Borrar
Antonio Pérez en las instalaciones de IMEMAscensores. Roberto Ruiz
Antonio Pérez: «Empresa y reto tienen un paralelismo constante y diario. Son una misma cosa»

Antonio Pérez: «Empresa y reto tienen un paralelismo constante y diario. Son una misma cosa»

VI Premios Emprendedores de Cantabria ·

Hoy se reconoce toda la carrera profesional del director general de IMEM Ascensores al frente de la compañía familiar, «con la misma ilusión en el proyecto»

Jueves, 16 de septiembre 2021, 07:10

Antonio Pérez representa la segunda generación al frente de uno de los fabricantes de ascensores líderes en Europa, IMEM. A pesar de llevar ligado al proyecto que fundó su padre «desde el mismo comienzo de la empresa», la dirección llegó a sus manos hace treinta años. Tres décadas dirigiéndola «con exactamente la misma ilusión en el proyecto» y que le ha hecho merecedor de este galardón que hoy se le entrega.

–Recibe el premio a toda una trayectoria, ¿cómo lo recibe?

–Recibir un premio es una alegría que ineludiblemente debe de ser compartida. Compartida con cuantos te han acompañado para conseguirlo y compartido con muchas otras personas que sabes que son igual o mayores merecedoras de ese reconocimiento. Así he asumido siempre estos premios, con alegría compartida y la debida prudencia.

–En IMEM no solo diseñan ascensores sino que los fabrican, instalan, ofrecen mantenimiento… ¿Está en la diversificación la clave del éxito de una empresa?

–Se habla mucho de la diversificación como una fortaleza de las empresas y es cierto, pero hay que revisar después qué significa el concepto de diversificación en cada caso. Entiendo que no existe ninguna formula de éxito que pudiese funcionar con la sola condición de aplicarla. Cada sector tiene sus características, nosotros somos industriales en un sector muy concreto y, como la industria en general, con un ritmo de evolución tecnológica muy alto, y, por esa causa, cada vez con un más corto ciclo de vida del producto. Esta es una condición muy exigente en sí misma, la velocidad de crucero en los diseños se ha multiplicado. Fabricamos para los cinco continentes y debemos dominar y cumplir las innumerables normativas siempre cambiantes de los más de setenta países que cubrimos. Efectivamente, también prestamos servicio de mantenimiento al que igualmente aplicamos las últimas tecnologías y estamos muy comprometidos con él disponiendo de un equipo de profesionales muy cualificado. Tenemos en el grupo además a otras empresas filiales complementarias. Sí, efectivamente somos una empresa muy diversificada y esta característica nos ha ayudado cuantiosamente en las últimas crisis, aunque en algunas, como la establecida durante la pandemia, la afección ha sido mundial y casi simultánea.

–Le ha tocado gestionar en un corto periodo de tiempo una crisis sanitaria y el brexit, ¿cómo se sobrevive a ello?

–Pondría como ejemplo un comportamiento en el mundo de la náutica. En los buques se han de entrenar y ensayar determinadas respuestas a posibles desarreglos que pueden sobrevenir y, además, el buque debe estar preparado para ello, como ejemplo, un temporal. Tras una puesta en común de la situación con la tripulación, cada cual ha de saber qué hacer, cómo responder y en qué circunstancias. Las empresas estamos o debemos de estar acostumbradas a tener preparadas respuestas contra las situaciones adversas y en nuestro grupo se han venido desarrollando y poniendo en práctica respuestas diversas a estos acontecimientos, enseñanzas adquiridas en las diversas crisis y cambios que ha vivido nuestra economía nacional o global. Es plenamente cierto que nunca se puede tener la plena seguridad de sobrevivir a una incidencia de duración y degeneración muy duraderas, esto es evidente, pero también lo es que, como en el ejemplo, se ha de estar preparado y entrenado para responder desde el minuto uno del mejor modo posible y con capacidades de resistencia. Esto exige un previo cuidado extremo de los recursos, equipos que entienden y tienen interiorizado la adversidad como un entorno natural y una puesta en práctica de lo aprendido muy serena y resistente. Durante la pandemia y todo lo acontecido, nuestro equipo ha tenido un comportamiento ejemplar y digno de la mayor felicitación, cuestión que he llevado a cabo repetidamente. Hay que reconocer un gran esfuerzo colectivo de la mayoría de la sociedad y pongo en valor muy especialmente en este caso a la clase sanitaria que nos ha dado todo un ejemplo de valor, profesionalidad y generosidad extremas. Cada crisis, cada circunstancia que pone en peligro la economía y los mercados es un examen para las empresas y, como en todo examen, se debe estar preparado, y seguramente, también ser acompañado de cierta fortuna.

«Es muy deseable que en Cantabria se ponga en valor a sus empresas y a todo lo que significan en la evolución y prosperidad de su sociedad»

–Los datos demuestran que han superado este doble reto pero, ¿cuáles son ahora los próximos pasos?

–Empresa y reto tienen un paralelismo constante y diario. Son una misma cosa. Día a día hay que ir superándose internamente y dar respuesta a los avances de la competencia, a las interacciones de los competidores que se mueven en otras culturas y economías con salarios muy por debajo de los nuestros y que forman parte de eso que llamamos economía global jugando su papel en el mercado. Debemos ser un jugador potente en un mercado liberal al que llegan productos con tecnologías y costes de cualquier procedencia y dimensión. Nuestra estrategia y esfuerzos están enfocados en desarrollar alta tecnología con la propiedad de disponer de un grado de competitividad alto en cualquier mercado. Acabamos de hacer una inversión muy importante, que también nos ayudará a disponer de muchas mayores capacidades productivas.

–Acaban de ampliar sus instalaciones en Cantabria, ¿qué hace que una empresa con una gran expansión como la suya continúe manteniendo su apuesta por la región?

–Cuando se llega a cierto tamaño de empresa hay muchas invitaciones externas a desplazar la producción a otras localizaciones. Hay ofertas muchas veces realmente atractivas, planteamientos nuevos, opciones diferentes frente a las que hay que meditar y poner en valor muchos aspectos. La administración, en general, no ayuda, no juega su papel, no es un colaborador, no acaba de entender una actividad industrial como algo muy importante para la economía local, parece entenderlo en sus enunciados, pero no en su práctica. Hay personas dentro de la administración que efectivamente entienden este concepto básico pero, en el conjunto, el resultado está muy lejos de lo que debiera ser. Esto determina que la decisión final sea de la empresa y pese a lo mencionado, que por otras circunstancias como amor a la tierra, a su equipo, a sus colaboradores externos, decida, como en nuestro caso, permanecer donde nació. Cantabria es un autentico paraíso natural con una gran atracción, pero es muy deseable que se ponga en valor a sus empresas, que las hay absolutamente magníficas, y a su aportación, a los puestos de trabajo, a todo lo que las empresas significan en la evolución y prosperidad de su sociedad.

–¿Qué consejo le daría a los jóvenes emprendedores?

–No soy persona que se atreva a dar consejos definidos, ya que no conozco ningún preparado mágico que contenga necesariamente el éxito, y se ha de ser siempre muy prudente con las opiniones, pero es imprescindible una muy potente ilusión, la mayor concreción posible y definición del proyecto en el que se cree y perseguirlo continuamente y sin desaliento por los contratiempos. De esa fórmula desconocida, esos dos componentes son básicos, después, habrá que ir descubriendo qué otros faltan para completarla en función de la especialidad y llegar a su conclusión a través de la experimentación y oportunas correcciones. El hecho de ser emprendedor, asumir el riesgo y la decisión de llevar un proyecto adelante, ya es un gran comienzo en sí mismo.

«No conozco preparado mágico para el éxito, pero es imprescindible una muy potente ilusión, la mayor concreción posible del proyecto y perseguirlo sin desaliento»

–¿Cómo ve su futuro profesional a corto y medio plazo?

–Con independencia de mi actividad fundamental, tengo adquiridos otros compromisos ya que soy presidente de Acea, la asociación Cántabra de Empresas de Ascensores, y recientemente he sido elegido presidente en Feeda, la Federación Española de Empresas de Ascensores, por lo que también soy miembro del consejo en Ela, European Lift Asociation donde represento a Feeda en Bruselas, es decir, los intereses del sector a nivel nacional en Europa. Mi compromiso con estos cargos es de cuatro años, por lo que el futuro próximo está ocupado. Por lo demás, hay dos factores claves para el futuro a medio plazo: lógicamente por un lado, los que se corresponden con seguir manteniendo un nivel de salud óptimo y ,por otro, y no menos importante, mantener mi capacidad de aportación al proyecto. A día de hoy y después de cincuenta años de carrera profesional mi ilusión está íntegra, las circunstancias y proyecto de la empresa determinarán los tiempos.

Imem Ascensores, más de cincuenta años de fortalezas y debilidades

Era el año 1968 cuando el padre de Antonio Pérez fundó, junto a otros dos socios que más tarde retirarían su accionariado, una pequeña empresa, Imem Ascensores. Un proyecto íntegramente familiar que a lo largo de más de cinco décadas ha ido alcanzando paso a paso pequeños y grandes hitos. «Desde empezar en un muy modesto taller hasta disponer de una fabrica automatizada y con las últimas tecnologías, estar presentes en los cinco continentes mediante el desarrollo de alta tecnología aplicada a nuestro sector, la internacionalización, el mercado global, conseguir un gran equipo de profesionales, etc.», explica Pérez. Retos «continuos y encadenados que nos han traído hasta hoy». Un hoy en el que esta empresa dedicada al diseño, fabricación, instalación y mantenimiento de ascensores, cuenta con una importante posición dentro del sector tanto a nivel nacional como internacional. Y es que sus ascensores se instalan en 65 países de los cinco continentes transportando diariamente a cientos de miles de personas en el mundo. Es precisamente este éxito lo que les ha llevado a competir este año en la revista 'Elevator World' por el premio al mejor producto del año a nivel mundial. Precisamente esta misma publicación les otorgó mención «hace ya unos años» en el premio al mejor proyecto con «el ascensor panorámico sin cuarto de máquinas más grande y tecnológico hasta la fecha», que ejecutaron en el Centro Botín. Pero además de sus logros, en estos cincuenta años también ha habido debilidades a las que han tenido que hacer frente como empresa. Entre ellas, cuantas crisis han llegado a lo largo de este tiempo, así como los cambios tecnológicos que iban afectando a su sector. «A todas estas situaciones hemos respondido no solo adaptándonos, sino intentando siempre hacer diseños innovadores capaces de ser comercializados en cualquier parte del mundo añadiendo valor».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Antonio Pérez: «Empresa y reto tienen un paralelismo constante y diario. Son una misma cosa»