Cantabria baja al noveno puesto en la competitividad económica regional

Según el diagnóstico, presentado este miércoles a nivel nacional y, en el caso regional, detallado por el Colegio de Economistas de Cantabria, la autonomía ha experimentado un crecimiento de la competitividad «inferior a la media».

El colectivo profesional que preside Fernando García Andrés va más allá y recalca que Cantabria se halla en todos los casos «por debajo de la media» a excepción de en los ejes de capital humano, entorno institucional e infraestructuras básicas.

El dinamismo más notable, según las conclusiones del Informe de la Competitividad Regional (Icreg) 2023, se observa en la variación del PIB en volumen; la tasa de paro de larga duración y la tasa de temporalidad y ninis; el tráfico aéreo; la variación de la productividad; e investigadores.

Por contra, la tendencia más preocupante florece en cuestiones como Empleo involuntario a tiempo parcial y ninis; abandono escolar temprano; déficit; dinamismo empresarial; y patentes y gastos en I+D empresarial.

Por ejes, Cantabria sólo sobresale en Capital Humano, donde ocupa la cuarta posición en el Icreg, aunque con tendencia a la baja. También en niveles medio-altos aparecen el mercado de trabajo (noveno pero inferior a la media); o el entorno institucional (también noveno y por detrás del conjunto nacional).

Por contra, la Comunidad se aposenta en el espectro medio-bajo de la clasificación en Entorno económico (octava y con incremento débil); Infraestructuras básicas (octava y estabilizada); e innovación (puesto 12 y mejora inferior a la media).

En el segmento bajo aparece la eficiencia empresarial (octavo puesto), aunque con un crecimiento superior al resto en esta última actualización.

Según el decano, a pesar de la incertidumbre que ha caracterizado el año 2022 por la guerra de Ucrania y la subida de precios, se constata una «mejora sustancial» de la competitividad de las autonomías, aunque siguen persistiendo «notables diferencias» entre ellas.

El estudio revela que la competitividad promedio de las 17 comunidades autónomas aumentó un 4,9% respecto al anterior año. El informe recoge el mapa de la situación de la competitividad territorial en España, comparando la brecha existente entre territorios y realizando un análisis para detectar las tendencias y evolución de la competitividad estructural.

Madrid se mantiene un año más como la comunidad autónoma más competitiva económicamente, seguida del País Vasco, Navarra y Cataluña.

La composición del grupo de competitividad alta se mantiene en la Comunidad de Madrid, País Vasco y Navarra en un contexto de intensa recuperación, si bien Euskadi desbanca a la Comunidad Foral de la segunda posición, mientras que Madrid «refuerza» su liderazgo.

Cataluña también se mantiene como única integrante del nivel de competitividad media-alta, mientras que en los estratos bajos se sitúan Extremadura, Andalucía, Canarias, Islas Baleares, Castilla-La Mancha, Murcia, Comunidad Valenciana y Principado de Asturias.

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