Un encuentro para poner en común la actualidad del emprendimiento

La actividad emprendedora en España está creciendo, con una orientación al alza para los próximos años. Sin embargo, comparando los datos a nivel estatal con los de otros países de nuestro entorno, «sigue existiendo un gran miedo al fracaso», tal y como indican desde BBVA, si bien es cierto, esos temores se van superando «poco a poco» por los emprendedores. «A pesar de que el mundo del emprendimiento ha mejorado mucho en España en los últimos años, queda aún camino por recorrer», aseguran.

Y esta es la razón de ser del encuentro digital 'Emprendemos contigo' que se está disponible a partir de hoy en la página web de El Diario Montañés, gracias a la colaboración de BBVA. Para debatir algunas cuestiones sobre el emprendimiento se unieron a este encuentro, moderado por el responsable de Economía de El Diario, Jesús Lastra, el director de Pymes Dirección Territorial Norte de BBVA, José María Fernández; la gestora de proyectos en el área de creación de empresas de Sodercan (Sociedad para el Desarrollo de Cantabria), Belén Gómez; la economista, asesora financiera y gestora de uno de los Puntos de Atención al Emprendedor (PAE), Mercedes Mazo; el cliente Alberto Aja, cliente Pyme y gerente de Dinamiza Servicios Educativos; y la también cliente Pyme Maura Payno, gerente de Wayalia.

«El 6% de la población activa está emprendiendo un negocio actualmente o desde hace menos de tres años. Con respecto al año 2022, hemos pasado del 5,5% al 6%, es decir, estamos en un proceso creciente de emprendimiento, y estamos ya en datos prepandemia», explicó Fernández, añadiendo que los problemas que surgen con respecto al emprendimiento son, principalmente, que las personas que emprenden tienen entre 25 y 50 años, por lo que «dentro de unos años los emprendedores se hacen mayores». Además, otra de las dificultades, «quizás mayor» es que el motivo de emprender de estas personas es el desempleo. «El 71% de los emprendedores lo hicieron porque estaban desempleados, no por vocación. Este es el contexto. Estamos mejor, pero tenemos un largo recorrido», puntualizó el director.

Por su parte, Gómez mostró su punto de vista desde la Administración. «Desde Sodercan, con la visión de Cantabria, tenemos claro y detectamos que la situación está mejorando. La pandemia y la pospandemia ha sido muy dura para todos los sectores de actividad, en particular para las empresas y mucho más para los emprendedores», indicó, matizando que los sectores que se están desarrollando en Cantabria, según el informe GEM, corresponden a que el 75% de las actividades que se ponen en marcha en la región están vinculadas al sector servicios (consumo y empresas); el sector primario ronda el 9%, y el sector industrial y manufacturero se establece en torno al 16% de la actividad. «¿Dónde se tiene más existo? Por mi experiencia creo que depende del emprendedor, no creo que sea por el sector, sino que depende del equipo, la oportunidad que detecta y cómo ejecuta y es capaz de movilizarla», apuntó la gestora de Sodercan.

En este mismo sentido, Mazo afirmó que la formación es «lo que más determina la idea de emprender» y que el perfil de las personas que acuden al PAE son en su mayoría hombres, mayores de 50 años, enfocados al sector servicios. «Les animo siempre a que hagan un plan estratégico y de viabilidad serio, normalmente a través de la Agencia de Desarrollo Local o de la Cámara de comercio, para que sean conscientes de dónde se van a meter. Muchas veces no tienen conocimientos sobre la empresa que van a constituir, ni demasiada experiencia», aseguró, reconociendo que desde el covid la Administración apoya al empleo, pero que no ve «mucha ayuda a la formación específica para que emprendan con cierta garantía de éxito futuro».

Durante el encuentro, dos emprendedores pudieron dar voz a las dificultades a las que se encontraron en el camino al crear su propia empresa. Así, Payno contó que creó Wayalia para aportar valor al sector de la tercera edad, apoyada por el centro de empresas de su localidad. «El asesoramiento y el acompañamiento que obtuve durante todo el proceso me ayudó bastante. El principal desafío que me encontré fueron los trámites, un poco descentralizados, yendo de un punto a otro. Te iban informando muy bien, pero es lo que hizo más largo todo el proceso», reconoció.

Aja, por su parte, se lanzó al mundo del emprendimiento por un reto personal, pues trabajaba para un tercero y siempre había tenido la inquietud de generar un proyecto propio. «Se dio la circunstancia de que coincidí con una amiga de la infancia. Nos planteamos el reto de crear un trabajo en el ámbito en el que ella se estaba desarrollando profesionalmente. Ha sido un camino divertido y complejo», admitió, declarando que el obstáculo principal al que se enfrentaron fue el desconocimiento de la parte administrativa en la puesta en marcha de la empresa. «Cerca del 80% de nuestra facturación es para el sector público, imagínate el primer día, cuando te planteas el licitar un contrato publico... vas aprendiendo con la experiencia». apuntó Aja.

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