Santander traslada por prevención frente al virus a 60 empleados de su sede central

Entre las medidas preventivas que el Santander ha previsto en sus planes de continuidad de negocio por el COVID-19, se contempla que las personas identificadas como «personal crítico y alternativo» de cada negocio o función, puedan ser trasladadas a un centro de trabajo diferente del actual o se les pida realizar su actividad desde su domicilio para que, en caso de contagio, se garantice la continuidad de la actividad.

Las 60 personas afectadas trabajan en labores de tesorería, una actividad de la que ninguna corporación puede prescindir en caso de una infección más extensa. Además, para el resto de empleados del centro corporativo de Madrid, el banco ha recomendado llevarse a casa todos los días tanto su portátil como su teléfono y así «estar preparados en caso de tener que trabajar desde casa».

El Banco Central Europeo envió el miércoles una carta a los bancos bajo su mandato, solicitando planes de personal y la resistencia de su infraestructura de tecnologías a medida que el brote se propaga por todo el mundo. «Santander está monitoreando la situación de cerca y aplicando las medidas preventivas contempladas en los diferentes protocolos de actuación interna, así como las recomendaciones de las autoridades sanitarias», ha informado la entidad.

La semana pasada otro banco, BBVA, trasladó algunas unidades de negocio, separando a sus plantillas, de su sede en Madrid. Lo hizo con un centenar de trabajadores del área de tesorería también como medida de precaución.

En el caso de otra gran empresa como Orange, este lunes informaba de que se había registrado un caso de coronavirus en una de sus trabajadoras de la sede de Pozuelo (Madrid). La empleada se encuentra en su domicilio desde el día 6, mientras que los compañeros de su entorno más cercano van a trabajar desde sus domicilios particulares durante las dos próximas semanas para evitar así mas contagios entre la plantilla de la operadora.