El covid, la expectativa de reforma laboral y la inflación reducen un 30% la firma de convenios en Cantabria

Sin embargo, el incremento salarial medio se ha incrementado considerablemente pasando desde un 1,71% en 2019 a un 4,21% hasta mayo de 2022 y siendo de un 1,77% en 2020 y bajando a un 1,32% en 2021.

Además, el número de trabajadores afectados por los convenios ha bajado de los 101.013 de 2019 a los 63.924 de 2021. En 2020 fueron 98.113 y hasta el 12 de mayo de este año, 21.063.

57convenios de Cantabria contabilizados hasta el 12 de mayo.

21.063son los trabajadores afectados en la región por estos 57 convenios.

Los datos del Icane sobre los efectos económicos incluyen tanto los que inician sus efectos en el año de referencia como los de cuya vigencia es de dos o más años que pactan una revisión para el año de referencia.

Julio Ibáñez, secretario de Empleo y Formación de Cantabria, valora que en 2021 la expectativa de la reforma laboral, junto a otros factores como la inflación que comenzó en la segunda mitad del año, «dificultaron la negociación colectiva, lo que se refleja claramente en el escaso número de convenios firmados ese año, muy inferior al de años anteriores, así como en el menor número de trabajadores afectados». En cuanto a 2022, el sindicalista explica que la inflación se ha convertido en el factor determinante de la falta de acuerdos. «Las cláusulas de revisión salarial son una reivindicación a las que los sindicatos no quieren renunciar para paliar la pérdida de poder adquisitivo y es el principal escollo que impide llegar a acuerdos».

En convenios sectoriales tan importantes como el de hostelería las negociaciones se han atascado, aunque por otros motivos. Es el caso del convenio del metal, «donde los trabajadores se niegan a ceder ante la propuesta empresarial de eliminar derechos adquiridos y consolidados hace mucho tiempo, como el plus de distancia o la jubilación parcial con contrato de relevo», recuerda Ibáñez. Precisamente hoy estás prevista una asamblea convocada por CC OO, UGT y USO y posteriormente una concentración junto a la sede de la patronal Pymetal.

El sindicalista estima que la casuística de la mala situación de la negociación colectiva es muy amplia ya que existen convenios bloqueados desde hace años, cuando las circunstancias eran muy distintas a las actuales: «El comercio metal o el textil, entre otros, llevan varios años de negociaciones infructuosas, por diferentes motivos, a los que se suma ahora la inflación y, por tanto la cláusula de revisión».

En la misma situación se encuentran algunos convenios de ámbito estatal, como el del 'contact center', que afecta a unos dos mil trabajadores en Cantabria y que hoy están convocados a secundar una jornada de huelga, como consecuencia de la inmovilidad y dureza de la patronal en las negociaciones, tanto en materia salarial como en otras que están pendientes de resolver desde hace años.

Tampoco se debe olvidar a sectores donde trabajan muchas personas, como es el de las pequeñas clínicas y consultas de sanidad privada (no hospitales), con muy pocos trabajadores/as en cada centro, que carecen de convenio sectorial y están sujetas a salarios mínimos y condiciones muy poco ventajosas.

Julio Ibáñez considera que con todo este panorama de la negociación colectiva la conflictividad laboral va a ser inevitable en Cantabria si no se logran aproximaciones en las mesas negociadoras de los convenios,

Hoy se abre un primer paso con la huelga de los 'contact center' y la concentración del metal, un sector con un importante número de trabajadores y empresas.

En el caso de la hostelería, los sindicatos CC OO y UGT han lamentado que la patronal se haya levantado de la mesa porque no han aceptado regular la contratación de los fijos discontinuos, como obliga la reforma laboral en vigor.