«Cantabria tiene que cuidar las principales inversiones industriales»

García-Legaz, consejero de Dia y AENA Internacional, expresidente de AENA, de Cesce, ex secretario de Estado de Comercio de España, será el protagonista este martes, día 17, del Foro Económico de El Diario Montañés para hablar de 'La economía mundial 2020'

–¿A que panorama nos enfrentamos en la economía mundial?

–Las reglas de juego han cambiado en los últimos 3 o 4 años. China se ha incorporado a la Champions League y puede dar el 'sorpasso' a Estados Unidos en poco tiempo. Esto ha provocado el estallido norteamericano y ha abierto la guerra comercial. El cambio geopolítico hacia e Pacífico y Asia y el proteccionismo de EE UU está suponiendo que Europa, y por tanto España, se vea afectada en un momento de desaceleración de la economía mundial. Europa está pagando los platos rotos en mayor medida. Está siendo la gran pagana. La pregunta es qué va a pasar y qué capacidad van a tener las economías de aplicar nuevas experiencias.

–No cabe duda de la repercusión en el comercio exterior...

–La desaceleración está afectando a España porque es importante en países como Alemania, Francia, Italia y Reino Unido. El 67% de nuestro comercio exterior se dirige a Europa. Sin embargo, el mercado chino es cada vez más importante y Estados Unidos es el segundo más importante después del europeo. Además, tenemos el 'Brexit'. El británico es el segundo mercado para España y primordial para el sector agroalimentario y de componentes de automoción. Todos los escenarios que se prevén son malos y la capacidad que tiene un Gobierno de actuar es limitada y no va a compensar la ruptura de una relación tan profunda. Hay que esperar al dibujo final.

–¿Está preparada Europa para el impacto de los cambios en el mercado mundial?

–Junto con China está siendo el bloque más responsable de todos. En la última década ha llevado a cabo una política comercial muy inteligente firmando y renovando convenios comerciales con diferentes países y zonas (Canadá, México, Mercosur, Singapur, Japón, Chile, Perú, Colombia...) que han abierto oportunidades. El balance es muy bueno y las empresas europeas encuentras nuevos mercados para su crecimiento. Ya se están viendo resultados. La UE ha hecho bien las cosas.

–¿Y qué se avecina para España?

–Hay que tener en cuenta que la Unión Monetaria sigue siendo frágil. Entre 2009 y 2012 se estuvo cerca del estalllido y se produjeron enormes turbulencias con el caso de Grecia y la caída del bono español e italiano. El incremento del gasto público con políticas insostenibles desde el punto de vista financiero es suicida. Los mercados se ponen nerviosos y empiezan a mirar a España porque estiman que no es sostenible la deuda pública a largo plazo y no se van a cumplir los objetivos pactados con Bruselas. Hay que mantener las reformas que han funcionando como es el caso de la laboral y del sistema de pensiones. Dar marcha atrás en estas dos reformas es un riesgo para España. Por otra partem es importante llevar a cabo una política fiscal adecuada.

–¿Qué se puede hacer en Cantabria con la situación económica l?

–Hay que ser extremadamente cuidadosos con el tejido industrial. Es responsabilidad del Gobierno regional apoyar a las inversiones claves de la industria en un contexto de una competencia brutal. Una reforma laboral mal planteada o una errónea política energética pueden ser dañinas para las empresas y producir decenas de deslocalizaciones. Especialmente importantes son las decisiones de política energética. Hay que tener presente lo que ha pasado en Pontevedra o Asturias con numerosas deslocalizaciones. El Ejecutivo cántabro tiene que utilizar todas sus herramientas, poner toda la carne en el asador para preservar las principales inversiones industriales en sectores como la industria química, la automoción, la construcción...Europa central y los países asiáticos están ya siendo importantes competidores, con una mano de obra cualificada y mucho más barata. De otro lado, Cantabria tiene la ventaja de su sector servicios, con mucho peso y creación de empleo. Santander se ha convertido en un centro de referencia turística vinculado a la cultura y el arte y al nivel de otras grandes capitales europeas. Es un centro para turismo de poder adquisitivo y que no es necesariamente estacional. El Centro Botín y la colección del Santander son focos importantes. En mi opinión, habría que insistir en mejorar la conectividad aérea con más destinos negociando con las aerolíneas y AENA. Además, hay que promocionar la relación del tejido industrial con la Universidad para que el personal que se forme en la región pueda permanecer en ella. No conviene olvidar que el sector tecnológico puede ubicar las empresas donde quiera. Málaga es el ejemplo y Cantabria podría serlo. En definitiva, es una región con posibilidades siempre que cuide a su industria y mejore su conectividad.