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Miguel Ángel Pérez Jorrín
Jueves, 26 de mayo 2016, 19:25
Sniace ha logrado un éxito rotundo en su ampliación de capital al cubrirla en su totalidad en los dos primeros tramos, los destinados preferentemente a los actuales accionistas de la entidad y a los compradores previos de derechos de suscripción. Entre ellos suscribieron íntegramente los 155,9 millones de acciones, por un importe efectivo total de 15.598.433 euros. Ante tal demanda, que excedió en 1,5 veces la oferta, no hubo necesidad de abrir el tercer tramo de la ampliación de capital.
Según indicó la sociedad en un hecho relevante enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), durante el primer tramo de la oferta, el periodo de suscripción preferente para accionistas o inversores que hubieran comprado derechos de suscripción, que finalizó el 19 de mayo, se adjudicaron un total de 153,2 millones de acciones de Sniace, representativas aproximadamente del 98,24% de las acciones ofrecidas en el marco de la ampliación de capital.
Con el seguro activado de la ampliación de capital lograda, la dirección de Sniace no cedió ayer en la negociación sobre las condiciones de reincorporación de la plantilla a Sniace tras su rechazo a aplicar del Plan Laboral.
La oferta de la dirección es clara despido, indemnización y reingreso en la fábrica de los 340 trabajadores que pueden hacerlo en este momento. Ni hablar del salario social de 800 euros para los que no comiencen a trabajar de inmediato.
Una parte del comité (UGT, CC OO y SU) piden que se mantenga la inicial reversión de los despidos para 57 trabajadores en condiciones de entrar en un proceso de prejubilación mediante contratos relevo, que se aplique un salario social de 800 euros y que se mantenga la antigüedad de los trabajadores en su nueva situación, pese a haber sido previamente despedidos e indemnizados.
Los representantes de USO plantearon a la dirección que se analice la posibilidad de revertir el despido para los mayores de 50 años, con el fin de asegurar sus condiciones de jubilación.
La empresa se comprometió a estudiar los costes de estas peticiones y a dar una respuesta inmediata. Su intención es convocar una nueva reunión el próximo martes en la que se tratará de cerrar un acuerdo. Antes presentará también otro documento en el que plasmará las partes del plan laboral que pueden respetar y que hacen referencia a las condiciones del nuevo convenio colectivo, ya pactadas.
Para el Segundo tramo quedaron disponibles 2,7 millones de acciones. Para este, un total de 165 accionistas o inversores con derechos habían solicitado 81,9 millones de acciones. El exceso de demanda forzó a realizar un prorrateo de los 2,7 millones de acciones disponibles por el cual cada solicitante recibió el 3,35 % de las acciones adicionales que había pedido.
Cubierta pese a todo
Y este holgado resultado de la ampliación se ha logrado pese a las advertencias reiteradas de múltiples fuentes sobre los riesgos de la operación. La CNMV los advirtió reiteradamente, tanto al admitir la vuelta a la cotización de las acciones de Sniace como al autorizar la ampliación poco después. También ha habido un consenso mayoritariamente negativo de los analistas de inversiones, con constantes apelaciones a la dificultad que entraña cumplir el Plan de Viabilidad de Sniace.
Nada de esto parece haber afectado a los accionistas de Sniace, por lo menos a los mayoritarios. Dos de los tres mayores han acudido a la ampliación y han liderado la operación con sus declaraciones públicas e incluso mediante un comunicado a la CNMV por parte de la empresa poco antes de cerrarse los plazos. Félix Revuelta, el principal accionista ha invertido en la ampliación 3 millones de euros , un 20% de los 15,6 millones que Sniace ha recaudado. Hasta ahora, Revuelta poseía una participación del 10,10% en Sniace.
A la inversión de Revuelta se ha unido la del industrial asturiano Sabino García Vallina, el segundo mayor accionista, con un 9,90% del capital. En su caso, con una aportación de 1,5 millones de euros. Ambos habían anunciado ya en la reunión que celebraron con el Gobierno regional el pasado mes de enero su intención de acudir a la ampliación de capital, de la que con un total de 4,5 millones han cubierto casi un tercio.
El tercer gran accionista, el empresario de Torrelavega José Luis Fernández Martínez, no ha participado. Propietario del Grupo San José, 8, Fernández Martínez, que hasta ahora tenía el 8,9% del capital de Sniace, rechaza desde hace tiempo la gestión pasada y actual del presidente de la compañía, Blas Mezquita, a quien considera culpable de la quiebra de Sniace y para el que reclamó la destitución infructuosamente en la última Junta General de Accionistas celebrada el pasado verano en Madrid.
Con la suscripción total, Sniace pasará a tener un capital social de 23,4 millones de euros, representado por un total de 233,9 millones de acciones de 0,10 euros de valor nominal. Sniace cerró ayer su cotización a 0,32 euros, tras bajar un 4,18% en Bolsa.
El resultado positivo de la ampliación fue anunciado por el propio Mezquita al comité de empresa en el transcurso de la reunión celebrada ayer en la sede de la fábrica para abordar la negociación sobre el plan laboral y las formas de reincorporación a la empresa de los trabajadores. Mezquita ya había asegurado que la ampliación supone «cubrir una etapa decisiva en la hoja de ruta que la compañía ha diseñado para recapitalizarse y normalizar su actividad productiva».
Se espera que en los próximos días la empresa anuncie el inicio de los trabajos de rehabilitación de la fábrica, cerrada desde septiembre de 2013, y de la puesta a punto de la maquinaria y las infraestructuras (incluyendo la caldera de carbón para proporcionar energía y vapor) para reanudar la producción. En anteriores ocasiones se ha indicado que serán necesarios al menos dos meses de trabajo para dejar todo listo.
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