Los concursales de Sniace piden extender un año más el cobro de sus honorarios

Al menos así se desprende de la solicitud efectuada al Juzgado de lo Mercantil nº 2 de Madrid por los administradores concursales de la organización, José Luis Ramos Fortea y Pedro Vilella, que han trasladado al tribunal la petición para extender un año más la liquidación de honorarios para poder acometer los diferentes trámites del procedimiento hasta la disolución definitiva.

Los concursales, como ya hicieran en 2021, solicitan declarar como «imprescindible» para la liquidación el cobro de sus emolumentos, de modo que el juez pueda prorrogar en un nuevo auto la concesión otorgada el ejercicio anterior.

En paralelo, continúa avanzando el proceso de liquidación después de que los administradores de Sniance optaran por no adjudicar la totalidad de la unidad productiva a la única oferta presentada ante las «dificultades» que ostentaba, en referencia no sólo a su baja cuantía, sino igualmente a su complejo encaje en el plan de liquidación. La puja se centraba únicamente en el negocio de la fibra y dejaba de lado la celulosa.

Los interesados en acceder a los lotes en que están distribuidos los activos tienen todavía cinco semanas, hasta el 20 de julio, para presentar sus propuestas. Cabe recordar que en la fase anterior ya se recibieron dos sobres para quedarse con los activos forestales que preserva Sniace.

Por el camino, el debate sobre lo que debe ser el futuro de los terrenos y sus capacidades industriales, con un amplio consenso sobre la necesidad de preservar un suelo que podría servir para ser ofertado a nivel de país para atraer un proyecto sólido en un proceso en que Europea está volviendo a relocalizar producciones.

En contraposición, el futuro Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Torrelavega, que aprobó inicialmente el Pleno municipal el pasado 3 de mayo -para que sea definitivo aún requiere tiempo y trámites- y que incluye una revisión profunda de este espacio con la idea de abrir una nueva etapa en el complejo, que podría albergar «decenas de empresas».

Además, aunque sigue estableciendo un uso «predominante industrial», también fija un porcentaje de entre un 20% y un 30% de uso comercial.