La contratación indefinida se duplica en Cantabria en los dos primeros meses

La Consejería de Empleo del Gobierno regional, la patronal CEOE y los sindicatos UGT y CC OO valoran de forma positiva los primeros efectos de la reforma a los que se esperan otros como mejorar la precariedad que todavía padecen las mujeres, que son las que tienen los contratos peores, de menos jornada y, por tanto con peores salarios. Además, no podemos perder de vista que todavía la contratación eventual sigue siendo la más frecuente. De los 26.351 contratos firmados en enero y febrero de este año, 24.099 (el 91,45%) eran eventuales. El aumento de la contratación ha sido del 21,96%.

La Consejería de Empleo y Políticas Sociales considera una «gran noticia» que se hayan disparado los contratos indefinidos y manifiesta su «satisfacción» por las personas trabajadoras que han logrado «mayor seguridad y estabilidad» pues «el empleo es un pilar básico para desarrollar un proyecto de vida con ciertas garantías». Además, el departamento que encabeza la consejera Ana Belén Álvarez cree que «es una muestra clara del excesivo abuso que se estaba realizando de la contratación temporal».

«El hecho de que los contratos indefinidos se hayan duplicado incluso antes de la plena entrada en vigor de la Reforma Laboral demuestra que en muchas ocasiones se estaba recurriendo a la contratación temporal por una cuestión de inercia o de cultura, cuando en realidad eran puestos de carácter estructural y, por tanto, debían de tener necesariamente ese carácter estable», sostiene el director del Servicio Cántabro de Empleo, José Manuel Callejo. A su juicio, es incuestionable que nuestro mercado laboral tiene un problema de temporalidad -en España (24,2%) es diez puntos superior a la media de los países de la zona euro (14,2%)-, según datos de Eurostat. «Siempre hemos defendido que la contratación indefinida es beneficiosa tanto para las trabajadoras y los trabajadores, que tiene mayores garantías de estabilidad, como para la parte empresarial, dice Callejo, y añade que «la estabilidad en el empleo -continúa exponiendo- también es un factor dinamizador de la economía, que fortalece nuestra industria y favorece el consumo, lo que redunda en favor del tejido empresarial vinculado al ocio, la cultura o la restauración».

Julio Ibáñez, secretario de Empleo de UGT Cantabria cree que, aunque aún es pronto para hacer una valoración exhaustiva, «los datos que se van conociendo con respecto a la contratación confirman que la indefinida puede y debe ser el modelo de referencia. Se va demostrando que la precariedad y la inestabilidad que representa la contratación temporal no contribuyen a que se firmen más contratos, sino todo lo contrario».

«Más allá de los números totales, se puede destacar el gran incremento de contratos fijos-discontinuos, que va a suponer una mayor estabilidad y calidad en el empleo para muchas personas. Aun así, de estos mismos datos se desprende que queda mucho por hacer en otros aspectos; la gran diferencia entre hombres y mujeres en lo que respecta a la contratación parcial sigue siendo muy importante y aún no ha comenzado a corregirse; lo mismo se puede decir de las diferencias que se aprecian tanto en volumen como en calidad de los contratos según la edad de quienes los suscriben. Y esto es lo que la reforma laboral va a permitir que se consiga, si bien será en un plazo más amplio, a través de la negociación colectiva y a ello también deben contribuir los planes de igualdad», dice Ibáñez.

«Desde Comisiones Obreras tenemos el convencimiento de que la reforma laboral va a mejorar sustancialmente el número de contratos indefinidos, como ya estamos observando en los meses de enero y febrero. Si se consolida esta tendencia los datos supondrían un éxito sin precedentes», analiza Laura Lombilla, responsable de Empleo del sindicato y añade que «después de luchar diez años padeciendo la reforma laboral de 2012 del PP, estamos esperanzados porque la nueva regulación tiene elementos sustanciales para cambiar el marco de las relaciones laborales».

Sin embargo, Lombilla indica que las diferencias sustanciales en cuanto a ocupaciones y tipo de jornada entre hombres y mujeres. Ellas tuvieron 973 contratos indefinidos a jornada completa y 948 a jornada parcial, frente a los hombres que tuvieron 1573 indefinidos a jornada completa y 391 a jornada parcial.

Desde CEOE. Cepyme Cantabria indican que «los datos de los meses de enero y, especialmente, los del mes de febrero comienzan a marcar una tendencia en cuanto al incremento de la contratación indefinida en España que tiene su réplica en Cantabria». La patronal señala que en febrero se han notificado 14.792 contratos. De ellos, el 15,5% eran de carácter indefinido y el 84,5% temporales. Esto supone un aumento de casi 10 puntos respecto a las cifras anteriores a la aprobación de la reforma laboral. «En este sentido hay una relación que parece directa entre los dos hechos».

«En estas semanas que han transcurrido desde la aprobación de la reforma, ya estamos comenzando a vislumbrar alguno de sus efectos, por ejemplo, en el incremento de las cifras de la contratación indefinida que ya están aplicando las empresas para adaptarse a este nuevo marco normativo», concluye la patronal.