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Cada actualización mensual de los datos de empleo suele venir acompañada de una pregunta: ¿son buenas o malas las cifras? En las estadísticas relativas a abril nadie podrá decir que los guarismos no son positivos, no en vano Cantabria toca máximos de afiliaciones a la ... Seguridad Social hasta acariciar los 230.000 cotizantes, superando unas barreras no vistas desde 2008. Igualmente ocurre con el paro registrado, con unos 31.488 desempleados en la región que no se alcanzaban en un abril desde hace más de 15 años, más allá de los nuevos parámetros para contabilizar a los reclamantes.
Otra cuestión, cantidad aparte, es la calidad del empleo que está generando la Comunidad. Los sindicatos ya han puesto el foco de nuevo en esta cuestión, más si cabe cuando el sector servicios ejerce un empuje evidente en las contrataciones, lo que lleva a una tasa de trabajadores indefinidos a la cola de España.
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Pablo Bermúdez
Con todo, la temporada turística y hostelera coge velocidad y eso se nota en el mercado laboral local. Cantabria creó en abril 2.462 empleos, equivalentes a afiliados medios a la Seguridad Social durante el pasado mes, hasta dejar el total de cotizantes en 229.770, según los datos publicados este lunes por el Ministerio del ramo.
Estas cifras suponen un incremento del 1,08% respecto a marzo, mes potente en cuanto a la creación de puestos de trabajo se refiere dada la celebración de la Semana Santa. Este crecimiento en las altas al sistema es el cuarto mayor de toda España, que arrojó una subida general a nivel nacional del 0,95%. Tan sólo superan a Cantabria Baleares (10,7%); Andalucía (1,22%); y Murcia (1,15%).
En relación al año anterior, condicionado precisamente porque la festividad de la Semana Santa coincidió en abril en 2023, la región gana 2.142 afiliaciones de media, una subida del 0,94%. Aquí, como ya es recurrente mes tras mes, la velocidad es menor a la del resto del país, que se anota una mejora interanual del 2,36%. De hecho, tan sólo Extremadura (0,57%) ha creado menos empleo que Cantabria en los últimos 12 meses.
En cuanto a la evolución del paro, esto es, las personas apuntadas en las oficinas del Servicio Cántabro de Empleo (Emcan) que buscan una oportunidad laboral, los desempleados bajaron en 538 trabajadores, un 1,68% menos, hasta dejar 31.488 nombres y apellidos en las bases de datos de la Administración, según las estadísticas ofrecidas por el Ministerio de Trabajo que pilota Yolanda Díaz. Con todos los matices ya hechos con anterioridad en relación a los fijos discontinuos, el descenso se queda por detrás del conjunto de España, que se situó en el 2,22%.
En el espejo de abril de 2023 la región también sale favorecida: 938 parados menos, lo que supone una disminución del 2,8%. Aun así, muy por detrás del país, que registró una caída del 4,37.
Estas cifras se explican claramente por la pujanza del sector servicios, que perdió 373 desempleados. No obstante, todos los campos de actividad presentan mejoras. La agricultura tiene 27 demandantes menos; 55 la industria; 43 la construcción; y 40 el colectivo sin empleo anterior.
La contratación también evidencia esa mayor velocidad de la economía, propia de la coyuntura primaveral y antesala de la temporada estival. Cantabria firmó 13.810 contratos, de los cuales 10.370 correspondieron al ámbito de los servicios, aunque también destacan en este apartado los 2.789 rubricados en el negocio industrial.
De ese total, 4.172 fueron indefinidos y 9.636 temporales. El sumatorio representa un 16,5% más que en marzo pero un 9,02% menos que en 2023, un repliegue casi dos veces superior a la media.
En cuanto a la contratación indefinida, los datos de abril superan un 13,8% los de marzo, pero ya son peores que 12 meses antes, un 2,6% menos, frente al 5,4% en positivo de la media española. Respecto a los empleos provisionales, se disparan un 18,5% respecto a marzo, pero bajan un 11,5% en relación a 12 meses antes. En cambio, la temporalidad nacional subió un 12,9% en el último año.
Como mayor nota positiva, el citado récord de afiliación. De esas 229.770 altas medias, la mayoría de ellas está inscrita en el Régimen General, el más numeroso del sistema. En concreto, 187.193 personas en la región, de las que 4.490 pertenecen al servicio especial del Hogar y 629 al agrario. En la comunidad autónoma hay además 41.291 autónomos y 1.285 trabajadores inscritos en el Régimen del Mar.
Con estos datos, las reacciones no se hicieron esperar. Desde la vertiente empresarial, la directora de CEOE-Cepyme Cantabria, Isabel Cuesta, apuntó que el «sector servicios, como era de esperar en estas fechas, es el que mejora sustancialmente las cifras de empleo en abril influido por el comienzo de las contrataciones, algo que observamos cada año en estas fechas».
La directora general de la patronal se felicitó por el descenso «en todos los sectores y especialmente en los colectivos más vulnerables, mujeres y jóvenes sin experiencia laboral»; pero al mismo tiempo llamó la atención sobre el hecho de que «el descenso que se produce en Cantabria está por debajo de la media española, en nuestros datos sigue pesando mucho la temporalidad de sectores económicos completos como el relacionado con el ocio».
Por el lado de los sindicatos, el secretario de Empleo de UGT, Julio Ibáñez, valoró las tendencias de la región, pero advirtió de que «este crecimiento de la cantidad del empleo en Cantabria no se corresponde a la calidad del mismo si se compara con el resto de España», tras recalcar que «el pasado mes de abril confirmó que sigue aumentando la contratación indefinida en Cantabria pero con una media de 14 puntos menos que en España».
El sindicalista subrayó que «es indudable que la calidad del empleo es muy mejorable en Cantabria, donde un 30% de los contratos son indefinidos, el menor porcentaje de ellos de todo el país junto con el de Navarra y País Vasco y lejos del 44% de la media española», remachó.
Su homóloga de CC OO, Laura Lombilla, opinó que «a pesar de que la caída del paro siempre es positiva y, además, es el mejor mes de abril desde el año 2008 y continúa la tendencia de descenso del desempleo en la que llevamos desde febrero, tenemos que insistir en la excesiva dependencia del mercado laboral cántabro del sector servicios, que supone el 69,33% de la reducción del paro en abril». A más, incidió en que «en las franjas de edad que más paro acumulan, tanto en el caso de los hombres como de las mujeres, son en las personas mayores de 45 años, por sus dificultades de empleabilidad».
Mercedes Martínez, secretaria general de USO, se centró de nuevo en la calidad del empleo. «El mercado laboral cántabro deja datos para la reflexión. El último año nuestra región ha borrado de sus listas del paro a 906 personas según el SEPE. En el mismo periodo han aumentado en 1.322 los demandantes de empleo 'ocupados', un crecimiento del 16,3% difícilmente entendible si no fuera porque en ese epígrafe la última reforma laboral coloca a los demandantes de empleo que han conseguido un contrato de temporada, los llamados fijos discontinuos. La otra cara de la moneda, la contratación, también define y perfila nuestro mercado laboral actual. Según el SEPE, han hecho falta casi ocho contratos indefinidos para sacar a un parado del registro en Cantabria».
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