en la dificultad que tiene esta obra para los intérpretes porque tal y como está escrita y planteada «Es una ópera muy coral y no es fácil de hacer. El personaje de Don Giovanni, por ejemplo, necesita mucha memoria porque la función dura tres horas y además de tener en la cabeza la letra de cada una de las canciones hay mucha más representación artística que en otras obras. Es muy difícil», aseguró.

Además de «la exigencia vocal de la partitura» la cantante también quiso destacar «lo bien definidos que están los roles. Todas y cada una de las mujeres que seduce don Juan son perfiles distintos que están muy bien escritos».

Monterde apostilló que, durante toda la obra, «se mezcla lo trágico y lo cómico, pero de una forma muy bien hecha y muy moderna». Y no olvidó recordar la moraleja, esa advertencia al final de la obra sobre lo que les puede pasar a todas aquellas personas que, como Don Giovanni, se dedican a hacer el mal. «Se supone que recibirán su castigo, pero ¿será siempre así?»

Así, el espectáculo que se vará este viernes y sábado en la Sala Argenta, basado en la ópera bufa compuesta por Mozart, es una gran producción, en la que intervienen más de un centenar de profesionales y tres orquestas, más todo el personal técnico del Palacio para el que Carlos Troyano tuvo un gran reconocimiento por el trabajo que desempeñan.  También destacó que a una de las funciones se desplazarán 80 alumnos del Aula de Didáctica Musical de la Universidad de Cantabria en lo que considera una forma de fidelizar a los jóvenes.

Zuloaga trasladó el compromiso del Gobierno de Cantabria por contar con una programación estable en el ámbito cultural, que permita apoyar a un sector que «genera empleo y que representa un espacio de ocio para la sociedad».