Las empresas cántabras solicitan una «avalancha» de avales para sortear el virus

Las entidades bancarias que operan en Cantabria han recibido desde el lunes una «avalancha» de solicitudes de empresas de la Comunidad para acogerse a la línea de avales movilizados por el Gobierno por un importe de 100.000 millones a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) para facilitar y conseguir abaratar así la concesión de créditos y líneas de liquidez por parte del sistema financiero, una de las necesidades imperiosas hoy en día para pymes y autónomos con el objetivo de que puedan sobrellevar el golpe provocado por la expansión del coronavirus y la parálisis económica derivada de las medidas de contención de la pandemia.

El director territorial de Banco Santander en Cantabria, Manuel Iturbe, confirma que «hemos recibido mucha demanda de solicitudes y de información. Estamos resolviendo algunas dudas que tenían los clientes».

Iturbe va más allá y precisa que el tramo correspondiente a autónomos, pymes y micropymes está «saturado», mientras que la línea reservada para gran empresa aún tiene remanente. Cabe recordar que el Estado irá habilitando tramos para ir dando respuesta a las demandas empresariales. El primer fondo, de 20.000 millones para todo el país, se distribuyó entre las entidades en función de su cuota de mercado para que fueran asignando según recibieran peticiones.

Eso sí, como explica el director de Bankia en Cantabria, Julio Rodríguez-Acha, «las operaciones están en curso pero aún estamos esperando a que el ICO dé la autorización para que esa liquidez llegue a las empresas. Todavía no se ha producido esa aprobación por parte del Instituto, que esperamos llegue de forma inminente». El directivo confirma la tendencia constatada por Banco Santander. «Sabíamos que la demanda iba a ser elevada. Ha sido una avalancha. La actividad en Cantabria podría definirse como la más activa de la Dirección territorial norte de Bankia en este campo». En cifras, hasta el martes se contabilizaban peticiones por cerca de 13,5 millones en el ámbito de pymes y autónomos, para un global cercano a los 25 millones sumando la gran empresa.

Fuentes financieras consultadas por este periódico confirman que en la Comunidad el tejido corporativo ya ha sobrepasado con sus necesidades el importe de los avales ICO para la región, que aunque no está dividido de forma territorial, por criterios de Producto Interior Bruto (PIB) y población se acercaría a los 200 millones en este tramo inicial.

Según las mismas fuentes, Liberbank acapararía cerca de un 25% del mercado y Santander un 22%, por lo que casi entre ambas organizaciones concentran 100 millones en garantías estatales.

Desde la propia Liberbank tranquilizan a los interesados y recuerdan que no hay que preocuparse por la avalancha de peticiones, ya que el siguiente tramo de liquidez, correspondiente inicialmente para mayo, se activará de forma automática.

Desde CaixaBank igualmente admiten que, en lo que concierne a la región, «la demanda supera a la oferta», sobre todo en el ámbito minorista. Por su lado, BBVA ya comunicó el martes que había agotado su parte. Banco Sabadell confirmó asimismo que ha acabado con su asignación y que las operaciones formalizadas en Cantabria superan su cuota de mercado. Empezará a firmarlas el lunes.

Lo que sí han constatado desde CEOE-Cepyme Cantabria son las quejas de algunos empresarios interesados en acceder a estas garantías estatales, pero que se han topado con que algunas entidades han querido incluir en la concesión la incorporación de algún producto propio, como seguros. La propia Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha anunciado que vigilará estas prácticas.

El aval del Estado (80% como máximo del importe solicitado) supondrá la reducción de riesgo de las operaciones y por lo tanto el abaratamiento del tipo de interés aplicado. Banco Santander anunció ayer que amplía igualmente su plan de ayudas a familias y empresas con nuevas medidas para los clientes afectados por la crisis del coronavirus.