Fetén Fetén y El Kanka, ida y vuelta a ritmo de cumbia

Dmusica ·
El dúo instrumental ofrece un nuevo adelanto de su próximo disco, 'Cantables II', uniendo fuerzas con el cantautor que pone voz al single 'Júrame'

Pilar González Ruiz

Santander

Domingo, 18 de octubre 2020 | Actualizado 19/10/2020 12:17h.

Si algo une a Fetén Fetén y al Kanka es su mirada hacia la raíz a la hora de crear su música. O a las raíces, más bien, de ambas orillas del Atlántico. El resultado de su cruce artístico es 'Júrame', nuevo adelanto del disco ' ... Cantables II' que el dúo burgalés publicará a comienzos del próximo año.

«El Kanka no es solo uno de los artistas que más admiramos y con más conexión con lo que creemos que es un cantante profundo y serio», explican Diego Galaz y Jorge Arribas. «Tiene el estilo de los cantantes antiguos y es uno de los que más beben de la música popular y mejor la entienden».

Ninguna de las elecciones que han ido presentando para este nuevo trabajo en el que, acompañados por el argentino Sebastián Schon, ponen música a sus creaciones instrumentales, es casual. Rozalén, Depedro y Guitarricadelafuente, compañeros de viaje en esta aventura, destacan por su constante búsqueda, por un retrovisor cultural que les anima a salir de su zona de confort y traer los sonidos tradicionales a esta acelerada actualidad.

«Era muy importante para nosotros a alguien que tuviera su identidad pero pudiera engancharse de alguna manera a esos aires de la música popular de latinoamérica y El Kanka tiene muy interiorizados los ritmos de ida y vuelta», añaden los singulares instrumentistas castellanos.

En esta nueva etapa, Colombia tiene presencia propia, al haber elegido una cumbia como base para un tema que se centra en el desamor para terminar pidiendo una segunda oportunidad.

La canción despierta, además, otras muchas emociones gracias a la propia personalidad del ritmo colombiano, a las percusiones étnicas de los bongos y congas, o a la línea bajística del músico porteño Guillermo Vadalá (conocido por sus trabajos con Fito Páez o Mercedes Sosa, entre otros). Los vientos, las cuerdas pulsadas o el clarinete completan una sonoridad única que el artista andaluz redondea con la cadencia de su voz.

También destaca la base rítmica del percusionista argentino Manu Uriona que se alía con el acordeón, las mandolinas, guitarras y violines marca de la «casa Fetén». En definitiva, «Júrame», nos propone un nuevo viaje por la cumbia colombiana, el son cubano o la rumba española. Soplan por todos sus rincones aires del sur.

Sobre Cantables II

«Cantables II» es la continuación de «Cantables», un proyecto que surgió en 2016, cuando Galaz y Arribas, en una de sus numerosas vueltas al mundo, conocieron al prestigioso músico argentino Sebastián Schon. Decidieron sumar letras y cantantes a unas melodías que ya contaban con su propia voz. Aquel original ejercicio creativo, se materializó en una primera entrega con la participación de artistas como Natalia Lafourcade, Jorge Drexler o Pedro Guerra. En invierno, tendrá una segunda parte en un nuevo álbum publicado por Madame Vodevil con más importantes colaboraciones.

La sonoridad de la cumbia

De la unión de las melodías indígenas y los ritmos africanos surgió en torno al siglo XVIII lo que hoy se conoce como cumbia. Alegría impetuosa a ritmo de tambores que ataba los dos lados del océano.

Su origen parece remontarse al siglo XVIII, cuando se dio la asociación entre las melodías indígenas (de características melancólicas) con los ritmos africanos (que sobresalían por su alegría y por la impetuosa resonancia de los tambores).

La forma más antigua de la cumbia es exclusivamente instrumental, ejecutada por el conjunto de tambores: llamador, alegre y tambora, así como la flauta de millo, las gaitas, las maracas y el guache.

Como particularidad, en los primeros tiempo, los cumbieros se alumbraban con antorchas o velas, un símbolo que procede de la época colonial.

A partir del siglo XX, la cumbia se popularizó en toda latinoamérica y es posible encontrar variaciones con sus propias características en Chile, Ecuador o Perú, entre otros países.

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