Ecrimesa abrirá una planta en EE UU con una inversión de 5,5 millones y 30 empleos

El proyecto, en el que la corporación cántabra lleva trabajando intensamente durante todo 2022, estará a pleno rendimiento en junio según las últimas estimaciones. La planta, que servirá a Ecrimesa como base en Estados Unidos, que será la punta de lanza para ampliar su negocio y presencia en aquel mercado, se ubica en la localidad de Thomasville, en el estado de Georgia.

Para ello, según detallan medios locales -la compañía ha declinado hacer declaraciones al respecto-, operará con una nueva marca, Mimecri USA, en unas instalaciones de 2.300 m2. Con esta fábrica no sólo abastecerá a sus clientes actuales, sino que podrá expandir su actividad en Estados Unidos.

Respecto al negocio que llevará a cabo el Grupo al otro lado del Atlántico, será similar al que desarrolla desde Cantabria. A más, las autoridades locales destacan entre las razones para instalarse en Thomasville que la compañía quería asentarse en un entorno favorable al uso de armas como es el suroeste de Georgia. No en vano, con sus modernas técnicas de producción, la firma cántabra fabrica pequeñas partes metálicas de pistolas como los gatillos, entre otros elementos ligados al ámbito de Defensa. En paralelo, se focalizará en otras actividades y sectores como el sanitario, automoción o la industria aeroespacial, según informó semanas atrás a la cadena de televisión estadounidense ABC Shelley Zorn, responsable de desarrollo económico de Thomasville y uno de los apoyos principales de Ecrimesa para concretar esta operación.

Previamente, en declaraciones al medio regional South Georgia Magazine, la propia Zorn señaló que «Mimecri encaja perfectamente en Thomasville. Es una empresa familiar, con gente estupenda y puestos de trabajo de gran calidad. Habrá oportunidades para directivos, operarios de maquinaria y personal de oficina», afirmó, para agregar que «serán puestos de trabajo cualificados con salarios muy competitivos», confió.

A partir de ahí, más novedades y una hoja de ruta ambiciosa. «Mimecri tiene planes más allá de esta primera fase para crecer a medida que la empresa amplíe su base de clientes en EE UU», adelantó.

Respecto a las facilidades políticas y administrativas para que la empresa cántabra pudiera acometer esta expansión, la responsable añadió que «el estado de Georgia se ha posicionado realmente como líder en la industria de las armas de fuego. Además, un entorno favorable a los negocios es realmente importante a nivel local y estatal, especialmente para las empresas extranjeras», aseveró.

El Grupo Ecrimesa, rumbo a una trayectoria de 60 años como empresa familiar, ha experimentado un notable crecimiento que le permite en la actualidad albergar una plantilla por encima de las 300 personas.

Dentro de su exitosa actividad, avances tecnológicos como el Moldeo por Inyección de Metales (MIM), una tecnología apropiada para fabricar piezas de geometría compleja, de tamaño pequeño o medio en un amplio rango de materiales, como aceros inoxidables, aceros de baja aleación, soft magnetic, acero de herramientas y cerámicas. Asimismo, la impresión 3D con metales.

En esa apuesta por el I+D, una inversión anual en este campo de 300.000 euros, para superar las 1.700 toneladas de acero fundido por cada ejercicio.

La empresa no se limita únicamente a la fabricación por microfusión o MIM, sino que igualmente participa de los proyectos de sus clientes, de manera que se erige como un partner durante todo el proceso, desde el diseño de la pieza y la selección de la tecnología más adecuada para la fabricación, hasta el mecanizado y los tratamientos térmicos finales.

Un sólido camino que en unos meses abrirá una nueva etapa con el desembarco en Estados Unidos, así como el sinfín de oportunidades que la inversión puede traer en un mercado tan variado y enorme como el del gigante americano.